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Jungkook siseó y rodó los ojos hacia atrás cuando la lengua escurridiza contorneó pausadamente la cabeza rojiza de su miembro. Taehyung lamía como si saboreara una paleta de caramelo y en el fondo sólo lo hacía para sacarlo de quicio. Jungkook no se quejaba, aquello era lo más cercano a tocar el cielo de lo que estaría en toda su vida.

Con los ojos medio cerrados y los labios rojos e hinchados, Taehyung pasó la punta de su lengua por toda la extensión desde la base hasta el glande y se detuvo. Jungkook parpadeó perezosamente observando hacia abajo entre sus piernas. Los ojitos de Taehyung le sostuvieron la mirada y algo extraño los atravesó.

—¿Todo en orden?– preguntó con voz rasposa cuando Taehyung no se movió.

—Nunca he hecho ésto antes– confesó —¿y si lo hago mal?–.

—Estoy como a dos segundos de correrme y ni siquiera has chupado, no te preocupes seguro lo haces bien– soltó Jungkook de manera entre cortada.

Taehyung soltó una risita, su aliento cepilló contra el pene de Jungkook haciéndolo temblar.

—No vayas a moverte– advirtió antes de tomar aire y meter la punta húmeda entre sus labios.

El sabor era extraño, salado. La textura no era desagradable pero tampoco cómoda. Era pegajoso, sentía que comía pasta dental pero sin el sabor a menta. Las pequeñas gotas de líquido preseminal caían sobre su lengua haciendo su camino hasta la garganta. Taehyung tomó un poco más, sintiendo como el grueso falo estiraba sus labios. Aún podía respirar y no se sentía tan mal así que tomó más y más y más hasta que lo tuvo contra su garganta y aún así todavía no entraba completo.

Sentía las comisuras de sus labios doler un poco pero no le importó y empezó a moverse, ahuecando sus mejillas, succionando y sacando el miembro para luego volver a tomarlo. Estaba siendo fácil y llevaba un ritmo estable, sentía a Jungkook temblar ligeramente, conteniendo sus caderas para no alzarlas y embestir. Taehyung sabía que Jungkook no lo haría, Jungkook jamás haría algo que él no quisiera así que se movió tranquilamente sabiendo que no recibiría ninguna estocada en la boca.

Taehyung gimió un poco cuando aumentó la velocidad, cerró los ojos e intentó cubrir sus dientes de la mejor manera. Su mente estaba concentrada en el trabajo. Una de sus manos masajeaba el pedazo de falo que no cabía en su boca mientras su cabeza se alzaba y bajaba cada vez más rápido. Su quijada dolía pero aún así continuó sintiendo que Jungkook escurría cada vez más. Los sonidos húmedos en la habitación eran algo embarazosos pero Taehyung decidió que ignoraría eso y seguiría adelante.

Su boca se sentía demasiado llena, vibraba ligeramente y se sentía extraño el tener algo tan grande entre sus labios. Podía sentir la vena gruesa contra su lengua cada vez que chupaba, de pronto la textura ya no era tan incómoda. Se tensó un poco cuando sintió la mano de Jungkook sobre su cabello, acariciándolo suavemente.

Abrió los ojos y gimió en cuanto sus miradas se encontraron. Los ojos de Jungkook se veían oscuros y hambrientos. Respiraba con dificultad y transpiraba intentando mantenerse bajo control y Taehyung jodidamente amo esa imagen.

—Fóllame...– graznó con voz temblorosa cuando sacó el miembro de su boca, escurriendo saliva y líquido preseminal por todos lados —fóllame la boca, lo quiero...– lloriqueó.

Jungkook jadeó medio sorprendido, medio ido por el deseo. Sus manos fuertes sujetaron la cabeza de Taehyung y de una estocada metió toda la extensión hasta tocar fondo en la garganta del castañito. Taehyung se sujetó de los muslos gruesos y musculosos mientras el pelinegro embestía dentro de su boca cortándole el aire.

Se sentía bien, pensó Taehyung, gimiendo sobre el pene, tomándolo y lloriqueando cada vez que la punta chocaba contra la piel suave al fondo de su boca. Jungkook no fue amable en esa ocasión mientras sus movimientos se volvían erraticos y sus ojos adquirían un brillo casi salvaje. Las uñas de Taehyung se encajaron en la piel de aquellas firmes piernas y sus ojos se mantuvieron abiertos volteando hacia arriba mientras Jungkook se corría dentro de su boca soltando un gemido grueso y ronco.

F O O L SDonde viven las historias. Descúbrelo ahora