Sumisa de seis cocodrilos

2.

Ella cerro los ojos llorando, escucho un ruido de huesos rotos tras el quejido de su ex que abandono su cuerpo, miro a Jeff y un inmenso cocodrilo lo tenía agarrado entre las piernas de ella lanzándolo contra otro que lo partió a la mitad, miro al cocodrilo sobre ella apoyándose sobre su vientre sin moverse de ninguna manera y todo se volvió negro.

- ¿Qué coño paso ahí abajo?

Aki miraba a Sandy desnuda en los cojines de su inmenso apartamento, había estado con sus hermanos tratando de limpiar la sangre del maldito lobo solitario que había tocado su piel, hasta que finalmente la dejaron tapada con una sábana negra.

- Tenemos un dormitorio chorreando sangre y un cuerpo cambia formas partido a la mitad.

Ninguno le contesto, solo lo miraban mientras su teléfono sonaba insistentemente.

- Aki.

Cogió la llamada, aun enfurecido.

- ¿Qué ha pasado?

Abdel el rey cambiante de Arabia Saudí, no mostraba nada en la voz, como siempre, sabia contener a la perfección su ira, escucho hablar a Aki y solo dijo:

- Entendido, un equipo de limpieza lo arreglara todo, suerte.

Se quedó mirando el móvil, dos horas llevaba inconsciente Sandy, estaba por llamar ya a una doctora, cuando empezó a removerse, su preciosa melena rubia se esparcía por los inmensos cojines negros y su cremosa piel llena de curvas resaltaba con el color negro y la iluminación de la ciudad que entraba a raudales por los inmensos ventanales, ella se sentó echándose las sabanas bajo sus descomunales pechos y los miró.

- ¿Dónde estoy? ¿Qué ha pasado?

Se llevó sus hermosas manos a los labios y lo miró.

- Tú.

Aki y Sandy se miraron fijamente mientras ella se bajaba de los grandes cojines agarrando firmemente la sabana a su cuerpo, corrió hacia la puerta y Aki fue a por ella, arrastrándola hasta un enorme sofá.

- Tranquila.

- Mi ex novio, se lo ha comido un cocodrilo.

- ¿Un cocodrilo?

- Sí, yo lo he visto.

- A veces nuestra imaginación nos juega malas pasadas.

- Yo lo vi, estaba allí con otro más.

- Aquí no hay cocodrilos, es más ¿Cómo va a subir un cocodrilo hasta su apartamento?

- Yo lo vi.

- La salvamos nosotros, igual nuestros ojos la confundieron.

- ¿Cómo supieron?

- Estábamos calentando en las escaleras, cuando escuchamos un forcejeo.

Sandy miró a Andre gimiendo en ese momento llevándose las manos a la boca.

- Tú eras el cocodrilo que estaba sobre mí.

Ninguno habló, ella se echó a correr a la puerta intentando abrir y chillando para que le abrieran y Anouk la agarró antes de que chillara más fuerte.

- Para o te atare, para ahora mismo mujer.

Ella agarro su mano sobre su boca arañándolo, mientras el rugía como una bestia, Anouk la arrastro hasta una silla donde estaba Alix esperándolo con cuerdas, ella no paraba quieta, entre los dos como pudieron la ataron.   

- Ponerle una pelota, va a desertar a todo el edificio.

Atada, desnuda y amordazada Sandy miró a los seis hombres mientras el más mayor traía la sabana que se le cayó tapándola nuevamente.