N U E V E

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El gélido viento choca contra su rostro tornando frías sus lágrimas.
Puede escuchar el susurro de las olas colisionando contra las rocas de la costa, siendo distribuidas como una lenta melodía que desprenden la copa de cada frondoso árbol.
A pesar de la luna llena, el camino se ve oscuro, y penumbroso. Lisa no sabe exactamente a dónde se dirige, pero la cálida mano que aún sostiene la suya con firmeza parece no tener intenciones de soltarla y dejar escapar; así que simplemente se deja guíar.

Entró a gatas en la casa del árbol, que no era mucho más que un cubo de tres metros por tres metros en el que ni siquiera podia permanecer de pie. Pero Lisa quedó maravillada. Había una pequeña ventana al sur con unas suaves cortinas color pastel obstruyendo la visión del exterior.
Junto al rincón un pequeño taburete el cuál servía de soporte para las velas, y una amplia y gruesa alfombra con un par cojines. No era la gran cosa, pero fue suficiente para Lisa.

--Dijiste que no querías volver a casa... entonces pensé que éste sería un buen lugar. --dijo él de pronto.
Se acercó y le cogió la cara entre las manos.
--No llores, por favor.

Y aquellas palabras, indirectamente llenaron sus ojos de lágrimas. Tuvo que respirar hondo para contener el llanto, pero cómo hacerlo cuándo el borroso recuerdo de la dura y gastada mirada de Jisoo le observaban con asco. Sus palabras fueron tan duras que quemaron su alma. Ella jamás le haría daño a la omega, no después de todo lo que ella le ha ayudado.

Taehyung le abraza con fuerza y  roza la frente con sus finos labios. Su mano recorriendo la espalda ajena de arriba a abajo.
Un aroma dulzón inundó la habitación. Aquel aroma tan fresco y relajante que obliga a la omega a hundirse en el cuello contrario, regocijando a su lobo.

Ambos tomaron asiento en la mullida alfombra. Lisa se sentó de lado, como una niña en busca de mimos, importando muy poco la obvia lejanía que han mantenido estos días.
Se permitió sollozar un poco más en el silencio de la minúscula cabaña, desechando cada una de sus penas, a pesar que Taehyung se encargaba de susurrarle por momentos que nada ha sido su culpa mientras acariaba su cabello. Lisa sopesa los problemas que aquella confusión traería. No, ella no permitirá que el amor entre Jin y Jisoo se desvanezca.
Taehyung estudia el rostro de la bonita omega a su lado. Parece sumergida en una pequeña burbuja, lejana al lugar y posición que se encuentran. Hace eso cuándo están juntos, sin que ella lo note, refresca la imagen de su rostro para guardarlo en su memoria.
Lisa era, con mucho, la omega más linda que ha conocido. Su cabello rubio, y los ojos verdes, aquella sonrisa angelical como encantadora. Observa bajo la pálida luz de las velas, su nariz de botón rojiza y sus labios hinchados. Aquellos que ya ha probado y muere por tener cerca otra vez.
Algunos días su alfa parecía volverse loco. Estar lejos de ella le dolía, y cuándo no podía soportarlo más se enfrascaba en su estudio, tomaba un lienzo y dibujaba sobre el lo primero que llegaba a su mente... para su mala suerte el boceto final, indirectamente estaba relacionado con la omega que le robó el aliento desde que todo en su vida se derrumbó. Entonces ahí, en el preciso momento en que Lisa le miró, con aquellos hermosos ojos brillantes, él, entendió que ya no solo se trata de atracción, no es solo un bonito rastro cautivandole, es cada parte de su ser siendo admirado. Aquel imperceptible magnetismo, su alfa llamando a su omega. Fue él, todo este tiempo, su lobo llamando a su pareja.

--¡Eres hermosa!-- le susurra al oído, con un suspiro.

--N-no digas esas cosas. --respondió, con aparente nerviosismo tratando de ocultarse en el pecho del mayor, resfregando su adolirada mejilla sobre su remera blanquecina.

Aquellos halagos solo eran uno más a su lista. Ha recibido siento de ellos, durante su corta carrera. Fans asegurando que su ser refleja perfección, pero Lisa no cree en ello, no es más que una simple mortal atravesando la tierra; pero las palabras se vuelven correctas y significativas cuándo la persona correcta las dice.

Algodón de azúcar || Taelice OmegaverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora