3.

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Siguiente domingo, Jaebum y yo nos encontrábamos listos para comenzar a grabar.

-Muy bien, vamos a empezar. -me acerqué a la cámara para pulsar el botón y que la grabación se pusiese en marcha.
-¡Espera! -medio gritó mi amigo. Paré mis movimientos y le miré expectante. -No me gustan los retos que nos han puesto. -puso una mueca de fastidio.
-¿Por qué? -ladeé la cabeza y me acerqué a él que estaba mirando su móvil.
-¡Son todos demasiado gays! ¿Qué le pasa a la gente? Esto de que nos empiecen a shippear no me gusta nada. -se quejó.

Suspiré. La verdad es que tenía razón. Muchos de los retos trataban sobre hacer cosas que desde nuestro punto de vista no eran muy heterosexuales, pero tampoco podíamos dejarlos sin vídeo de retos. Ya muchos de los que nos seguían sabían que el siguiente vídeo iba a tratar sobre eso, así que no podíamos dar marcha atrás.

-No te preocupes por eso, vamos a intentar hacer los menos complicados, ¿vale? No quiero que esto se vuelva incómodo.

Aceptó sin más remedio y empezamos a grabar. Hicimos nuestra típica introducción y explicamos de qué iba a tratar el vídeo, aunque con el título que le pondríamos la explicación sobraba, pero nunca estaba de más. Una vez dicho todo lo necesario, empezamos a leer de nuevo los retos para escoger los que más nos llamasen la atención.

-Muchas personas nos estáis pidiendo que hagamos el reto de estar esposados veinticuatro horas, y como es algo que quiere demasiada gente, lo haremos. -aceptó. -Pero, -alzó su dedo índice. -en el siguiente vídeo, porque eso es un reto que dura un día entero y hoy debemos cumplir con varios.

Me sorprendió bastante que él aceptase ese reto. No era normal que le pareciese bien, ya que a él le encantaba tener su espacio y que nadie se acercase demasiado. El hecho de estar esposados durante un día entero implicaba hacer todo juntos y pasar ese día unidos. No estaba seguro de que él pudiese cumplir con las veinticuatro horas, y si lo llegaba a soportar seguro que sería con malhumor.

-Oh, este trata sobre mí. -dije animado y empecé a leer. -Reto a Youngjae a que mande un mensaje por Instagram a la primer chica o chico que aparezca en los amigos de Jaebum, y luego debe preguntarle a esa persona si le gustaría tener una cita. Si le responden que sí, debe grabarlo en un vídeo.

Al terminar de leer el reto, hice una mueca en desacuerdo. Jaebum se rio con ganas y yo le fulminé con la mirada. ¡No me gustaba el reto!

-Lo has leído, así que debes cumplirlo. -sentenció mientras entraba en su cuenta personal de Instagram. -Pero en vez de mandar un mensaje a la primera persona que salga, yo voy a bajar y tú me vas a pedir que pare. La persona que elija mi dedo, será a la que debas mandarle el mensaje. -ideó.

Me pareció bien ese método e hicimos eso. Él entró en la lista de las personas que seguía y empezó a pasarlas. A todo esto, yo no podía mirar la pantalla porque sino estaría haciendo trampa.

-¡Para! -pedí.

Su dedo dejó de moverse y se quedó quieto en una persona. Ambos miramos atentos la pantalla para ver quién me había tocado.

Cuando verifiqué de quien se trataba me di un golpe en la frente con la palma de mi mano. ¿Moonbin? No podía ser, ¡era un chico!

-Le ha tocado un chico. -comentó mi amigo a la cámara con una sonrisa.
-Pensé que me iba a tocar una chica. -hice un puchero. -¿Por qué tengo esta suerte?
-Debes aguantarte, un reto es un reto. Como tú también sigues a Moonbin, entra en tu cuenta y díselo.

Quería darle un golpe a Jaebum. Hasta hace poco se estaba quejando de los retos, pero este que solo me involucraba a mí, sí le divertía y parecía bien.

YouTube [2Jae]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora