Capítulo 9: Maldita sea.

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Deborath.

Maldita sea, no debí traer a este idiota a la casa, en que estabas pensando Deborath, había amanecido, con dolor de cabeza, no debí tomar estaxis y alcohol, ni fumar marihuana.

— Hey preciosa tranquila.- veo a Liam mal.— Ok no digo nada.- levanta las manos.

— Si mejor callate.- me levanto, voy al baño tomo una larga ducha y me visto.— Viste te.- le digo, que mierda voy a hacer ahora, el entra al baño se baña y luego sale ya listo.

— Bueno me voy preciosa.- me da un beso y se va.

— Ahhh.- grito frustrada.— ¿Ahora que voy a hacer?.- escucho el timbre, bajo a ver quien mierda es.— ¿Si?.- veo a el mensajero.

— ¿Usted es Deborath Miller de Blacker?.- asiento me da un sobre.— Un notificación de divorcio, me firma de recibido.- firmo, el se va, tan rápido había pedido el divorció eran a las 2 de la tarde.

— Hay no.- debía presentarme mañana mismo.

Al día siguiente.

Me vestí lo más linda posible, llegue a la firma del divorcio, con mi abogado, entro al salón y Michael esta allí, le Sonreí pero el esquivo la mirada, nos sentamos.

— ¿Están aquí de muto acuerdo?.- nos preguntan.

— Si señoría.- dice Michael.

— No señoría.- digo.

— Explique se señorita Miller.- dice el juez.

— Yo no quiero divorciarte, yo te amo me equivoque, pero solo fue un vez.- el niega.

— Ya no confió en ti, juez la situación es irreversible, ya no puedo, ni quiero seguir casado con esta mujer, asi que le pido que me conceda el divorcio.- niego.

— No, por favor no.- le suplico.

— Además tengo pruebas se su infidelidad, juez.- ¿pruebas?, ¿que pruebas?.

— ¿Quiero verlas?.- saca una tablet.

— Aquí esta el vídeo de la infidelidad de la señorita Miller en su misma casa.- le enseña el vídeo.

— Las pruebas son claras y debido a esto, le concedo el divorció al señor Blacker.- no puede ser.

— ¿Y los bienes?.- pregunto no pienso irme sin nada.

— Debido a la infidelidad no le toca nada.- dice el abogado de Michael.

— Pero estuvimos casados un año y medio, antes de la infidelidad.- les digo, no me puede hacer esto.

— Es cierto, pero cuando firmo el acuerdo premuncial, decía que si había un divorcio de muto acuerdo, recibiría el 40% de todo lo que poseía, también que si había infidelidad de parte del señor Blacker, debería darle el 50% de sus bienes, y si había infidelidad de la parte de la señorita Miller, no le tocaría absolutamente nada.- es cierto, maldición.— Aquí esta el acuerdo firmado por la señorita Miller.- le da la carpeta.

— ¿Es su firma?.- me pregunta.— ¿Señorita Miller es su firma ó no?.- cierro los ojos.

— Si su señoría.- digo rendida.

— Bien entonces no le toca nada señorita Miller.- asiento.— Estos son sus copias del divorcio.- nos la da y salimos.

— ¡Michael!.- lo llamo pero el no se detiene.
— ¡Michael!.- me mira con ceño fruncido y cierra la puerta de la camioneta.

— Rosa va a guardar todas tus cosas, las mandamos al departamento de tu hermana, ¿ó otro lado?.- me pregunta Dylan.

— Al departamento de mi hermana, toma la dirección.- la escribo en un papel, y se la doy.

— Bien se te mandaran mañana.- se monta y se van, ni siguiera quiso hablarme, camino al departamento de mi hermana, que es en el mismo edificio donde vive Lucas, espero no encontrarlo, le cuento todo a mi hermana.

— Eres una tonta, perdiste a dos buenos hombres, Michael te hubiera dado la vida que tanto quieres, y Lucas te amaba de verdad, el pobre hasta se mudo de aquí, escuche que ya tiene novia.- me mira con una ceja levantada.

— Me alegro por el.- camino a mi habitación.

— ¿Volverás a trabajar en el bar?.- cierro los ojos y asiento.— Hablaré con dominic.- entro a la habitación y cierro la puerta, me tiro en la cama y lloro.

— ¿Que hice?.- sigo llorando.

La guardaespaldas 2 Terminada.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora