Emilio se dejó caer en el el sofá dentro de los camerinos, echo un vistazo a un par de botellas puesta encima de una mesita, ahí estaba una nota, con el dibujo mal hecho de un pulpo. Eran varias botellas de solución de electrolito, una sonrisa se dibujó en sus labios, sujeto aquel a sabor a manzana. Sin prestar mucha atención al entorno se dirigió al escenario, donde su compañero ya estaba frente a uno de los productores, siguiendo instrucciones. Una descarga eléctrica sacudió su cuerpo, se sentía vivo.
Ese día fue agotador para ambos protagonistas pero se compenso al pasarlo juntos, bromeaban más de lo normal, hecho que causó cierta curiosidad en sus compañeros. Generalmente Emilio y Joaquín se encontraban cada quien en una esquina contraria inmersos en sus celulares.
—Me has traido toda la tienda.—Indicó sorprendido el chico de cabellos rizados con una inmensa sonrisa impresa en el rostro. — No tuviste que molestarte.
—Pues prometí cuidarte y además ayer nunca contestaste mi mensaje.—Aunque las palabras fueron dichas con una sonrisa en la boca, el tono llevaba tintes de reprocho que no pasaron desapercibidas por el mayor.— Andando que debemos continuar ensayando.
Emilio ladeo la cabeza mirando fijamente la espalda de su compañero, sus ojos se bajaron discretamente, efectivamente él tenía mejor pompa y también se encontraba molesto por no haber contestado el último mensaje. Quiso hacerlo pero la conversación con su novia se extendió hasta muy tarde. Entrecerró los ojos sorprendido, era la primera vez que su compañero de reparto mostraba molestia directa hacia él. Significaba que comenzaba a confiar.
Joaquín se levantó del sillón donde se encontraba acostado. Sí, realmente Emilio Osorio le caía mal, lo prejuzgo antes de conocerlo mejor, los amigos con quien se mezclaba y ese aire de egocentrismo le desagrada. Con el tiempo descubrió que su compañero era distinto, era amable y muy respetuoso, pero sus personalidades eran tan contrastantes. Él era el hijo del productor al que todos saludaban, alababan y tratan bien mientras él era un "actor secundario", uno mas del montón, el chico que logró entrar simplemente porque el productor vio algo en él.
Emilio se salió del chat para buscar una imagen de su galería, descubrió que poseía muchas selfies con sus amigos, familiares, videos de eventos pero no de su compañero de reparto. Aquellas fotos guardadas con él fueron descargadas de la cuentas oficiales de la telenovela. Una nostálgica sonrisa se dibujó en sus temblorosos labios, él y Joaquín nunca fueron amigos. Eran excelentes compañeros de trabajo con una muy buena química pero nunca llevaron a un nivel superior su relación. Un hueco se formó en la boca de su estómago, él nunca buscó a Joaquín y por la personalidad de este, él nunca lo buscaría para una amistad.
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Te prometo anarquía
FanficUn evento el 14 de Febrero le daría un giro de 360 grados al mundo de Emilio, ahora de regreso a la CDMX no sabe cómo procesar el cúmulo de sentimientos que lo dejan sin aliento y perdido en la incertidumbre. Un beso lo puede cambiar todo y dar ini...