El Encuentro

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CAPITULO 1

-Jane- Jeremy grito mi nombre.

Jeremy era mi mejor amigo desde que vine aquí, bueno, desde que morí. A diferencia de mi el es un Arcángel, el preferido del Maestro.

Estar aquí no es tan malo, la gente se aterroriza pensando que cuando se va a morir todo acabará, pero no, tienes que ser lo suficientemente bueno, humilde y noble en tu vida para llegar aquí, es una especie de paraíso, solo naturaleza y mucha pureza.

-¿Dime?-

-¿Estas lista?-

-¿Como?- Casi le grite -¿Tengo que irme ya?-

-Lamentablemente si, tienes que irte ya si quieres regresar pronto-

El maestro ponía tareas a todos los ángeles, Jeremy lo único que hacia era anunciarlo, la tarea era simple, ayudar a algún humano indefenso sin ningún tipo de compromisos, cuando viéramos que la persona es feliz, nosotros nos regresamos y ahora era mi turno, es la primera vez que me tocaba ayudar a alguien, se puede decir que soy nueva, apenas llevo unos meses. Es un gran reto.

-No estés nerviosa, te acompañare y te diré que hacer, a partir de mañana te tocara a ti sola-

-Esta bien, llévame-

En un abrir y cerrar se ojos ya estaba en la tierra, note que era de noche, estaba igual a cuando me fui, pero sigue siendo tan hermosa como antes.

-Mirate, igual de hermosa como hace un momento- Dijo sonriendo.

Observe mi rostro en la ventana de un auto, estaba igual, solo que no tan pálida.

-Bien, no tengo mucho tiempo, ten- Dijo dándome unas llaves- Te quedaras en un apartamento mientras tanto, es el que tienes al lado-

Voltee mi cara y ví un gran edificio, tenia mas o menos unos veinte pisos,  era privado, tenía piscina y sin duda era hermoso.

-¿Hablas enserio?-

-Quiero que tengas la "vida" que te mereces mientras estas aquí-

-Esto es genial-

-Tu apartamento es el 205, esta en el sexto piso, cuando estes adentro veras que todo lo que necesitas esta allí, hay mucha ropa y dinero- Dijo hablando rápido- Mañana será el funeral de los padres de Charlie, tienes que ir, tómate tu tiempo para hablarle, pero no mucho-

-Tengo que ir ¿enserio? Odio los funerales, me recuerdan a mis...

-Te dije que no pensaras en ello, sera mas difícil- Dijo hablando suave y acariciando mi rostro.

-Esta bien- Dije mirando hacia abajo- ¿Donde sera?-

-Ten- me dio un papel y una fotografía la cual supongo que era de Charlie -Allí esta la dirección, el funeral sera a la una de la tarde, Charlie es un chico tranquilo, tímido y a veces antisocial, no te digo que sera fácil pero, no es cosa del otro mundo- Dijo riendo.

-¿Eso es todo?-

-Solo una advertencia, no te encariñes con el, trata de ser su amiga pero no te pases de la raya, no trates de hacer ninguna tontería-

-¿De que hablas con pasarme de la raya?-

-No lo trates demasiado, ayudalo nada mas, si tienes que usas fuerza, hazlo, no trates de mimarlo a cada rato y lo más importante, por ningún motivo le des falsas esperanzas-

-Como cuales-

-Solo no te enamores de el y ya, recuerda que eres humana y que no estarás para el toda su vida-

-Por eso no te preocupes ¿Cuanto tiempo tengo?-

-Seis meses máximo, anímalo a salir, consíguele una novia, pero hazlo bien, que no note tu ausencia cuando te hayas ido-

-Entiendo-

-Ahora ve a descansar, mañana tienes que ir a un funeral- Dijo dándome un fuerte abrazo- Tengo que irme, te deseo mucha suerte-

-¿Quiere decir que no te veré dentro de seis meses?- Dije con voz melancólica.

-Como crees, te estaré visitando, solo que no podrás verme, tal vez me veas en tus sueños-

-Esta bien, gracias Jeremy, te quiero-

-Y yo a ti pequeña-

Cuando Jeremy se esfumó, guarde el papel y la fotografía en el bolsillo de mi pantalón, fui hasta el edificio, entre al ascensor y apreté el botón seis, cuando este se detuvo, empecé a buscar mi apartamento, era el último a la izquierda, cuando abrí la puerta me quede con la boca abierta, los muebles eran preciosos, tenia muchos cuadros, el baño era color azul claro, la cocina era pequeña pero muy bonita. Pase a la habitación principal, era una locura, cama y armario grande, un televisor pantalla plana y lo mejor de todo, el balcón, salí y vi la hermosa vista que tenia ante mis ojos, no me acordaba lo mucho que extrañaba quedarme hasta tarde viendo el cielo estrellado.

Salí de allí y abrí el closet, estaba totalmente lleno de ropa, zapatos y accesorios.

-¿Pensaste en todo verdad?- Dije mirando hacia arriba.

Después de eso me acosté en la gran cama, saque la fotografía de mi bolsillo y la detalle unos segundos, el chico tiene unos hermosos ojos grises oscuros, nariz respingada, unas dos o tres perforaciones en su oreja, parecía tener un pequeño tatuaje al final de su cuello, y tenía una sonrisa de lado, deje la fotografía en la mesita de noche, me puse una pijama y me metí bajo las sábanas, hacía un frío terrible.

Por cierto, ¿en que parte del mundo estoy?

****

Abrí los ojos lentamente y mire el reloj que había en la mesita de al lado, eran las diez y veinte, Cielos, dormí demasiado.

Me levante de la cama y fui directo al darme una ducha, tenía que apurarme, el funeral es en menos de tres horas.

Cuando termine de bañarme me enrolle una toalla y fui a la habitación, elegí un atuendo simple, todo negro, apto para un funeral, hice mi desayuno y encendí la televisión mientras esperaba.

A las doce y treinta, tome un taxi y le di la dirección de la funeraria al taxista, el recorrido duro veinticinco minutos mas o menos, le pague y me baje del auto.

Fui hasta donde habían varias personas, supuse que era este, camine en medio de ellas y me acerque mas a donde seria el entierro, al frente mio vi a un chico, se parecía al Charlie que Jeremy me describió, por sus mejillas rodaban lágrimas, parecía tranquilo y miraba un punto fijo hacia el suelo. Nos separaban unos cuantos metros.

Levantó su cara y puso sus ojos en mi, me sostuvo la mirada por unos segundos y luego volvió a mirar el suelo. Tenía unos hermosos ojos grises, cabello negro y nariz respingada, es un chico muy lindo en verdad, definitivamente era Charlie.

She's my AngelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora