XIV

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Una vez que Ken se había quedado dormido, Daigo se volvió a colocar su cinta, para después comenzar a cuidarlo. Con un paño empezó a limpiar el sudor de su cara, le contempló cada una de sus facciones y no pudo evitar sonrojarse, sabia que no era el momento adecuado para actuar de esa forma, así que sacudió un poco su cabeza para poder enfocarse en lo que realmente importaba.

Al pasar algunos minutos, una enfermera entró a la habitación, sorprendiendo al azabache que se encontraba ahí, y le entregó las pertenencias, ya limpias, del titiritero para, posteriormente, retirarse del lugar. Daigo las colocó en una mesita que estaba cerca de la camilla, para después terminarlo de limpiar.

Una vez hecho esto, quiso despertar a Ken pero no pudo, lo veía tan pacífico que se sentiría mal sí lo hacia, así que esperaría a que éste se despertará solo.

Pasaron unas cuantas horas, Daigo le seguía cuidando, poco a poco vio que Ken se estaba despertando. Cuando lo hizo completamente, le sonrió a Daigo, éste le entregó a Keru y Besu, Ken le agradeció por haberle entregado a sus marionetas para después contarle todo lo que sucedió el día anterior.

Cuando Ken término de contar la historia, Daigo no pudo evitar sentirse culpable, pensaba la forma de compensar al azabache para así, volverse a ganar su corazón. En ese momento tocaron la puerta de la habitación, sorprendiendo a ambos azabaches, cuando la puerta se abrió, Ken pudo distinguir a tres personas: un peli azul, un peli rubio y un albino, se asustó un poco ya que al único que conocía era al albino:

- Amigo!! - grito un peli azul mientras se acercaba rápido,  haciendo que Ken se asustará por tal acto

- Valt lo estas asustando - le dijo Shu mientras lo detenía a escasos centímetros de la camilla - Lo siento Ken

- ... - Ken iba a responder pero fue interrumpido

- Una pregunta, ustedes desde cuándo se conocen? - preguntó Audaz intrigado, no sabía en que momento Shu y Valt habían conocido al par de azabaches, ya que apenas y había conocido al de menor estatura

- Es una larga historia - respondió Valt mientras se rascaba un poco la cabeza, éste se sorprendía de la facilidad con la que hacia amigos

- Te los presentaré - decía Shu tras ver la cara de preocupación de Ken - El es Valt Aoi - señaló al peli azul - y el es Rantaro Kiyama pero la mayoría le dice Audaz - señaló al peli rubio. Los mencionados le saludaron después de qué Shu los presentará respectivamente

- Yo soy Besu - respondió la marioneta café - y el es mi hermano Keru - dijo mientras señalaba a la marioneta azul, cuando quería continuar con su presentación, fue interrumpido por el peli azul

- Woow!! Como haces eso?! - dijo un sorprendido Valt mientras le intentaba quitar una de sus marionetas, Daigo al notar esa acción, apartó rápido la mano de Valt, evitando que tocará alguna de ellas

- No lo hagas - le dijo con una voz fría al mismo tiempo que hacia la acción, haciendo que Valt le tuviera miedo y se fuera a esconder detrás de Audaz

- Lo siento - se disculpo, no quería que Daigo se enojará con él - por cierto no me dijiste tu nombre

-Te lo iba a decir cuando lo interrumpiste - Shu, Audaz y Daigo pensaron lo mismo, pero no lo dirían en voz alta, sabían que Valt era algo sentimental

- Se llama Ken Midori - Daigo respondió por él, ya que el mencionado tenía una cara de pánico tras la primera impresión que tuvo de Valt

Una vez hecha la presentación, pasaron parte de la tarde con Ken, conociéndolo y así mismo, formado una inigualable amistad. Cuando llegó la hora de la cena, aquel trio se despidió, dejando al par de azabaches en ella. En lo que Ken cenaba, Daigo salio la habitación para hacer lo mismo, fue a la cafetería de aquel hospital para comer algo, y así mismo, tener la fuerza necesaria para cuidar del titiritero.

Cuando terminó de hacerlo, rápidamente se dirigió a la habitación de Ken, notando que éste apenas había acabado de cenar. Estuvieron un rato platicando de todo lo que había sucedido esa tarde, hasta que Ken notó que Daigo tenía sueño, se le ocurrió dejar que éste durmiera con él, a su vez, de evitar que se fuera dejándolo solo en aquel sombrío lugar:

- D-Daigo - le llamo usando su voz real

- Qué pasa Ken? - le respondió con un poco de preocupación

- T-tengo frío - se excusó, notó como Daigo se sorprendía por aquella confesión, esperaba que éste entendiera la indirecta

- P-puedo? - dijo mientras se levantaba de aquella silla y abría un poco sus brazos en forma de querer dar un abrazo

Ken solo asintió con su cabeza algo sonrojado, mientras hacia un espacio en su cama para que Daigo se recostará en ella, al notar aquella acción, Daigo poco a poco se fue sentando en ella, a su vez que empezaba a abrazar a Ken por la cintura.

Ambos ya recostados y abrazados, empezaron a sentir pesadez en sus ojos y así, cayeron dormidos con la tranquilidad de saber que el otro estaba a su lado. Después de que ambos azabaches se quedarán dormidos, entró una enfermera, con la intención de avisarles que ya era hora de dormir, pero al verlos dormidos sólo se limito a apagar la luz de la habitación, para que ambos pudieran descansar mejor.

En la madrugada, Ken se había despertado y notó que Daigo aún estaba con él, le contempló un rato mientras recordaba como se había enamorado de él, y después volvió a dormirse, no sin antes volver a abrazar a Daigo mientras sentía la calidez que el cuerpo ajeno le daba.

Cuando te conocí (AU) BeyBlade Burst Donde viven las historias. Descúbrelo ahora