Mess Up || «KaiSoo»

Capítulo 26-1 "Juntos"

JongIn

Mi celular comenzó a sonar haciéndome abrir los ojos y maldecir en voz alta. Apenas me había acostado media hora atrás, después de un par de días mortales escondido bajo toneladas de tareas y proyectos que debía entregar, pero ese dia por fin había podido ir a la cama temprano.

Pero el destino era una mierda, ni si quiera dormir podía.

Me giré sobre la enorme cama y alcancé el celular en la mesita de noche, parpadee un par de veces para enfocar la vista y cuando vi el nombre de KyungSoo en la pantalla no dude en contestar

—¿Kyung? ¿Que sucede? Es tarde —me senté en la cama mirando la obscuridad de mi habitación mientras esperaba por la respuesta del de cabello negro

—JongIn, ¿Puedes venir?

Al escucharlo separé el teléfono de mi oreja y mire confundido la hora, era poco mas de la media noche.

—¿Ir, a donde? —mi voz había salido totalmente confundida pero era justo así como me sentía

El otro lado se quedó en silencio por tantos segundos que creí que había algo mal con la llamada o me había colgado, pero después oí un suspiro y seguido un par de sollozos ahogados.

Mis instintos de pusieron alerta y las alarmas en mi cerebro se activaron, supe que había algo mal y debía moverme.

Agudice el oído mientras me levantaba para buscar una chaqueta y la cartera que metí en el bolsillo del pijama, dirigiéndome a la entrada donde comencé a colocarme la prenda, olvidando por completo el cambio de zapatos, todo en la más mínima cantidad de tiempo

—¿Kyung? Dime donde estas, estoy saliendo de mi casa, solo dime a donde ir

Para ese momento los sollozos eran ya un llanto continuo, mi cuerpo se tenso mientras bajaba casi corriendo en las escaleras y salía a la calle para correr hasta la avenida principal y llamar un taxi, en el camino hasta allí pregunté un par de veces más al menor por su ubicación, hasta que simplemente el llanto cesó para dejar oír una voz congestionada

—En el parque, con Young

No necesitó decir más, supe a que lugar se refería. Lo que no sabia era que hacia allí, con un niño de tres años en medio de la madrugada.

Mantuve la llamada mientras subía al taxi y le daba la indicación al hombre que conducía, mismo que me miro raro pues ¿quien demonios quería ir a un parque a esas horas? Más aún si ese quien iba vestido con su pijama, el cabello alborotado y el celular en la oreja.

Escuché a KyungSoo llorar por al menos 15 minutos, tiempo que duró el trayecto hasta aquel lugar, era tan duro oírlo y no poder hacer nada para calmarlo.

Al llegar baje del auto pidiéndole al conductor que esperara un poco, sabía que la tarifa sería un horror pero poco me interesó en ese momento.

Mire al rededor del parque y fue fácil ubicar una figura sentada en una banca no muy lejos, corrí hasta ahí tratando de no caerme pues mis pies estaban enfundados en unas pantuflas que no tuve el tiempo de cambiar.

Al estar frente a frente con Kyung noté que su cabello estaba algo alborotado, sus ojos rojos e hinchados seguramente por el llanto que me había traído hasta aquí, el niño que estaba sobre su regazo que temblaba un poco con el frío y se aferraba a su padre y al peluche color azul que abrazaba a su pecho.