☆ ONE SHOTS MARVEL ▪ VOL. 1 ☆

#28 "MANOS MÁGICAS" - STRANGExLECTORAxWANDA (SAGA•SMUT)☡+18

STRANGExLECTORAxWANDA
Inspirado: en el comics New Avengers: ILLUMINATI #3 en donde clea ,Wanda y strange hacen un trío. ¡OMG!
Advertencias: todo de a tres... ya saben...
#manosmagicas #SaletriejapoliamorosaALV(?)🔥

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Todo dio comienzo hace ocho meses atrás, antes de la llegada de Wanda siempre fueron ellos dos. Acoger a la castaña en el santuario no fue una decisión, simplemente era algo que ambos debían hacer por el bien de su vieja amiga. La joven de no más de 30 años representaba el peligro en carne propia, sí asi la veían sus amigos y la gente de la gran cuidad de Nueva York.

Antes de llegar al santuario ella era sólo un pequeño fragmento de la mujer que alguna vez fue. Si bien sus poderes siempre fueron inestables está vez se habían convertido en un problema el cual no podía acarrear sola. Sus hombros pesaban tal como su tristeza, con un matrimonio fallido y un hermano ausente, ella sentía que estaba sola en esta vida.

Su meta con Wanda era simple, Ellos debían ayudarla a como de lugar. Sus primeras semanas fueron algo difíciles, ella no tenía ánimos de nada. Pero en la octava semana los sorprendio apareciendo en el salón de meditación. La castaña no hacia mas que llorar, los dos se acercaron a ella y sin pensarlo la consolaron de la única forma que sabían. Y desde ese dia todo fue muy diferente. (T/N) y Stephen estaban de acuerdo que harían cualquier cosa por ella y así fue.

"¿Que haría sin ustedes?" Les preguntó Wanda con una tímida sonrisa.

"¿Y que sería de nosotros sin tí?" Repregunto (t/n) con algo de tristeza. Lo que había iniciado hace unos meses hoy llegaba a su fín y eso la hacia sentir mal.

"¿Algún día volverás a visitarnos?" Preguntó Stephen, él abrazaba a (t/n) tratando de reconfortarla. Él sabía que ella era frágil ante este tipo de situaciones, (t/n) era una persona la cual amaba con cada una de las células de su cuerpo y desde que todo inicio sabía que ella sería la más afectada ante su partida.

"¿Que les hace pensar que no voy a volver? Gracias a ustedes volví a ser quien era y siempre los voy a tener presente" indicó la castaña con un brillo especial en sus ojos y una leve sonrisa en sus labios.

"¿Entonces podríamos amarnos una vez más?" Propuso (t/n) y Wanda sonrió asintiendo la cabeza.

"No esperaba que no fuera de otra manera" tan pronto como salieron esas palabras de la boca de la castaña estos se acercaron a ella y la rodearon con sus brazos.

Ambos besaban su terso cuello, la castaña llevo su cabeza hacia atrás exponiendo este ante sus labios deseosos, cerró sus ojos perdiéndose en el momento. Ella se mantuvo así por algunos segundos pero luego llevó su cabeza hacia adelante y ambos pararon dicha acción. Confundidos se observaron pensando que algo andaba mal pero está tenía otros planes en mente.

Wanda se acercó a su viejo amigo y le robó un beso, de esos que te dejan sin aliento. En su oído le ordenó que se sentará al borde de la cama y este sin pensarlo obedeció dicho pedido. Con Stephen sentado en la cama ella se acercó a (t/n) y de igual forma beso sus labios, solo que este beso fue algo más sugestivo, sus lenguas danzaban con frenesí y hacían estremecer al hechicero.

Ambas mujeres se acercaron hasta esté y se arrodillaron quedando frente a su palpitante erección. (t/n) llevo sus manos hasta el pantalón de su amado y jalo de este hacia abajo con tal fuerza que también logró despojarlo de su ropa interior. Stephen hizo un leve movimiento con sus pies para liberarse de sus prendas, ahora libre de estas se sentó un poco más al borde de la cama y llevo sus brazos hacia atrás en busca de equilibrio.

Ahora que se encontraba en una cómoda posición ambas se acercaron hacia su miembro. Wanda que estaba más abajo de este comenzó a lamer sus testículos, (t/n) que se encontraba a un lado de la cadera de su amado tomó el erecto mástil entre sus calidas manos, lo acercó hasta sus tibios labios y lamio su glande como si fuera una paleta.

Las piernas de Stephen temblaban ante tal sensación, ambas comenzaron a llevar sus lenguas por toda su estructura. Strange detuvo a ambas de forma repentina, ellas se levantaron del suelo comprendiendo y pronto él se ubicó al centro de la cama. Llevo una mano hacia un lado de esta y dio tres golpes en el colchón invitandolas a subir.

Como era de costumbre (T/n) prefirió sentarse sobre el rostro de Stephen y Wanda en su miembro. Cara a cara las mujeres se besaron con afán, él hechicero comenzó a elevar sutilmente la cadera mientras que a su vez lamia los pliegues húmedos de (t/n). En sus rostros se podían apreciar solo facciones de satisfacción. ojos cerrados, bocas abiertas y en otros momentos simplemente mordiéndose los labios.

Wanda se acercó a los senos de ella, lamio uno de estos con tal vehemencia que de la boca de (t/n) solo salió un ahogado gemido. Aquéllo logró activar algo en Stephen ya que lo que le siguió fue su lengua recorriendo toda su intimidad. Por otro lado Wanda comenzó a cabalgar sobre el miembro del hechicero haciendo un circular movimiento con su cadera.

Sus cuerpos se movían en perfecta sintonía. En el momento en el que (t/n) besaba a Wanda sintió como una energía recorría todo su cuerpo erizando su piel. Strange sabia muy bien lo que ella sentía así que se aferró al trasero de la castaña, sus manos se hundieron en su piel separando sus nalgas y en esa posición comenzó a embestirla con firmeza, Wanda al sentir que se venía busco equilibrio rodeando la cintura de (t/n) con sus brazos.

Pronto Stephen se vino en la castaña y (t/n) en la boca de su amado, pronto los gemidos de los tres resonaban por toda la habitación tal como sus agitadas respiraciones. (T/n) se levantó de su rostro y observó como toda su miel se desbordada de su boca. Poco después Wanda se levantó de él y de su sexo brotaban los fluidos de aquél acalorado momento.

"Somos un buen equipo y no hay dudas de ello" indicó Strange con una orgullosa sonrisa.

"¡Tú lo haz dicho, cariño!" Le respondió (t/n) dando una palmadita en el hombro de este.

"Ohh vaya que los voy a extrañar..." dijo la castaña con una mirada triste.

"Y nosotros a tí" ambos le respondimos al unísono.

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