Capítulo 3: Familia "Son".

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Finalmente, Gogeta decidió quedarse al menos una noche. Al principio desistió pero Gohan y Trunks le insistieron en que se quedará. Y al recibir una mirada de aprobación por parte de Vegetto y su mujer, decidió acceder.

Y a la mañana siguiente, el pelinegro no fue despertado por Trunks, quién usualmente solía venir a molestarlo para que bajará a desayunar.

Por lo que tuvo que levantarse y ver que estaba pasando.

Al abrir la ventana de su habitación, la cuál daba hacía el patio, pudo divisar a Trunks junto a Gogeta.
Al parecer estaban entrenando y lo peor era qué no le habían invitado.

— ¡Señor, tiene que enseñarme a hacer esa técnica! ¡O mejor aún, ser mi maestro! ¡Es usted muy fuerte! —Aseguró el menor con emoción. Gogeta le sonrió en forma de agradecimiento ante los cumplidos del niño.

Por otro lado Vegetto no sabía que había sido aquello pero algo estaba molestandole, no sabía si el mocoso por decirle débil y poco interesante o ver a Gogeta sonreírle a otra persona.

— ¿Que mierda acabo de pensar? —Se preguntó a sí mismo, con una mano en su cabeza— Mejor... Me daré un baño.

Ante aquella actitud extraña, la de hablar sólo, decidió darse un baño y bajar a desayunar en la gran mesa del comedor.

En la cocina estaba Bulma, quién al parecer estaba calentando agua.

— ¿Tú despierto a estas horas? Pensé que Trunks te iba a levantar más tarde... O que directamente ni iba a hablarte pero no verte aquí a estas horas. —Menciono con asombró, comentario que hizo ofender al pelinegro— En fin, siéntate.

El pelinegro no dió comentarios al respecto, algo que sorprendió a Bulma.

— Al parecer a Trunks le cae bien ese amigo tuyo, Gogeta. Ambos se levantaron temprano para entrenar, justo se encontraron así que Trunks tuvo que rogarle para que le enseñará lo que sabía. —Siguió comentándole al Sayajin, quién hacía ojos hacía arriba. Su voz transmitía que estaba contenta con la visita.

— Genial, ya que nunca lo ha hecho conmigo... —Menciono sarcásticamente sin siquiera pensarlo, para luego arrepentirse. Bulma se dió media vuelta y pronunció un "¡Ahja!", señalando que había descubierto lo que tanto le estaba preocupando.

— Vegetto, ¿Estás celoso? —La peliazul se acercó a su supuesto "marido" en busca de respuesta en su rostro, haciendo que el pelinegro se pusiera nervioso y negará lo que ella estaba pensando— ¡Ja! ¡No lo puedo creer!

La mujer se alejó sintiendo una satisfacción de verlo así, celoso, luego de tanto tiempo que este nunca se inmutaba por nada que tuviera que ver con la familia. Al contrario, siempre solía huir.

— Es gracioso por qué siempre decías qué no te sentías como un padre pero ahora sientes celos de alguien más por ocupar ese puesto, ¡Quién lo diría! —Exclamó, con una sonrisa de victoria. Vegetto se sintió molestó al haber dejado que la señora descubriera su aparente enfadó, ahora sí que se sentía cómo si hubiese caído bajo.

— ¡No es solo por eso... Es también por...! —Quiso aclarar pero levantó su voz de más, asustando a la mujer- Olvídalo, es sólo por Trunks.

La mujer decidió dejar a su ex compañero de cuarto tranquilo un momento, tal vez habían cosas en su cabeza que aún debían ser esclarecidas.

Tiempo después, cuándo los demás fueron llamados a sentarse a desayunar, Vegetto mantenía una tranquilidad poco usual. Bueno, al menos en frente de su familia solía no ser muy frecuente.

El pelinegro trataba de resolver en su mente aquel pensamientos ajeno que había tenido en su habitación y el sentimiento que le había ocasionado el comentario de Bulma. Tal vez aún debía decidir qué debía hacer al respecto a su futuro, sus "hijos" y ex-esposas.

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