Black Prince and Strange Girl (Kyouya Sata)

Cap 4

No entendía nada de nada, ¿qué narices hacía este chico tan frío diciéndome eso? ¿Trataba de ligar? No, eso no tendría sentido...

- ¿A qué narices juegas, idiota? -Prrgunté enfadada parando su cercanía con mi mano.

La apartó con una burlona sonrisa.

-A lo mismo que tú iniciaste, ¿o crees que no sé tus intenciones? Después de oír a tu hermana hablar de ti sé a la perfección que lo último que eres es una mosquita muerta.

-Escucha. -Digo apretando los labios, odiaba cuando la gente me habla así. -Ni se te ocurra insinuar nada de esas gilipolleces porque prometo que te haré la vida imposible.

-Oh, me gustaría verlo. -Contestó sarcástico. -Seguro serás tú la que ame que le diga perrito.

-Ya te adelanto que ningún hombre con el que he estado me ha llamado así, más bien suplicaban por mi atención. -Contesto fingiendo superioridad. En realidad no era nada creída.

Nos miramos de manera competitiva, esto parecía que iba a ser bastante divertido.

•••

- ¿Has visto a Rika-san hablando con Kyouya-kun afuera antes? ¡Son tan geniales! Los dos juntos brillan de una manera increíble. Como me gustaría ser como Rika-san... -Oigo que dice una de mis compañeras.

Kin me sigue mirando con una coqueta sonrisa.

-Si sigues mirándome así te denunciaré por acoso. -Digo sacando mi cuaderno de inglés, la clase que nos tocaba ahora.

-Con que mi amiguita está empezando a ser más popular por un chico. Me estás engañando, ¿cierto? -Dijo lo último dramáticamente. -Eres una infiel.

-Calla, boba. -Solté pequeñas risas, esta chica estaba como un cencerro.

Comencé a abrir el libro en la página que nos tocaba por dar hoy cuando la profesora entró por la puerta.

-Rika-san. -Todo el mundo se quedó callado mirándonos de manera expectante. Al alzar la vista supe porqué.

-Kyouya-kun, ¿qué deseas? -Pregunté con una fingida amable sonrisa.

Él me respondió de la misma manera.

-Me preguntaba si me podría sentar contigo, se me ha debido de olvidar el libro de inglés en casa.

-Lo siento. -Contesto entristezida. -La profesora es la que debe de dar permiso, ya que es su clase.

-Por mí no hay problema, podéis poneros juntos. -Contestó con una boba sonrisa.

<<Hija de... ¡Pero di que no! >>Acallé mis pensamientos con la misma falsa sonrisa. Toda la clase nos miraba como si fuésemos una obra de arte. <<¿Pero qué cojones les pasa? Ni que sea una supermodelo>>

-Rika. -Susurró el rubio a mi lado. -Rika, oye, sorda.

- ¿Qué coño quieres, rubio oxigenado? -Contesté enfadada en un susurro.

El chico sonrió burlonamente.

-Eres más cruel de lo que dicen... No me digas, ¿también finges ser alguien tan amable?

-Cierra el pico. -Fue lo único que volví a decir antes de volver mi atención a la clase.

Así pasó el resto del día, cosa que me ponía demasiado nerviosa.

¿Recordáis cuando dije que esto de robarle el falso novio a mi hermana sería divertido? Retiro todo lo dicho, esto será más complicado de lo que pensaba.