Kirum, leyendas, héroes y criaturas del continente.

La muerte de Dios

Un hombre barbudo estaba sentado en un trono. Este estaba mirando por la ventana cuando de repente una mujer que tenía el cabello rojo y unos ojos negros entró en la sala. Lo que más destacaba de ella eran unos cuernos en su cabeza, iba vestida con un vestido negro y de su espalda salían unas alas. Holi querido padre- dijo esta mujer sonriendo- ¡Lucifer! ¿¡Que haces aquí demonio!?- dijo el hombre barbudo- Bueno verás es que entre una y otra cosa hoy me aburría y quería matarte- dijo sin perder la sonrisa- Maldita, por algo te lancé del cielo intentando matarte maldita- este dijo furioso levantándose y agarrando una espada- Bueno querido papi solo quiero que sea rápido-. En un segundo esta chica apareció en la otra punta de la sala y el hombre caía al suelo con las rodillas cortadas. Al momento esta se acercó a él mirándolo mientras este gritaba de dolor. -Bueno querido dios ha llegado el momento de despedirse-.Lucifer agarró la cabeza, con sus uñas negras y largas le cortó la yugular dejando caer al suelo a Dios mientras este intentaba taparse la herida. La chica se sentó en el trono de Dios y esperó a que apareciera Jesús. 

Un rato más tarde un joven de pelo largo y barba, al ver a Dios en el suelo se asustó. Rápidamente de nuevo la demonio agarró el cuello de Jesús.- Hola hermanito, ¿te gusta lo que le he hecho a papi?- Después de decir esto mientras el muchacho se estaba ahogando esta le dio una lamida en la mejilla seguidamente tirándolo al suelo. Después de que recuperara el aliento esta de un solo golpe con sus propias manos separó la cabeza del cuerpo de Jesús y un fuerte brote de sangre terminó por manchar la también. Al ver su mano cubierta de sangre esta la lamió bebiendo la sangre para más tarde salir dejando esos cadáveres en la sala.

Unas horas después un chico rubio que portaba unas alas entró en la habitación y al ver a los dos asesinados llamó a los guardias que rápidamente buscaron a Lucifer. A la vez él intentaba reanimar a Dios pues a este no le habían separado la cabeza del cuerpo, pero fue inútil. Se sabe que después de eso el arcángel Miguel estuvo rezando por una semana. Finalmente y a día de hoy en Kirum los ángeles luchan contra los demonios por culpa de este hecho aunque los demonios más poderosos nunca se han llegado a ver en la lucha. El arcángel Miguel quién terminó como general de los ángeles le ha jurado a Lucifer que la purificará y la enviará de vuelta al inframundo de dónde nunca tuvo que salir.