Dos entre uno.

CAPÍTULO 4

Divagaba en mis pensamientos mientras caminaba dirección a mi habitación. Ahora mismo tengo 3 cosas que pensar. La número 1: Tengo detrás a un dinosaurio que dice que soy su "presa" por lo cual no entiendo. La número 2: También tengo a un dragón que me sigue, como presiento que ahora mismo lo hace. Por último: Hay un profesor que me propuso decirle "padre", pero no entiendo del todo el motivo del porqué le diría así... Además, pensando mucho mejor la situación, parece que todos aquí son unos malditos pedofilos que están detrás de un joven... Aunque no conozco las verdaderas intenciones de nadie, es lo único que puedo asimilar.

Hace tiempo que no me ponía a pensar así, habían muy pocas cosas que me dejaban pensando como ahora lo hago, eran cosas tan nulas e insignificantes que en cuestión de minutos podías resolver, pero esto ya es otra cosa... O simplemente no he pasado por esto aun... Es difícil convivir con hombres...

- ¡Hola! ¿Me recuerdas? - alguien llego corriendo por detrás de mí, tomando mi hombro haciendo que volteara un poco la vista

- Blue, ¿cierto? - y como lo supuse antes, él me venía siguiendo

- Sí jeje es lindo que me recuerdes Joker. - asentí con la mirada, para luego volver a mi caminata - Eeehh... Lo siento si interrumpo, pero quería saber qué tal te fue hoy. - me lo dijo junto a un sonrisa 

- Dejando de lado las cosas extrañas por las que he tenido que pensar. bien. - el dragón seguía mi caminata, posando su vista en mí, cosa que yo no hacía

- ¿Cosas extrañas? ¿Puedo saber cuáles son? - afortunadamente para mí, llegué a mi habitación

- Lo siento, pero debo de hacer unas cosas. Si después tengo tiempo para platicar te las diré con mucho gusto Blue. - abrí la puerta de madera, girando el picaporte y así poder entrar, pero antes le dí una leve sonrisa para luego cerrar la puerta

- C-claro, luego hablamos Joker. - pude notar como tenía un leve sonrojo antes de cerrar la puerta

Fui directo a mi cama para lanzarme en ella, tenía que pensar mejor las cosas.
Ahora mismo considero que esos tres traman algo, ¿les gusto? Es lo único que puedo pensar, pero, ¿por qué? Me levante de la cama, la pequeña habitación tenía un espejo en el baño, con él me podría ver mejor.

Hace mucho que no veía  mi reflejo... Mi tez era una combinación entre piel algo morena y clara. Algunas partes de mi cuerpo eran blancas, mientras otras como mi rostro tenían un tono medio moreno. Mi cabello, siempre ha sido color negro, corto y con las patillas en punta. El color de mis ojos, color café oscuro; tenías que ver muy de cerca para poder ver ese color, sino pensarías que es un color negro. Mi estatura era bastante aceptable, 1.74. Aunque quisiera crecer algo más, estoy satisfecho.

Pocas cosas más podría resaltar de mí, como dije, hacía tiempo que no me veía frente a un espejo.

- Me das asco... - me dije a mí mismo, para luego ir nuevamente a mi cama

Revise mi celular, tenía un mensaje de alguien. Me llene de alegría al ver que era un mensaje de mis abuelos, si bien ellos no saben utilizar del todo un celular, por lo menos saben mandar uno que otro mensaje.

"Hijo, tu abuelo y yo te dijimos que cuando llegaras nos llamaras, pero no lo hiciste. ¿Cómo te ha ido? ¿Cómo van tus clases? ¿Ya hiciste amigos nuevos?"

No puedo creer como el mensaje de mis abuelos me pueden hacer tan feliz, pero a la vez me ponen triste. Recordar que ya no puedo estar cerca de ellos, ya no poden abrazarlos ni verlos a la cara, me hace sentir mal, pero no tenía otra opción.

"Lo siento por no llamar, pero la escuela es bastante grande que tarde demasiado en explorar toda, fuera de eso, todo ha ido bastante bien, aunque no he tenido la oportunidad de hacer amigos aquí."

Ellos saben perfectamente que no soy de muchos amigos, pero les gusta hacer eso para molestarme, o eso dicen.

Deje mi celular, aun era demasiado temprano, apenas si es la una de la tarde, debería de salir y pasear un poco por allí, sería buena idea.
Salí de la habitación, afortunadamente no había ningún dragón o dinosaurio que me pudiera interrumpir ahora, por lo cual sería libre de caminar a donde yo quisiera.

Suspire bastante relajado, ya tenía tiempo para mí. La próxima clase iniciaría 2 horas después, aunque esa hora completamente opcional, iba quien quisiera, y por lo que leí, era simplemente para hacer nuevos amigos y alguna que otra actividad grupal, pero no era de mi interés.

Caminaba sin rumbo alguno, sin ningún tipo de preocupación, inclusive quería salir de la escuela para poder explorar el exterior de aquí. Es cierto que puedes salir, pero tienes que regresar antes de las 8 de la noche, sino te quedarías afuera. 
Unos guardias son los que vigilan la entrada, y para poder salir tienes que enseñar una credencial que en tu habitación te dejaron junto a tus llaves. (olvide mencionar dicha credencial) La mostré y pude salir sin problema alguno. Por fin tenía algo de aire fresco, no estaba rodeado de estudiantes salvo los pocos que igual se encontraban fuera.

Por hoy no quería explorar mucho, simplemente quería estar por un rato afuera mientras que el aire me pegaba por todo el cuerpo. 
Un árbol con una gran sombra cautivaron mi vista, era el lugar perfecto para poder descansar y observar el panorama, así que fui hasta ese árbol para recargarme en él.

Todo estuvo tranquilo hasta que pude divisar que un lobo también se encontraba allí descansando, pero del otro lado en donde yo me iba a recostar.
Me recosté en el árbol, estirando mi pierna izquierda pero deje mi rodilla arriba en mi pierna derecha mientras mis manos estaban a los costados de mi cuerpo para sostenerme. Para mí esta es la forma perfecta para descansar, sobretodo en el pasto...

- Hola. - voltee la mirada, aquel lobo me hablo

- Hola. - regrese mi mirada, no puedo creer que de nuevo voy a pasar por esto...