Cuando te conocí (AU) BeyBlade Burst

III

Se terminaron sus respectivos helados, y se mantuvieron sentados en el mismo lugar durante 5 minutos, para Daigo se le hicieron eternos, ya que no había levantado su mirada del piso.

Ken al notar el arrepentimiento que sentía Daigo en ese momento, no pudo evitar reír internamente por la actitud tan infantil que éste había hecho.

Para romper la tensión que se había empezado a generar, Ken decidió invitar a Daigo a comer:

- ¡Hey muchacho! - le dijo Keru a Daigo con un tono "enojado" para así poder llamar su atención

- ¿Qué sucede? - Daigo no pudo evitar decirlo con ansiedad, sentía que ya no iba a poder estar más con Ken

- ¿Quieres ir a comer con nosotros? - esta vez, hablo Besu con un tono más neutral

- ¡¿Eehh?! - fue lo único que pudo decir en ese momento

- ¡¿Qué si quieres ir a comer con nosotros?! - dijo Keru en tono irritado, esperando que Daigo espabilara

- ¿Estas hablando en serio? - Daigo no esperaba esa invitación por parte de Ken, él seguía pensando que Ken se había enojado con él

- Por supuesto que si - dijo Besu en tono comprensivo

- Sino, no te estaríamos invitando - dijo Keru con tono burlón - Muchacho, ¡espabila! - y con esto le dio un pequeño golpe en el brazo derecho de Daigo

Daigo no podía creer aquella acción, seguía estático pero al notar la sonrisa sincera de Ken, no pudo evitar sentirse aliviado que hasta soltó un pequeño suspiro

Ken se levantó de aquel lugar y empezó a caminar en una dirección. Daigo hizo lo mismo al ver que Ken se alejaba, y corrió hasta llegar a su lado. En todo el trayecto, Daigo no dijo nada, no le importaba a donde lo llevará Ken, mientras pudiera estar cerca de él.

Ken se detuvo en una pizzería, cuando Daigo observó aquel lugar, simplemente no pudo evitar sorprenderse. Ambos entraron en aquel establecimiento y pidieron 2 pizzas y un refresco mediano para compartir.

Una vez que su orden fue hecha, el cajero les dijo que fueran a sentarse a la mesa que más les gustase en lo que estaba su orden. Se fueron a sentarse a una mesa algo apartada de todos.

Daigo estaba muy nervioso porque en frente de él estaba Ken, tenía una mirada neutral, no sabía si estaba enojado o no, quería preguntarle pero sus palabras no salían de su boca.

Cuando por fin iba a hablarle, llegó el cajero con su orden, Daigo se sentía patético por la manera en la que fue interrumpido. Ken solo sonrió por la cara que éste había puesto segundos atrás.

Sin dudas, Daigo supo que tuvo el peor día de su vida. Mientras que Ken, tuvo el día más divertido de su vida.