CUATRO

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"¿Se puede saber de dónde vienes? ¿Y por qué vienes vestida así?" Pregunta Eva, una vez que Valentina entra a la casa.

"Hola Eva. Estoy bien. Gracias por preguntar" Responde sarcásticamente, evadiendo las preguntas y apresurándose hacia su habitación.

"Valentina. No me has contestado. No me hagas perder la paciencia. ¿De dónde vienes?" Eva no desistía.

"¡Qué importa Eva! Deja de meterte en mi vida. No soy Mateo. No tengo porque avisarte a donde voy. Ni pedirte permiso y darte explicaciones. No eres mi mamá" Responde Valentina, detesta pelear con su hermana, pero Eva es muy intransigente, y quiere controlar su vida, y eso no, ella lo no va a permitir.

"¿Por qué vienes vestida así? Con esa capucha sobre la cabeza, como una delincuente"

"¡Eva basta! ¡Ya basta Eva! ¿No te cansas de salpicar tanto veneno? Déjate ya de tantos prejuicios! Me tienes har...

"¡Ey! ¿Pero qué pasa? Cálmense por favor" suplica Guille.

"¡Guille!" Val corre a abrazarlo, "Estás libre. Por fin. ¿Cómo estas?" Pregunta consternada.

"Hola Vale. Estoy bien. Gracias. Feliz de estar libre. ¿Y tú? Estás bien?" Interroga su hermano.

"Sí, después te cuento" admite, no desea compartir sus cosas con Eva.

"Ay, ya me voy. Los dejo. No hagan tarugadas" se despide Eva, como siempre, despotricando contra todo y todos.

"No le hagan caso. Ya saben como es." Les anima Renata.

"Hola Renata" le saluda con un beso Valentina. La verdad es que siempre le ha caído muy bien Renata, la novia de Guille, aun cuando Eva se la pasa molestándoles.

"No te preocupes. Entiendo tu emoción por ver a Guille libre. Te comprendo, me siento igual. Estoy feliz de que este fuera. Estaba muy angustiada por el" responde cálidamente Renata.

"Pero vamos a la sala, tenemos mucho de que platicar. Guille quiero que me lo cuentes todo. Bueno, ya es un poco tarde. ¿Quieres que lo dejemos para mañana?"

"Si no te importa Vale me gustaría descansar. Ya tendremos tiempo de conversar" expresa su hermano.

"Obvio. No creas que te me vas a escapar" responde Valentina, sonriéndole amorosamente. ¿Pasarán la noche aquí en casa?" pregunta.

Guille mira a Renata, como pidiendo su aprobación, pero ésta solamente se encoje de hombros. "Yo creo que sí. La verdad estoy muy cansado y no tengo ánimos de salir. Hablando de salir, ¿De dónde vienes? ¿Y por qué tan sospechosa? A mí se me dirás, ¿no?" interroga Guille, con un tono suspicaz en su voz.

Valentina sonríe, y sobran las palabras. Guille se da por enterado de lo que su hermana le ocultaba con tanto recelo a Eva. "Ya. Creo que ya sé. De casa de Juliana, ¿o me equivoco?" cuestiona Guille. Valentina se limita a asentir, con una sonrisa de oreja a oreja. "Ay hermanita, se ve que estás bien entrada. Me da gusto por ti. Te veo feliz. Y eso es lo que importate. Ya mañana me cuentas. Buenas noches" se despide Guille, mientras él y Renata se dirigen a su habitación.

"Hasta mañana. Que descansen" Responde Val, ojalá Eva pensara igual, piensa, dirigiéndose hacia la cocina por munchies antes de subir a su cuarto.

*****

"¡Estela! ¡Qué gusto!" Saluda Juliana.

"Hola Juli. Qué ganas de verte. ¿Por qué no me has visitado?" Pregunta la muchacha.

"Perdón Estela. He estado súper ocupada. He tenido un buen de problemas. Pero ya. Que bueno que estás aquí" explica Juliana.

"Pues si Mahoma no va a la montaña...jajá" se ríe Estela "aparte de venir porque tenía muchas ganas de verte, y tú me tenías muy abandonada" expresa la chica con un tono dulce en su voz, "mi tía Milagros me envió, porque tiene un trabajo para ti" concluye la muchacha.

ValentinaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora