RECUERDAME 《TERMINADA》

Capítulo 30

Cada vez faltaba poco para la boda, y cada vez me sentía peor, no porque me voy bajo a casar, si no por el simple hecho de que no me sentía muy bien del estomago ; me daban dolores muy fuerte de cabeza, mareos y vómitos constante. Steve se ha preocupado mucho por mi.
Esta semana ya pase por el vestido pero deje que Pepper se lo llevará, pues es " de mala suerte que el novio mire el vestido antes de la boda"
Las chicas me insistieron de que fuera a ver a un médico así que, heme aquí dentro del consultorio, con un viejo canoso atendiendome.

- Y eso es todo lo que me ha pasado toda esta semana.

- Creo que es necesario que le hagamos una ecografia - fruncí el ceño - es por descartes

- ¿Cuando seria la ecografia? - pregunté

- Ahora mismo, para darle los resultados mañana, o como nuestra tecnología es avanzada, hoy mismo se los podemos dar.

- Mejor si es hoy

- Entonces vamos - el doctor me llevo al consultorio, donde me hicieron los exámenes de sangre y otros que no recuerdo por los nervios. Estaba muy asustada, no quería creer que era lo que yo creía. - Bueno señorita Romanoff, puede pasar a las 4:30 por sus exámenes - dijo mirando el reloj de madera en la pared.

- Buenos muchas gracias - me iba a levantar pero me llego un mensaje de Steve "¿donde estás? estaba pensando en salir a caminar" - y si mejor vengo por los resultados mañana - el doctor me miró enarcando una ceja, pero al ver que mis ojos le rogaban, accedió. -Muchas gracias, vendré lo más temprano posible - Salí de ese lugar lo más rápido que pude, odiaba estar allí, me traía muchos recuerdos.
Habían chicas y mujeres maduras allí.

- Hola amor - Steve se acercó a mi y me beso, él no sabia que había ido a ese lugar y que me sentía enferma. No quería preocuparl, tal vez fue tanto humo que inhale cuando Sharon incendio ese lugar - ¿como te fue con los preparativos?

- ¿Que preparativos? - Steve frunció el ceño.

- Me dijiste que habías salido por eso no? - mire como sus ojos me interrogaban.

- Ah si, perdón - me empecé a reír, eran los nervios - es que tantas cosas que tengo en mi cabeza, que estoy aturdida por los preparativos, pero si, o sea... - no sabia que decir así que me reí otra vez.

- Bueno, te entiendo, también me desespere por no encontrar el traje perfecto, para este día perfecto - me sonrió y rodeo mi cintura con sus manos - pero adivina quien lo encontró?

- ¿Quien será? - fingí que no sabia, pero estallamos de la risa - tonto.

POV STEVE

Natasha ha estado actuando muy rato últimamente. Esta mañana me dijo que saldría con Wanda pero cuando salí con los chicos, ella estaba comiendo con Visión. No quería pensar que Nat me mentía, ni nada, pero eso era un pensamiento que no salía de mi cabeza.

Estuvimos caminando toda la tarde, poco a poco hemos llevado cosas a nuestra casa, y ayer compramos los muebles y cosas para la cocina, así que oficialmente nos mudariamos la próxima semana.

- ¿Quieres algo de comer? - Nat me miró sorprendida - tengo mis dotes de chef - dije con una voz de superioridad.

- No tengo hambre y no quiero morir intoxicada.

- Iba a preparar algo italiano y no se, algo típico de Rusia - Nat se paró rápido del sillón y me llevo corriendo a la cocina - ¿que haces?

- Mi estomago no puede esperar y tengo mucha hambre. - yo solo me reía.- vamos a cocinar mi plato favorito de pequeña, se llama Pierogi.

- Tu cocina y yo colocó una película.

- No sí, lo mas fácil lo harás tu -dijo algo indignada.

- Tu que sabes - la desafíe - elegir una película no es algo fácil, hay muchos géneros pero casi el 50% de las películas de Netflix son malas.

- Deja de hablar tanto Roger, nada te gusta últimamente - dijo mientras sacaba los ingredientes de la alacena, se acercó a mi y me embarro harina en toda la cara, que lo que al final terminamos haciendo un desastre en la cocina.

- Esto esta delicioso, gracias a mi - dije mientras llevaba una cucharada de pasta a mi boca.

- Tu no hiciste nada, pero debo decir que los besos me motivaron -dijo algo pícara. Miramos películas y jugamos algunas cosas. Al final de tanto que nos besamos, estábamos acostados en la cama de la habitación de arriba.

- Qué cambio - dije mientras acariciaba su espalda desnuda - eres tan perfecta.

- Sólo en el sexo Rogers? -yo solo me reía, pero no di respuesta, ella es perfecta en todo - Te amo.

- Te amo más.