Una promesa (TomuraXlectora)

La primera misión

Ya casi había pasado una semana desde que comenzaste a trabajar para la Liga de Villanos. En este tiempo sólo te habías dedicado a ayudar con el bar a Kurogiri. Te extrañaba el hecho de que Tomura no parecía tener intención de matarte, o al menos no aún.
-______ me aburro déjame cortarte- dijo Toga con una siniestra sonrisa. Tu simplemente continuaste tu labor limpiando la barra. Ya habías aprendido que sí respondías a Toga o te negabas sólo crecerían sus ganas de cortarte.
-Como sea yo también me aburro-dijo Dabi-______ hace mucho que no luchas ya. Vamos a entrenar. En tu situación será la tu única oportunidad de golpearnos- concluyó con sorna.
-Esta bien-respondiste-me vendrá bien un poco de ejercicio.
Dejaste tu trabajo con permiso de Kurogiri y acompañaste a Dabi y Toga. Llegásteis a una enorme habitación literalmente vacía. Supusiste que se debía al hecho de entrenar allí. No necesitaban muebles que interfirieran en un combate.
-Vamos-dijo Dabi para comenzar.
No sabes si estuviste una o tres horas entrenando. En parte te alegraba ese momento de combate. El ejercicio te relajaba y, a pesar de lo esperado, ni Dabi ni Toga parecían querer hacerte más daño del necesario. De hecho, te recordaba a un entrenamiento común.
-¡Vosotros tres!-grito Kurogiri desde la puerta del cuarto-Shigaraki requiere de vuestra presencia. No tardeis.
Seguísteis a Kurogiri prácticamente al momento de decir que Tomura así lo quería, tú porque no querías enfadarlo y que se desquitará con tu hermana y Dabi y Toga porque, a pesar de que les encantará hacer de rabiar a su jefe, sabían que era como un niño pequeño y no estaban de humor para molestarlo.
-Habéis tardado mucho-dijo Tomura frustrado y rascándose el cuello (aunque no habíais tardado más de dos minutos)- Como sea, empecemos.
Tomura explicó que había un informante que había estado confraternizando con los héroes y que les había dado el chivatazo de el plan que la Liga iba a llevar a cabo en poco tiempo. Por supuesto, eso a Tomura no le agradó. Ahora su plan había llegado a "Game Over" antes siquiera de empezarlo y ese informante lo iba a pagar.
Durante toda la tarde estuviste con la Liga pensando un plan y es que, tras ver tus habilidades para el análisis, Tomura te obligo a preparar un secuestro perfecto.
Ya era de noche y tu te encontrabas en tu posición en una azotea junto a Kurogiri. El plan estaba saliendo a la perfección. Lo habías planeado en base al juego del ratón. Desde la azotea las calles se veían como un gran laberinto y habías pensado exactamente como conducir al ratón hasta un callejón sin salida. Veías como los villanos seguían al pie de la letra tus palabras y conducían al informante hasta Tomura. No pudiste evitar sentir lástima de ese pobre hombre al ver su expresión cuando se encontró cara a cara con Tomura.
-Ya sabes lo que toca ahora ¿No?-dijo Tomura entre carcajadas.
El informante sólo podía negar con la cabeza y decir cosas incoherentes. Estaba rodeado y aterrado. Te recordó a tu situación de hace no mas de una semana. No querías ver lo que venía ahora.
-______ ya sabes lo que toca- te dijo (ordenó) Tomura poniendo un cuchillo en tus manos.
-N-No. No. ¡No lo haré!-gritaste.
-No te he preguntado mocosa-respondió el villano-te recuerdo que tienes que obedecerme.
No sabías que hacer. No estabas dispuesta a matar a ese hombre pero eso supondría que Yuni ocuparía su lugar. Estabas a punto de rendirte cuando una fugaz idea paso por tu cabeza.
-«sólo espero que funcione»-pensaste.
Mostrándote aterrada ante los villanos, como parte de tu plan, te acercaste al informante. Fingiste dudar y retrocediste hacía Toga.
-Hazlo ya mocosa si no quieres sufrir las consecuencias-presionó Tomura.
Volviste a acercarte al informante y te paraste frente a él. Estaba tan aterrado que no se movía, lo que aprovechaste para susurrarle «sigue la corriente» sin que vuestros captores lo notarán. Esto confundió al hombre pero al miraste a los ojos se dio cuenta que podía confiar en ti.
Cogiste el cuchillo y sin que te viera nadie, a excepción de tu "víctima", untaste al cuchillo sangre que le habías robado a Toga al fingir caer sobre ella. Echaste sangre también al hombre mientras fingías apuñalarlo y él al momento comprendió tu plan. Cayó al suelo contigo encima y comenzó a fingir estar muerto. «Huye» le susurraste por última vez antes de comenzar a fingir miedo y ponerte a temblar por haber "matado" a un hombre.
-Ves, no era tan difícil- dijo Tomura encantado con tu acción-Espero que la próxima vez no dudes tanto.
«¿Próxima vez?» Eso no te gustó nada.
Volvisteis al bar sin problema. Tomura decidió dejar el cadáver para dar un mensaje a todo el que quisiera traicionarlo. Que curioso. Esa acción salvo totalmente al informante. Reiste internamente al pensar que sin saberlo Tomura acababa de salvar a su víctima.Estabas cansada, así que con permiso de Tomura te retiraste a tu habitación. Trabajabas para la Liga de Villanos, pero saber que salvaste a alguien sin tener que ser Black te hizo feliz y, por primera vez en días, dormiste sin problema.
Por otro lado Tomura se encontraba observando una foto tuya como Black y sus ojos no mostraban odio. No sé que te habría sorprendido más, descubrir una foto tuya en manos de ese villano o ver el sentimiento con el que te miraba.
-Tomura-dijo Toga interrumpiendo las ensoñaciones del villano.
-¿Qué quieres?-respondió irritado.
-Es que he probado la sangre de mi cuchillo y resulta ser una que ya tenía-explicó la chica-y además me falta sangre.
Tomura comenzó a enfadarse. Esa conversación sólo estaba empezando.

A la mañana siguiente despertaste genial. Habías dormido bastante bien y por primera vez esa semana Kurogiri no te había despertado de madrugada para trabajar, cosa que te extraño pero que a la vez agradeciste. Después de vestirte fuiste al bar pero Dabi te frenó en el pasillo.
-Sigueme-dijo simplemente.
Tu obedeciste aún sin comprender que ocurría. Para empeorar la situación el villano te miraba con ¿pena? ,como si algo malo fuera a pasar.
Al llegar a la sala de tortura comprendiste demasiado tarde lo que ocurría. Sentado en una silla y con medio cuerpo desintegrado por el ya conocido poder de Tomura se encontraba en informante el cual, en cuanto te vio, te envío una mirada aterrada rogando por ayuda antes de ser totalmente desintegrado frente a tus ojos.
-Creo que no entiendes lo que significa que debes obedecer mis órdenes-dijo Tomura con ira en su voz. Te cogió del cuello con cuatro dedos y con fuerza comenzó a agarrarte por los pasillos- Necesitas un castigo. ¡Vas a aprender a quien le perteneces ahora!
Abrió una puerta que conducía a una terraza con nula posibilidad de escape. Fuera estaba diluviando y no parecía que fuera a parar. Tomura te lanzó a la terraza sin ninguna suavidad.
-Cuando acabe tu castigo espero que hayas aprendido a no desobedecerme ______-dijo antes de cerrar la puerta.
Y así comenzó ti castigo. Atrapada bajo la lluvia, con tu calor corporal bajando de forma alarmante y sabiendo que no sentirías calor hasta que Tomura así lo quisiera.