Capítulo 3 (Miles)

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Viernes. 

He venido a una fiesta con mis amigos, Craig, Cameron y Cole y, ahora, nos encontramos sentados en la escalera de la entrada. 

-Va a venir Christian, ¿os parece bien?- pregunta Craig. Christian es su novio.

-Por mi vale.- respondo. 

-Genial, voy a avisarle.- se levanta para alejarse un poco y llamarle.

-¡Dile que traiga hierba!- le grita Cole.

-Vete a la mierda.- contesta antes de marcharse.

-Voy a por algo de beber.- informo. Me levanto y voy dentro de la casa. Nada más entrar, veo a Rose sentada con mi primo Chris y su novia, que me está mirando, enseguida intenta apartar la mirada, pero ya la he pillado. 

Voy hacia ella y me siento a su lado rodeándola con el brazo, pero me lo aparta.

-Una chica con carácter.- digo sólo para molestarla.

Se levanta del sofá para irse y le intento agarrar la muñeca para que no lo haga. 

-¿Qué haces?- pregunta cabreada. 

-No tienes porque irte, podemos ser amigos. 

-No creo que eso pueda ser posible por muchas razones.- ¿qué razones?

-¿Podría saber cuáles?

-A ver, eres un capullo integral.- <<Auchh, eso ha dolido>>, no puedo evitar reírme. 

-¿Alguna otra?- pregunto cómo si lo que ha dicho no me importará.

-Anoche te peleaste con mi hermano.- ¿Su hermano? ¡Mierda! No me digas que su hermano es Hunter, joder.

Me terminó de un trago la bebida que he cogido en la mesa de la entrada y me marcho. No puedo hablar con ella, su hermano y su pandilla podrían matarme, lo sé. Vuelvo con estos afuera y Christian ya ha llegado. 

-Hola, tío.- digo ofreciéndole mi mano como saludo.

-Hola, colega.- acepta el saludo y nos estrechamos la mano. 

-Ha traído la hierba.- dice Cole enseñando la bolsita.

-De puta madre.- digo sentándome a su lado.- Justo lo que necesito.

-No tienes buena cara, ¿ha pasado algo?- me pregunta Craig en voz baja.

-No pasa nada.- respondo.- Dame una calada.- le digo a Cole. 

Cole me lo pasa y le doy una calada. El humo me llega a los pulmones, creando una sensación increíble dentro de mí.

-¿No podéis dejar de fumar esa mierda?- dice Craig. Él y Cameron son los únicos del grupo que no les va esto de fumar.

-Cierra la boca.- contesta Cole. 

-Como queráis.

Se levanta y se marcha dentro de la casa.

-Eres idiota.- le digo a Cole.

-¿Qué?

Sin darle ninguna respuesta, me levanto para perseguir a Craig y que no esté solo, porque he visto a John y siempre se mete con él por salir con Christian. 

Al entrar, me fijo en que Rose ya no está sentada en el sofá y vuelvo a salir, dado que he perdido de vista a Craig. 

Cuando salgo, veo a Rose marcharse sola balanceándose hacia los lados, me parece que ha bebido de más. Y, por alguna extraña razón, mi cuerpo me impulsa a coger el coche e ir a por ella, no puedo dejar que se vaya sola.

Después de ir un rato conduciendo en lo recto de la calle, la encuentro sentada en un banco. Paro enfrente de ella y bajo la ventanilla para que vea que soy yo. 

-Sube, te llevo a casa.- digo abriendo la puerta.

-No, no hace falta, me voy andando.- se levanta y empieza a andar. Entonces, avanzo hasta llegar a ella.

-Sube, no seas tonta, no puedes ir sola por la calle a estas horas de la noche.- finalmente, me hace caso y sube al coche.

-¿No me das las gracias?- digo una vez llegamos y va a bajar del coche. 

-Gracias.- baja.

-Que agradable eres.

-En algo nos teníamos que parecer.- me devuelve la sonrisa. Cierro la puerta, dándome la espalda y se marcha.

Me marcho y vuelvo a la fiesta. 

Sábado. 

Hoy me he levantado con un dolor en la cabeza de cojones, anoche me pase demasiado. 

-Tú, despierta.- digo sacudiendo a Cole que está acostado en el suelo al lado de mi cama. Ni siquiera recuerdo haber llegado hasta aquí.

-Mmm.- dice medio dormido. 

-Levanta.

-Joder.- se despierta.- ¿Qué coño quieres, tío?- dice poniéndose en pie.

-Tenemos que ir a casa de Cameron. 

-¿Qué hora es?- pregunta frotándose los ojos.

-Casi las doce.- le informo.- ¡Vamos!- digo poniéndome una sudadera. 

Desayunamos algo rápido y nos vamos a casa de Cameron. 

Perdonar y seguir.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora