¿La charla? ... Ya no hace falta

Recordando

11 años después

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En la mansión Demimoff  todo estaba en completo silencio, uno muy sepulcral…

— ¡¿QUÉÉÉ!? —.

Bueno, quizás no tanto. Tres jóvenes estaban sentados en los sillones de la sala de estar, unos Loki y Thor  de 16 años y una Hela  de 27, los adolescentes permanecían ahora callados y muy pensativos, procesando lo que la mayor les había dicho. Ella, veía las distintas y divertidas muecas que hacían, sobre todo las de su pequeño hermano que hacía lo posible por no mostrarlas pero le era imposible, puesto que lo que Hela le había dicho, lo dejó bastante desconcertado.

— ¿No me digan que lo olvidaron? —, preguntó la mayor fingiendo estar sorprendida, aunque por dentro estaba de lo mas  divertida.

—Ya basta de estupideces Hela , sólo es una vil mentira tuya para hacernos avergonzar, o por lo menos a Loki—dijo Thor  molesto, poniéndose de pie de un solo un movimiento brusco y comenzando a caminar para salir—, vámonos Loki—ordenó serio.

—Pues… él si se acuerda—comentó la  mayor con indiferencia, mirando distraídamente el techo, haciendo que Thor  se detuviera y se girara para mirar al Black  que tenía la vista perdida en el suelo y un muy notorio sonrojo en las mejillas. Caminó de regreso hacia él  y se agachó a su altura para mirarlo a los ojos.

— ¿Loki, estás bien? —le preguntó más no recibió respuesta, al menos no vocal, de repente el chico abrió los ojos como platos sorprendido y se alejó lo más que pudo del chico, todo lo que el sofá le permitió. Estaba teniendo una especie de flash back, sólo le llegaban algunas frases.

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— ¿Papá? ¿Qué es el sexo? —.

— ¿Papi? Cuando  Thor y yo seamos grandes, ¿podremos tener sexo como dijo el señor? —.

—No nos dijeron si tú y yo podríamos tener sexo—.

— ¡Claro que sí! Algún día lo haremos, Loki . Tú lo harás conmigo y con nadie más porque eres mi amigo, ¿entendiste? —.

—Pues… tuvimos sexo—.

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— ¿Ves? Ya recordó—confirmó Hela  mientras se ponía de pie—, bueno mi trabajo aquí ya terminó, así que los dejo solos. Le dices a mamá que pasé por aquí—. Y sin más se fue dejándolos con su conflicto.

—Loki , ¿qué pasa? —interrogó Thor ,  que en el fondo, muy, muy en el fondo, en el centro, estaba dolido. El  chico tragó saliva nervioso y negó con la cabeza, él suspiró cansinamente y se sentó en el sofá—, ¿recordaste cuando teníamos cinco años verdad? —. Preguntó luego de un rato, su semblante no mostraba emoción y su voz, sonó fría y distante.

—Sí… acaso… tú… ¿lo recordabas? —. Cuestionaba incrédulo y con un poco de reproche.

—Siempre lo he hecho—.

—Y entonces… ¿Por qué? —.

— ¿De verdad quieres que te responda? —, alzó una ceja interrogante.

—No… creo… que… mejor, no—respondió con dificultad y algo ruborizado.

—Además… a fin de cuentas, la culpa de todo la tuvo Hela—dijo Thor molesto y con el ceño fruncido.

—Supongo que… fue porque… éramos ingenuos—.

—Tú aún lo eres—, el pelinegro hizo un mohín y el rubio sonrió de forma imperceptible—ven, te acompaño a tu casa—se levantó y extendió su mano para ayudarlo a ponerse de pie, pero él no la aceptó—, ¿pasa algo? —.