Te echo de menos.

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Estoy confundida, no sé si estoy haciendo bien, o no, lo malo es que haga lo que haga mal, siempre me arrepiento, me acabo de desconectar y ya le echo de menos.

Yo es que no entiendo, por qué me tiene que tocar ami estos chicos... Sólo pedía a alguien.

Me fui a dormir, era temprano, las doce.

Me metí en la cama y hacía frío, me sentía vacía, quiero hablar con el.

Derrepente siento que mi móvil vibra y veo en la pantalla qué es.

"____, nena, no quería contarte esto, porque sabía que esto iba a pasar.

Nena, de verdad, me importas demasiado, porque sino, no te estuviera escribiendo este mensaje, perdoname por ser así, por no habértelo contado nada más hablarte, esta noche no podré dormir, te echo de menos ____. Que tengas una buena noche Shawty.

Por cierto, tienes que darme tu número de teléfono"

No se qué me pasa, le conozco de hace una semana y lo necesito tanto, estoy hasta llorando...

Le responderé.

"Justin, yo también te echo de menos, debemos hablar sobre esto, sobre si lo nuestro va en serio... ¿En tan sólo una semana se puede enamorar de alguien?

Claro, te daré mi número (le di mi número de teléfono) será mejor que duerma, mañana hablamos mejor, que tengas una buena tarde Justin."

No me sentía agusto con el mensaje que le había mandado, siento que no soy yo, pero es que no debería hablar más con el, me buscaré líos...

Al despertarme, me di cuenta que por fín era viernes, tenía ganas ya de que sea, se me estaba haciendo una semana demasiada larga.

Hice mi rutina de siempre, me duché y me cepillé los dientes. Esta vez me puse unos vaqueros de color negro, unas botas que me llegaban un poco más arriba del gemelo de color negro también, un jersey que es mas hancho de lo normal en la parte de arriba, que se deja ver el hombro de color vino y una bufanda gordita del mismo color. Hoy me decidí ponerme el pelo con ondas, espero que no llueva porque si lo hace, me jodería muchísimo.

Cogí mis cosas y bajé, cogí un vaso de leche y...

- Se dice buenos días - Dijo con voz espesa.

- Sí, perdona, buenos días, no te había visto papá, ¿Dormiste bien?- Le dije amable, para no tener que discutir a las ocho y diez de la mañana.

- Ve ya al instituto, se te va a hacer tarde - Dijo enfadado.

Pero bueno, este señor qué se ha creído, encima que le saludo amblemente me contesta de estas maneras, esto no puede ser.

- Sí claro, me iré y que sepas que se contesta cuando una persona está preguntando algo - Le dije lo más rápido que pude para salir corriendo y no me gritase.

- ¡Ven aquí ahora mismo _____! - Dijo gritando.

Y me fui corriendo dejandole la palabra en la boca.

-Creo que me toca biología - Dije en voz bajita.

- ¡Hombre ____! ? Nos toca juntos, ¿no? - Dijo ese chico del año pasado, ese que me tiene loca desde que le conocí, pero ahora que conozco a Justin... No es lo mismo, a no ser...

- ¡Hola! Pensé que habías repetido David - Dije en tono de burla.

- ¿¡Qué dices!? Repito una vez, dos ya no - Dijo con esa sonrisa que desde el primer día en que lo vi me enamoré.

- ¿Entramos? - Dijo guiñandome el ojo.

- Claro - Contesté sonriente.

- Las damas primero.

- Vaya David, al final va a tener razón el refrán ¿eh? El tiempo cambia a las personas - Dije mirándole.

- El tiempo te ha cambiado demasiado _____.

Esa frase no dejaba de retumbar en mi cabeza, tiene razón, he cambiado.

Antes era la típica chica que con cualquier cosa que me decian, me lo creía, ahora me he vuelto una amargada.

Estaba en biología, con la genética, con los cromosomas y todas esas mierdas, harta estaba, perdonad mi lenguaje, es que me estreso.

De repente siento mi móvil vibrar, veo en la pantalla:

WhatsApp: Justin: Te echo de menos, espero que me hables, no paro de pensar en ti.

Joder, no debería hablarme a estas horas. En ese instante siento unos ojos puestos en mi, levanto la cabeza hacía mi derecha y ahi estaba el, mirándome.

- ¿Qué miras?- Le dije susurrando.

- A ti - Me contestó susurrando también, pero sonriendo.

Al instante me sonrojé, no sabia qué hacer, odio ser observada por alguien y más si es alguien atractivo.

Al salir de las clases, en el camino me fui pensando en por qué me mir así ahora, cuando el año pasado nisiquiera me hacía caso, esto, esto es extraño.

Llegué a mi casa con mi madre, nos sentamos a comer y vino mi padrastro a comer con nosotras y le conté a mi madre lo que me había sucedido, yo a ella le había hablado ya de el, me encanta como es mi madre conmigo, le puedes contar casi todo.

Mi padre me recogió y me llevó a casa, tenía varios mensajes de Justin en mi WhastApp,no quería contestarle aún, mejor cuando llegue a casa.

Llegué a mi casa y le hablé a Justin por WhatsApp.

Yo: Hola.

Justin: _____... Estoy apunto de morirme, nunca me habías hecho tanta falta, en tan sólo pocos días has conseguido que me vuelva loco por ti, te echo de menos, quiero tenerte cerca de mi, necesito verte, necesito estar contigo, ya sé lo que voy hacer.

Dios mio, tengo que miedo a que todo esto sea mentira, una persona no se puede enamorar en casi dos semanas.

Yo: Justin, ¿Qué estás diciendo? Te estas volviendo loco por dios, dices cosas sin sentido, a ver y ¿Cómo me vas a venir a ver? ¿Con la puerta mágica de Doraemon?

Justin: _____, no me desafíes, no te lo diré, gracias a tu teléfono móvil, sé donde vives.

Yo: Justin, me estás asustando, pareces un psicópata.

Justin: No ____, no te asustes nena, por cierto, quiero que sepas que mi madre ya sabe quien eres.

¿¡QUÉ!? O sea, pero.. WTF!

Yo: ¿¡Cómo!? Vamos a ver Justin, nisiquiera soy tu novia, por dios.

Justin: Entonces... ¿Quiéres ser mi novia virtual, hasta que no veamos en persona?

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Bueeeeeeeeeno! Aquí está otro capítulo! Espero que lo disfruteiis :D Dale favorito y dime en los comentarios si quieres que siga o alguna cosita, no olvides seguirme, te seguiré de vuelta :D

Mañana más :D

Una relación en una red social.  (Justin Bieber and TúDonde viven las historias. Descúbrelo ahora