LAS CALLES DE LA AMARGURA

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Caminando por las calles
de la amargura,
me quite los zapatos
de tacos altos.
Sus caminos
eran de piedra caliza
de un bello color azulado.

No podía seguir caminando.
Sus piedras herían
mi pies descalzos.
Tenia herida la vida
y crucificado los sueños.
No podía seguir
arrastrándolos.

Me senté a pensar en un banco
en un banco hecho de mármol.
Rodeado de Hortensias
rosas y azules.
Rodeada de lo que un día
fueron requiebros.

Recuerdos
de cuando no usaba
tacones ni pintalabios
y marque con un beso
color de rosa tu bonita cara.

Mis lágrimas rociaron las flores
no entendía porque dolia tanto
había ganado tantas batallas
y la última batalla la pierdo.

Mi llanto se quedaría
en las piedras de el sendero
haciéndole compañía
a mis disparates
de niña enamorada...

Mi llanto adornaria
aquel banco
aquellas hortensias
que un día sin querer
lloraron conmigo
y lloraron tanto.

La soledad apretaba mi pecho
quemando con destellos
los umbrales de lirios
pintados en ellos.

Los juegos de mesa
de los churrumbeles
olvidados en el asfalto
recordaban
momentos vividos
enterrados en el pasto.

Lo verde de la hierba
donde nos revorcabamos exhaustos
se quedaba marcado muy dentro
pintando de pesares
este sufrimiento.

La lluvia cayendo
no borra heridas
ni sentimientos
solo aumentaba
los quebrantos.

No habían lunares de amores
solo deshechos de sinsabores
y besos robados
pegados de el firmamento.

Solo la incertidumbre
brillaba en la tarde.
Solo el estupor
asomaba su cara.

Muero en brazos vacíos
sin decirle nada a nadie.
Muero de dolor y hastío
de deseo, besos
delirios y devaneos.

¡Me arrancó a pedazos
lo único que me queda!
¡Me arranco a pedazos
lo que un día fue mio!

¡Escondo en la calle de la amargura
lo que un día fue pura locura!
¡Escondo debajo
de las piedras calizas
mi amorosa desventura!

Luz de Estrellas
⭐⭐⭐⭐⭐

Luz de Estrellas⭐⭐⭐⭐⭐

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