le petite mort | bts smut

skeletons dance at night / taegikook

tw// trio

La fiesta de egresados más aburrida del mundo.

Todos los de la promoción 2009 con sus camisas blancas y pantalones negros, las chicas y los vestidos que habían preparado con tanto esmero. Música horrible, todos bailando y fingiendo ser correctos, totalmente sobrios mientras los padres en las mesas comen y miran, felices de que la secundaria haya terminado por fin.

Yoongi los observa desde la barra de comida, apoyado sobre ella mientras toma gaseosa de un vaso, la botella de vidrio aún reposando en el bolsillo de su campera de cuero color negro. Se ve tan distinto a las blancas camisas y las sonrisas fingidas, que le causa gracia. Sonríe de costado tomando el último sorbo, y mueve sus cabellos rubios hacia un lado para poder ver mejor. Sabe que las miradas están sobre él, como siempre, hoy no sería la excepción.

Nunca fue el tipo de persona desesperada por encajar. Sinceramente, no podía importarle menos el tumulto de gente que se hacian llamar "compañeros", "amigos", eran solo humanos conviviendo, ¿dónde está la química mágica en ello? Y sin embargo los ve ser felices y piensa, con qué poco se conforman, con qué poco nos conformamos los seres humanos.

Simplemente ve primates bailando, riéndose y disfrutando de una cosa tan estúpida como bailar en una pista con luces rojas, verdes y azules reflejándose en sus camisas blancas mientras la música los ensordece, los idiotiza un poco más, y los hace felices.

Aún así, decide pasearse por la pista, las miradas se posan sobre él y su figura peculiar. Camiseta de alguna banda de rock, pantalones negros gastados y rotos, cinturones de tachas metálicas, cadenas, el delineador negro en sus ojos felinos y los pines brillantes a la luz en su campera de cuero; es un ser distinto en el medio de un universo de camisas y vestidos.

Entonces esos ojos profundos y estrellados aparecen, lo miran, sorprendidos. ¿Acaso no esperaba que viniera? Qué irrespetuoso, realmente creía que se perdería la "fiesta del año" (que de eso, no tenía nada). Él quiso acercarse, pero, como ya era costumbre, Yoongi negó con su cabeza en un gesto de "Hoy tampoco".

Y para su sorpresa, Jungkook no bajó su cabeza ni se enojó, sino que sonrió con simpleza y se dirigió a otro punto de la pista. El rubio se abrió paso entre la gente, para verlo murmurar algo en el oído de otro chico, de cabello castaño y piel trigueña, no llegó a verlo muy bien, las luces se lo impedían. De un momento a otro, los perdió de su vista.

Salió del tumulto de gente, y efectivamente, los encontró, pero no en la posición que esperaba exactamente. Apoyados en un rincón, Jungkook lo había tomado en sus brazos para besarlo contra la pared, moviéndose contra él al ritmo de la música.

Y aunque no le importaba nadie ni lo que dijeran, al ver a Jeon hacer eso con alguien que no era él, le dio un puntazo en el pecho. Ok, había sido divertido jugar con el falso hetero que le tenía ganas desde tercer año, pero nunca creyó que iba a conseguirse a alguien más y eso dolía un poco.

Aunque no podía enojarse del todo, no solo porque el pelinegro no era de su propiedad, sino que, además, el otro chico de camisa blanca era igual o más hermoso que él. Ahora que podía verlo bien, notaba sus facciones definidas y sus ojos, unos que, sinceramente, nunca antes había visto. El chico los abrió lentamente y al notar su presencia, lo miró fijo mientras pasaba los brazos por el cuello de Jungkook.

¿El muy hijo de puta lo quería poner celoso? ¿O quizás solo quería tentarlo? No lo sabía, pero no podía apartar la mirada de esas gemas que tenía por ojos, mientras se relamía los labios. Se separaron, Yoongi leyó las palabras en su boca. "Pará, pará" le decía, mientras Jeon pasaba a morder su cuello "Pará, Jungkook, tenemos público."