mi alfa; woochan

-persecución

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El rubio había salido tarde de la universidad, por lo cual tomo el tren, al contrario de las demás veces que se iba con sus amigos. Para cuando llego a su destino ya había caído la noche y se encontraba solo en una estación semi obscura que le inspiraba temor

Mientras caminaba rápidamente buscando las escaleras para lograr salir del subterráneo miraba a todos lados por la perse de que hubiera alguien tras de el. Quería salir de ese lugar lo mas pronto posible.

De la nada comenzó a escuchar un ruido que lo dejo helado.

Primero lejos y débil.

Luego mas cerca y fuerte.

Se estremeció ante eso, era como si unas garras rasgaran el metal y parecían venir del obscuro hueco por donde pasaba el tren.

No sabia como pero su sentido de la audición se había incrementado, dándole el poder de escuchar algo leve pero no lo identificaba. Estaba asustado y su corazón parecía querer salirse de su pecho. Le ardían los oídos y sentía como un liquido rojizo salia de ellos puesto que al incrementarse su audición, los rasguños al metal se hacían mas ensordecedores.

Poso ambas manos en sus oídos tratando de amortiguar inútilmente el molesto ruido, soltó quejidos y deseo gritar pero simplemente la voz lo le salia, no se movió de donde estaba hasta que segundos después todo paro. Solo escuchaba ese algo que lo había identificado hace unos segundos atrás.

Una respiración agitada, acompañada de unos gruñidos.

No sabia como pero tenia que comenzar a correr, ya que no tenia ni la menor idea de como defenderse y tampoco es que lo quisiera hacer sin saber a que se enfrentaba. Sentía que alguien lo miraba de forma fría y amenazadora. Pero ya había sentido ese tipo de miradas varias veces y siempre terminaba siendo parte de su imaginación, así que decidió ignorarlo.

Se acomodo su mochila y volteo para seguir su camino de buscar las escaleras.

《《Mala idea. Mala idea. Mala idea》》pensó el rubio al ver una sombra rara y deforme.

Sin mas comenzó a correr sin saber a donde se dirigía solo quería ir en dirección contraria a la sombra. Escucho unos pasos tras el, pero no volteo a ver. Lo que escuchaba no era normal, temía voltear y encontrarse con mas de una persona o un gran animal como un oso o algo parecido. Aunque eso era casi imposible.

Encontró las escaleras luego de haber pasado varios pasillos subió por ellas agradecido y sin pensarlo dos veces. Al llegar a la superficie se sintió mas seguro pero de igual forma maldijo.

¿Donde se encontraba toda la gente? No había ni una tienda abierta, ni las personas solo caminando por la calle, solo un par de autos y parecía no haber nadie dentro de ellos.

Dejó de correr cuando llego a una calle desconocida y ya no escuchaba mas que lo estuvieran siguiendo.

Miro hacia atrás y efectivamente nadie lo había seguido, comenzó a creer que otra vez su mente le había hecho una mala jugada. Camino aun con sus piernas temblando de miedo y su respiración agitada. Saco el teléfono de su mochila se había decidido a llamar a unos de sus amigos para que fueran a buscarlo.