le petite mort | bts smut

mirror / taejoon

Taehyung tenía una autoestima particularmente alta.

No era alguien narcisista, o bueno, eso pensaba él. Solo le gustaba su apariencia y no tenía problema alguno con lo que veía en el espejo, eso era todo. Así empezó, una gran autoestima y confianza en su cuerpo y rasgos faciales. Había tenido inseguridades en su adolescencia quizás, pero eran menores, y eventualmente las pudo resolver, cambiando y mejorando detalles, retocando, alcanzando así su deseada perfección. Una piel limpia, tostada y reluciente, con lunares que de alguna u otra forma terminaron gustándole, el cabello que, del color que fuera, le gustaba, porque no creía que ningún color pudiera quedarle mal. Ahora lo tenía castaño oscuro y largo hasta el final de la nuca, era abundante y sedoso. Siempre olía a vainilla por el shampoo que utilizaba, le gustaba tener una fragancia linda que acompañara su belleza exterior. 

Le gustaba usar camisas abiertas, cosas que se ajustaran a su cuerpo, sabía que atraía miradas y Dios, ¿Para qué mentir? La mirada de hombres y mujeres por igual le fascinaba. Vivía por ellas, vivía por su apariencia y la manera en que la gente que se acercaba a hablarle no podía mantener sus ojos quietos por mirarlo de arriba hacia abajo, y viceversa.

Incluso sus propios compañeros de grupo lo hacían, algunos hasta inconscientemente. Todos conocían todo sobre todos, tantas duchas y vestuarios compartidos les habían dado la oportunidad de verse hasta desnudos, y no les generaba ya ningún pudor el cuerpo del otro; estaban acostumbrados. Aún así, podía sentir las miradas indiscretas de Yoongi y Jungkook cuando usaba algún pantalón demasiado ajustado, los besos de Hoseok en un tono "familiar" (lo cual era mentira, lo hacía solo para oler y disfrutar su perfume), las caricias que Seokjin hacía en su cintura y hombros, y Jimin, que conocía todo de él.

Park, el otro miembro de la línea del 95, lo conocía tan a fondo que podrían ser hermanos, pero si tomamos en cuenta que durante un año no pararon de besarse y tener sexo a escondidas de las cámaras, el staff y el grupo... sería muy raro decir que son como hermanos. Esto hubiera seguido así, de no ser que al pequeño se le hubiera escapado el nombre del maknae del grupo en un orgasmo, y tuvieran que ponerle un punto final a ese capítulo de su amistad. Aunque siguieron siendo grandes amigos, incluso más que antes. 

Volviendo a Taehyung, el mundo entero quería tenerlo, excepto alguien. Y eso, a nuestro protagonista, lo molestaba: ¿Por qué Kim Namjoon, el líder del grupo, era tan inquebrantable en ese sentido?

Él podría ponerse desnudo y en cuatro sobre la cama del líder y lo único que recibiría como respuesta sería un "Taehyung, ¿qué se supone que estas haciendo? Andate a dormir" y no había palabras para describir lo mucho que hacía rabiar al castaño el no recibir atención por una persona en particular. Namjoon no parecía difícil de impresionar, pero las apariencias engañan bastante, y este tema lo traía bastante malhumorado. 

— ¿Realmente te vas a molestar por esto? — Las palabras de Jimin sonaban extrañas por la cantidad de comida que tenía en su boca. Estaban comiendo en su habitación en el departamento compartido por los siete, el tour aún no había empezado y estaban descansando por unos días antes de empezar a ensayar nuevamente. — Taehyung, los tipos van y vienen, hay miles de peces en el mar y convenientemente, todos te quieren entrar. 

— Jimin, podría tener a cualquier pez o criatura del mar que quisiera, pero yo lo quiero particularmente a él. — Se quejó, frustrado, con la cara enterrada en una almohada. — ¿Por qué nunca tengo nada de lo que quiero?

Su amigo tuvo que bufar mientras ponía sus ojos en blanco. 

— Estás ahogándote en un vaso de agua. — Jimin se levantó a tirar las bolsas y cajas de comida vacías y el chico recostado en la cama lo pensó. A lo mejor no era un gran problema pero, ¿qué le costaba a Namjoon poner aunque sea un poco de atención en él? No estaba pidiendo mucho. — Ni que te fueras a casar con Namjoon-hyung.