Y así comenzó su día de compras. La gente al principio miraba a Isaac divertidos y le tomaban fotografías pero después de un par de horas Isaac caminaba sin ayuda pero con algunos tropiezos.
-¡Chicos!- llamó Bea desde una tienda a unos pasos de ellos.
Nathan y Fred ya llevaban cerca de diez bolsas cada uno.
-Este vestido esta asombroso- chilló Riley tomando un vestido blanco con rayas verticales color negro y un moño del mismo estampado en la cintura- ¡Santa vaca inflada!
-¿Qué?- preguntó Sabrina reuniéndose con su amiga.
-¡Mira el precio!- chilló la chica señalando la etiqueta.
-Oh, pero vale la pena ¿no?- preguntó Sabrina.
-Por supuesto que no- reclamó Riley- bueno, solo un mucho.
-Vamos, encontraremos algo mejor en otra tienda- la persuadió Bea.
Las chicas caminar horas y horas decidieron sentarse a comer.
-¿A dónde quieren ir?- preguntó Fred.
-a Friday’s- exclamaron las tres chicas al mismo tiempo.
Las chicas caminaron alegremente hacia el restaurante. Los chicos las siguieron exhaustos.
Al llegar al restaurante buscaron una mesa vacía y miraron el menú.
-Me encantan todos los pins que tienen los camareros- admitió Bea- son el doble de los que yo tengo.
-¿tienes?- preguntó Isaac.
-Sí, trabaje un par de meses aquí- respondió ella.
-¿saben que van a pedir?- preguntó la camarera.
-Sí, dos hamburguesas- pidió Isaac.
-Isaac, vinimos al centro comercial a que bajaras la cena de ayer, así que no puedes pedir dos hamburguesas- le advirtió Riley.
-¿Y que si como dos hamburguesas?- retó Isaac.
-Nos iremos hasta que todas las tiendas cierren- explicó Sabrina sonriendo.
-Hoy hay una venta nocturna en Forever 21- añadió la camarera.
-¡Genial!- exclamó Bea con una sonrisa malvada.
-Bien, entonces quiero una ensalada cesar- pidió Isaac de mala gana.
-Yo quiero una orden de alitas- pidió Riley.
-Yo quiero una también- pidió Bea.
-Y yo quiero una ensalada verde- pidió Sabrina.
-¿Podemos pedir dos hamburguesas?- preguntó Nathan.
-Claro, ustedes tienen que tener energía para cargar las bolsas- respondió Bea despreocupada.
-Entonces dos hamburguesas, por favor- pidieron Nathan y Fred.
-Eso no es justo- se quejó Isaac.
-Tienes que cuidar tu figura, Isaaca- Le dijo Bea.
-Creo que Isabela le queda mejor- opino Riley.
-Bueno, es muy poco original pero está bien, Isabela será- accedió Bea.
La camarera regreso unos minutos después con las ordenes. Bea y Riley comían alegremente sus alitas mientras que Isaac las miraba de mala gana.
-Isabela, ¿Por qué no has tocado tu comida?- preguntó Sabrina y el chico la miro enojado.
-Tienes que comer ¿acaso eres anoréxica?- preguntó Riley.
El suspiró y empezó a comer. Cuando terminaron de comer pagaron y siguieron comprando.
-Bea- llamó Nathan mientras estaban en Hollister- ¿me ayudas en algo?
-Claro- dijo la chica sonriendo y se le acerco- ¿Qué necesitas?
-¿Recuerdas el vestido que le gusto a Riley?- preguntó el chico y Bea asintió- ¿podrías ir a comprarlo?
Bea adivinó cuales eran sus intenciones y sonriendo acepto el billete de cien dólares que Nathan le ofrecía.
-Claro- respondió la chica y salió de la tienda.
A los pocos minutos regreso con dos bolsas más una se la entregó a Fred y la otra a Nathan guiñándole el ojo.
-¡Isabela!- llamó Bea después de seis horas de estar en el centro comercial- ¿es acaso lo que veo en tu frente sudor?
-Si lo es- respondió Riley por él.
Las chicas chocaron sus manos, Bea había ganado la apuesta.
-bueno pero ¿que apostaron?- preguntó Fred.
-Isaac será mi esclavo durante una semana- respondió la chica triunfante.
Isaac suspiró.
-bueno, podemos regresar a casa- dijo Riley sonriendo.
Todos subieron a la camioneta de Riley y ella condujo hasta el edificio de puerta roja.
-Bueno, empiezas el lunes, Isabela- le dijo Bea cuando llegaron a su piso.
-Ahí estaré Be…- dijo Isaac pensando en un nombre de hombre para ella- Beatricio.
-Lo que digas- dijo ella ondeando su cabello y entrando a su departamento.
Se que es un capitulo corto y ya hace más de un mes que no actualizo pero es porque ya empecé la escuela y no he tenido inspiración. Una persona me dijo que escribir sin tener inspiración puede ser el peor error de tu vida.
El punto es que ya leyeron el capítulo y van a votar y comentar ¿verdad?
¡Muack!
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Los chicos de enfrente.
Tienerfictie¡Genial! Acabaste la secundaria y te libras de tu peor pesadilla contra la que peleabas por el mejor promedio, tener los comics primero, entre otras cosas que un nerd entendería. Es lo mejor, ahora sin ella puedes vivir mejor, tener el mejor promedi...