Mi Princesa ||C.V. Y TU||TERMINADA

Capítulo 6: Rollito Primaveral

—¿Enserio lo crees? Tal vez es por este hermoso vestido, ayer mi padre me llevo a una plaza en la ciudad y me compré este vestido y un traje de baño de dos piezas, si quieres luego que vamos a nadar un poco y te lo enseño —Dijo Ana, Christopher solo soltó una risa nerviosa y siguió con lo suyo

Ana encendió la pequeña televisión que había en la tienda, una reportero estaba afuera del castillo y hablaba frente a la camara

—Desde anoche no tienen noticias de la princesa, el reino a buscado hasta por debajo de las piedras, pero aún sin saber nada, nadie sabe que ha sido de ella, la reina a proclamado un mandato, quien le otorgue algún tipo de información sobre donde está la princesa, será recompensado, hasta el momento nadie a venido a dar algún tipo de información —Dijo el reportero, una serie de fotos un poco borrosas y oscuras aparecieron, ella con el enorme vestido sobre el caballo, huyendo del palacio

—¡Qué estúpida! ¡Teniendo todo lo que tenía en ese castillo como pudo escaparse! —Dijo Ana, Christopher frunció el entrecejo

—No puedes saber sus motivos, tal vez unos muy válidos para escapar —Dijo Christopher, a los segundos de que Christopher terminara de bajar el encargo, el señor Mena salió de la bodega y le entrego el dinero a Chris

—Gracias, hasta luego —Dijo Christopher y se dirigió a la última tienda, donde los Pimentel lo estaban esperando

Entrego el pedido y se fue rápido, ayer su amigo Joel había comenzado a trabajar en la tienda de renta de películas, así que se iba desde muy temprano y regresaba en la noche

Eran las 10:06 AM, se regreso a su casa, condujo hasta llegar, tenía hambre así que haría algo de desayunar, pero al llegar y estacionarse

Vio el enorme vestido colgado en le tendedero, ya estaba lavado y sin lodo

Entre a la casa y un delicioso olor inundó mi nariz

Entre a la cocina y ella estaba bailando y cantando en la cocina, mientras le daba vueltas a algo en el sartén, la casa estaba impecable, todo estaba en su lugar y sin polvo, me adentre a la cocina

—Hola —Dije acercándome, ella se giró sobresaltada y después sonrió

—Ah, llegaste —Dijo ella, yo asentí y ella colocó en un plato algo que estaba en el sartén —¿Podrías poner la jarra de agua de limón en la mesa? —Dijo ella, yo asentí y tomé la jarra de agua, la coloque en la mesa y después ella trajo los platos

Traía un vestidos color amarillo bajo, este tenía una florecitas blancas por todos lados y tenía puestos unos zapatos color blanco, su cabello no estaba atado y se miraba sonriente

Mire mi plato, santo cielo, se miraba muy rico

Era una clase de burrito amarillo, pero olía muy bien

—¿Qué es esto? —Dije mientras tomaba los cubiertos

—En el castillo lo llaman rollito primaveral, es una tortilla hecha de huevo con especies, por dentro tiene verduras y jamón, sabe muy bueno —Dijo ella, sonreí impactado, sinceramente no creí que ella supiera cocinar, ya sabes, es una princesa y todo harían por ella

—¿Donde aprendiste a cocinar? —Dije mientras partir el rollito, ella picó un pedazo y antes de meterlo a su boca hablo

—Me dan clases particulares para ser señorita, eso incluye, modales, cocina, costura, diseño, etc. —Dijo antes de meter el tenedor a sus labios

—Pues está delicioso —Dije después de sacar el tenedor de mi boca vacío,

Terminamos de desayunar y ella lavo los platos, después de ello, hoy tocaba recolectar un poco de zanahoria

—¿Qué es lo que harás? —Dijo ella mientras caminaba tras de mí

—Recolectare unas zanahorias y papas —Dije mientras tomaba la carretilla

—Te ayudo —Dijo ella, asentí y comenzamos a caminar hacia la parte de las papas y las zanahorias, le expliqué cómo debía sacarlas y ella asintió, comenzó a trabajar —¿Haces esto tú solo? —Dijo mientras sacaba una zanahoria del suelo

—Si, todo el día me mantengo ocupado trabajando en estas tierras —Dije mientras sacaba unas papas

Ella se la paso ayudándome todo el día, hasta que hizo una parada para hacer un poco de comer, comimos y volvimos a trabajar

—Ahora hay que regar las lechugas —Dije mientras me acercaba al granero y comenzaba a conducir el tractor

—¿Puedo hacerlo yo? —Dijo ella mientras me veía desde abajo, le extendí la mano y la ayude a subir, ella se sentó frente a mi, en medio de mis piernas

—Mira, primero metes la llave aquí —Dije señalando el contacto de la llave —Despues jalas está palanca y pisas el pedal, comienzas a conducir, cuando estemos en medio de las lechugas, lo ponemos en automático y con la manguera de atrás, comenzamos a rosear las lechugas —Le explique, ella asintió y hizo los pasos que me expliqué, comenzamos a conducir mientras que ella...