Body say

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Un poco mareada logró entrar a la casa que estaban habitando por esa semana, cruzó el jardín y le sorprendió ver una luz prendida en la sala de estar, al entrarse encontró con una Taylor preocupada que al verla se lanzó a ella con un abrazo.

—Perdóname—pidió la morena a Gabriella—Sé que tú no querías hablar con Troy y nosotros te forzamos. Sharpay dijo que él te extrañaba mucho y creímos que al menos se merecían una oportunidad de hablar.

La recién llegada suspiró y se sirvió una taza de café que tenían en la barra de la cocina.

—No te preocupes Taylor, lo hicieron con la mejor intención—su amiga la miró—también lo extrañaba, pero verlo hoy me hizo darme cuenta que terminar fue lo mejor que pudimos hacer.

Gabriella le contó todo lo que había pasado esa noche, desde la pizza favorita de ambos hasta show musical final, sin obviar que recordaron su ruptura y que terminando de cantar una larga fila de jóvenes le pidieron una foto a Troy.

—¿Te das cuenta, Tay? Esa es la vida de Troy. Por algún momento de esta noche volvimos a ser aquellos jóvenes que se escondían en el campo de golf de su trabajo de verano para besarse—cerró sus ojos—pero cinco minutos después ya era el famoso Troy Bolton que aparece en revistas y espectaculares.

Taylor se sentó a su lado imitando su acción de servirse una taza de café.

—Gabriella—le tomó su mano—tú hiciste a ese Troy y que sea famoso no quiere decir que no te quiera, esas chicas...

—Esas chicas sueñan con él, otras como Sharpay lo besarán en escena. ¿Tú te sentirías cómoda si medio país tuviera una foto de Chad en su habitación? Y eso ahorita que sólo está haciendo musicales, no dudo que pronto comience con el cine.

—Pues Chad también ha sido portada de periódicos, revistas, incluso tiene una figura suya que salió la temporada pasada en una caja de cereal—Gabriella le lanzó una mirada desaprobatoria—y no sólo mujeres, también hombres y niños me imagino sueñan con él. Sé lo que se siente ir de vacaciones y tener que detenernos para que se tomara una foto con algún fan. Yo sé lo que es eso y por eso mismo te digo, amiga, que no es importante. Okay, Troy se besará con alguien en escena pero ¿tú no sabías eso cuando le dijiste que se dedicará al teatro? ¿Qué creías que tú ibas a ser su pareja en todas las obras? Tú ni siquiera te planteaste la idea de estudiar eso.

—Taylor....

—Mira Gabriella—no la dejó hablar—si tú me dices que no sentiste nada al verlo, que está todo superado y que volverás Illinoils segura de que Troy quedó en el pasado, te juro que no te vuelvo a tocar el tema. Pero si al estar con él, sentiste que había una oportunidad, sentiste esa paz que envolvió a ambos por seis años, entonces no dejes que esto acabe así. Tú eres mucho más inteligente que esto—le dio un beso en la mejilla—ahora ve a dormir que se ve las cervezas te marearon un poquito.

—Y por cierto—agregó Taylor—mañana haremos una fiesta de despedida. Troy está invitado.

Gabriella rodó los ojos y sin decir una palabra más se fue a su habitación. Se quitó los zapatos y aventó el abrigo. Había sido un día de muchas emociones. Nunca pensó que ese viaje a Albuquerque reviviría tantos recuerdos dormidos.

Mientras se desmaquillaba pensó en Troy, los copos de nieve que se veían a través de la ventana la hicieron recordar cómo se conocieron y sonrió al entender que el destino los unió pues no era coincidencia que de conocerse en un hotel pasaran a estar en la misma escuela. Pero eso se había acabado, lo de esa noche no había sido obra del universo si no de sus amigos que insistían en algo que ya no tenía sentido.

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