#4 Largo camino hacia la ruina - Loki Laufeyson💔

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LOKI X LECTORA
#DE PALABRAS: 1.248
ADVERTENCIAS: Lectora bandida. ¡Leanlo hasta el final!
ESCRITO POR: PomeloVillano
N/A: OS basado en la canción "Long Road to Ruin" de Foo Fighters, una de mis bandas favoritas #DaveGrohlAmorEterno.
Debo admitir que Loki me EN CAN TA, mas cuando se porta como toda una perra(? #PomeloAmaElCaos #LargaVidaALoki
#AzotameConElCetro

 Debo admitir que Loki me EN CAN TA, mas cuando se porta como toda una perra(? #PomeloAmaElCaos #LargaVidaALoki #AzotameConElCetro

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La vida del fugitivo no es sencilla. Una vez que comienzas, es difícil salir de ella. Pero por él valía la pena. Cada maldita vez.

Nuestros mundos chocaron una hermosa noche durante el Mardi Grass en Nueva Orleans. Calles repletas, gente ebria, desfiles y muchos colores. Perfecto.
En mi afán de vivir al límite, siempre me gustó meter mis manos en bolsillos ajenos. Literalmente.
Era una noche como cualquiera para mi, mucha gente en las calles significaban un gran botín. Tras una hora de escabullir mis manos en algunos bolsillos, algunos cuellos, muñecas y bolsos, llevaba un total de diez relojes, varias cadenas, brazaletes, pendientes, anillos y bastante efectivo. Suficiente como para sobrevivir algunos meses con algunos lujos innecesarios.

Mi regla básica siempre fue sacar la mayor cantidad de pertenecias y salir de el ojo público, por lo que me aventuré al bar de un hostal. Al entrar me dirigí a la barra y pedí un trago, solo para pasar desapercibida.
Tras un largo sorbo al vaso de vodka, sentí un par de ojos observándome. Quizá es hora de huir.
Terminé mi trago y me dirigí al baño, y cuando estaba llegando un par de fuertes brazos me arrinconaron contra la pared.

-¿A caso no te enseñaron que robar es malo?- El rostro del sujeto se veía calmado. Esto no era bueno.
-No sé de que diablos hablas.- Mi voz sonaba segura. Quizá funcione.
-Tus bolsillos llenos no dicen lo mismo, cariño.- Una sutil sonrisa se formó en su rostro.
-No comparto si eso es lo que buscas.-
-No me interesa lo que hayas conseguido...- Dijo de manera calmada. -pero si me gustaría saber más. Pareces una criatura interesante.- Dijo de manera sutil.
Quizá era la emoción del momento pero, cuando su mano tomó la mía, simplemente dejé que me guiara hasta su habitación en el piso superior del bar.
Tras cerrar la puerta, hizo un ademán para que tome asiento. Tomé asiento en la cama y él permaneció de pie.

-Me encontraba a unas calles cuando te vi. Estabas bailando o fingias hacerlo y vi que en un abrir y cerrar de ojos le quitaste a un sujeto su cartera.- Una tímida sonrisa se formó en mi rostro.
-Si, eso es a lo que me dedico. No es lo mas honesto, pero es una vida que vale la pena. Es eso o ser una aburrida oficinista en Manhattan. Patético.- Dije mientras vaciaba mis bolsillos en la cama.
-Manhattan es un lugar bello, pero no me arrepiento de haberlo casi destruido.- Tras su declaración, su forma cambió. No era un sujeto cualquiera, sino un hombre alto, de piel pálida, cabello oscuro y unos intensos ojos verdes. Loki. El maldito que casi destruye por completo Nueva York, estaba parado frente a mi.
-Eres un bastardo, ¿Cómo te atreves a venir a la tierra y destruir todo a tu paso?- Mi hipocresía era tan grande, pero no me importó.
-¿Y a ti que mas te da que hice o no hice? No me arrepiento y no me interesa, cariño.- Una amplia sonrisa se formó en su rostro. -Aún así, aquí me encuentro, hablando con la única criatura interesante de este asqueroso planeta.- Este se acercó a la cama, observándome.
De manera inmediata me puse de pie e iguale su mirada.
-¿Y que me hace una criatura interesante?- Cuestioné acercandome mas a él. Podía sentir su perfume. Este era por demás atrapador.
-Que no te importa el resto. Que tomas lo que quieres y sigues hacia adelante sin mirar atrás.- Sus manos rodearon lentamente mi cintura. En un momento nos encontrábamos mirándonos y al siguiente besándonos como si no hubiera un mañana. Tener sexo sobre una pila de joyería y dinero robado es mas sexy de lo que creí.

Esa noche sellé mi destino. Comencé mi camino al infierno ya que el cielo puede esperar. Siempre puede esperar.
Sin un hogar fijo, sin familia ni amigos y sin ataduras, nos teníamos el uno al otro. Y eso era todo lo que necesitábamos.

Vivir en todos lados y en ninguno a la vez no era nuevo para mi, pero a su lado era una aventura en cada nueva cuidad. Nosotros reinabamos esas calles por un corto tiempo y sentíamos que el mundo nos pertenecía.
Fueron los mejores años de mi vida. Sin un mañana y sin preocupación alguna.
Todo era perfecto... Hasta que llegamos a Nueva York.
Él creyó conveniente volver a esta asquerosa cuidad. Supuse que era por nostalgia.
~
Nos encontrábamos en un departamento en una lujosa torre en Manhattan, ambos leyendo. Los días así de tranquilos eran encantadores a su lado.
-Cariño, quizá suene extraño... Pero necesito que hagas algo por mi.- Eleve mi vista de aquellas paginas para observarlo.
-Lo que sea.- Dije con calma.
-No será fácil, pero eres la persona mas lista que conozco.- Este tomó un profundo respiro antes de continuar. -S.H.I.E.L.D está trasladando algunos objetos confiscados hacia una localización fuera del estado, de entre los cuales se encuentra algo que es mio y realmente quiero recuperar.- La calma en su voz me daba seguridad. -¿Crees que puedas lograrlo?-
-Sabes que si.- Una vez mas, selle mi destino.
~
El plan era sencillo: Entrar, tomar lo que le pertenece y salir. Fácil.
Mis habilidosas manos -y una plática estúpida- lograron conceguirnos una tarjeta de acceso, solo debíamos poner nuestro plan en marcha. Entrar, ir hacia la bóveda donde guardaban sus objetos mas valiosos -aquellos que nadie debería tocar y bla bla bla- tomar el cetro de Loki y salir. Pan comido.

Viernes por la mañana del 14 de febrero. Quería lograr mi cometido para darle a Loki el mejor regalo de San Valentin.
Los primeros pasos de mi plan fueron los mas fáciles. Entrar, ir hasta la bóveda. Loki sería mi respaldo en caso de que algo saliera mal.
Me encontraba ingresando de manera exitosa en la bóveda, cuando las alarmas se dispararon y la compuerta se cerró.
-Loki, ya saben que entré y estoy atrapada.- Dije por el dispositivo de comunicación, comenzando a entrar en pánico.
-Ya voy por ti, cariño. Por favor, manten la calma.- Su voz me hizo volver a estar en calma.
Tras una corta espera, la cual se sintió eterna, la compuerta se abrió. Pero no era Loki quien me esperaba del otro lado, sino unos veinte agentes armados. Diablos. Levanté mis manos en sumisión.
Fue demasiado arrogante de nuestra parte creer que esto funcionaría. Tuve suerte de pasar el primer acceso.

Luego de ser esposada, dos agentes me escoltaron a otra área del edificio. En uno de los muchos pasillos, me topé con otro grupo de agentes, de al menos una docena. Ellos escoltaban a Loki. Sin dudarlo, me acerqué a él.
Nos observamos por un momento.

-Realmente lo siento cariño, supongo que no todo estaba bien calculado después de todo.- Acerqué mi rostro al suyo y bese sus labios con cariño.
-No es tu culpa, sino mía. Debí haber dejado ir el cetro y haberte protegido.- Apoyó su frente contra la mía, fijando sus ojos en los mios.
-Te amo, Loki. Con toda mi alma.- Mi voz salio casi como un susurro.
-Y yo te amo a ti, T/N. Eres la criatura mas increíble de este asqueroso planeta.- Dejé escapar una leve risa.

Los agentes comenzaron a separarnos y mis ojos se llenaron de lágrimas cuando voltee a verlo una vez mas.
-Recuerda amor mío, siempre tendremos Nueva Orleans.- Dijo sonriendo, mientras los agentes lo alejaban de mi.

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☆ ONE SHOTS MARVEL ▪ VOL. 1 ☆Donde viven las historias. Descúbrelo ahora