Acosador. [JungKook+TaeHyung]

4.

Juntos conocimos cosas que nos apasionaban, motivaban y nos hacía sentir vivos. Juntos logramos afrontar lo bueno y lo malo que nos tenía preparado el mundo. Pero el destino no nos tenía preparado el estar juntos por mucho más tiempo.

Después de que JiMin y yo empezáramos a salir los chicos comenzaron a ser distantes conmigo, solo el grupo de Mark seguía siendo el mismo de siempre. Desde que ingresé a esta escuela no había escuchado ni un sólo rumor que me afectara de manera negativa, tenía confesiones que rechazar casi siempre y era el favorito de todos. Pero Matt comenzó alejarme y los chicos esparcieron rumores, la mayoría falsos, todos sobre mí.

Ahora tenía apodos como “El juguete de Park JiMin”.

— No los escuches, bebé.

Asentí desanimado. Lo que más me aterraba comenzaba asecharme, y es que no dudo que me ataque cuando menos me lo espere.

Mark también me daba palabras de apoyo y hasta me dijo que haría pagar al grupo de Matt. Pero eso ya no importaba. Ya el daño estaba hecho. Quizás sea karma por haber mentido sobre lo sucedido con aquel chico que tan pronto lo agredieron lo sacaron de la escuela.

Ya nada era igual. Las chicas me miraban con asco y los chicos ya no me hablaban.

Lo bueno de todo esto es que JiMin y yo nos volvimos más unidos, y no hablo de los besos o caricias, sino del apoyo. Hasta planeamos una vida juntos, en un departamento cumpliendo nuestros sueños.

Una noche me dijo que quería ser policía y por supuesto yo le dije igualmente quería serlo. Esa noche no dormimos hablando de nuestro futuro. En lo personal me aterra, estoy en una relación y siento miedo de pensar tanto en ello. Puede que no esté listo aún, tengo muchas inseguridades pero está bien. Él entendió y no se mostró distante o resentido en ningún momento.

— Ya te dije que si te vuelven a molestar podemos darle una paliza a esos hijos de puta. -Mark insistía como de costumbre.

— El problema es que me molestan todo el tiempo, y no solo ellos.

— Ya dejalo, Mark. -Pide JiMin quien sujetaba mi mano, caminábamos los pasillos ganandonos la atención de la gente.

— ¿Por qué no te vengas, JungKook? Sabes el secreto de Matt.

Ese secreto que tanto quería Mark que revelara era sobre la relación con el chico raro. Después de que JiMin buscara información se consiguió con una chica que siempre estaba sola y resulta que ella vio a los dos tórtolos comiéndose la boca. Yo le dije que no iba hacer lo mismo que el idiota de Matt, pero al final le contó a Mark.

— Te dije que no. Está mal.

— Oh, vamos. Él hasta dijo que se la chupaste a uno de los maestros.

— Vale, gracias por recordármelo.

— Ya me cansé de que te aguantes toda esta porquería, JungKook.

— ¿Qué?

— Les diré yo, así tú no tienes nada que ver.

— Es lo mismo, no quiero vivir con el pensamiento de que hundí a un idiota. Ya tengo suficiente con el tema de que rompí una relación e hice que se llevaran al pobre chico raro.

Llegamos a la entrada del colegio y nos despedimos. JiMin no había soltado mi mano en ningún momento y eso me pareció tierno.

— Deberías contarles, Kook.

— ¿De qué hablas?

— Sabes de qué hablo. -Lo sabía, pero no quería tener esta conversación de nuevo.

— JiMin, yo... -Es mi mejor amigo, debe saber la verdad - Sufrí de bullying en mi antigua escuela, hacer lo mismo que ellos no es la solución. ¿Y sabes qué? Creo que esto es lo mejor, estaba apunto de convertirme en un idiota por solo un poco de atención.

— Eso me parece lindo, tú pedías una amistad, JungKook. No eres malo por querer ser amado.

Eso hizo sentirme aliviado, quería escucharlo. No quería sentir culpa más nunca. Le sonreí y me acerqué a darle un beso.

— Gracias.

JiMin era un gran amigo.

— De nada, bebé.

Y ahora un buen novio...

📷📷📷

Amor, es algo necesario en la vida de todos. Cada que tenemos un mal día necesitamos amor para sentirnos mejor y no hundirnos. Amor propio. Cuando te amas dejas que todo lo que eres sea libre y que tus colores brillen llamando la atención de alguien. Y ese alguien quedará encantado, como si esos colores fueran los que le faltaran en su vida y por consecuencia se rehúsa abandonarlos y decide quedarse hasta ganarlos. Hay personas que no tienen amor para saber cómo tienen que empezar, y lo único que conocen es el odio. Creen que amando a alguien serán felices, pero ese alguien debe ser ellos. Primero ellos para llegar amar con todo a alguien más. Descubre tus colores para que ellos sepan lo que es estar vivo y te den un poco de vida a ti también.

Estaba tan cansado, no dormí nada por jugar videojuegos hasta que el sol me golpeara y mis ojos pagaran al ser quemados.

Estaba devuelta en la escuela tratando de mantenerme de pie y no quedarme dormido en las escaleras de la entrada. Claro que por ser tan despistado no me había dado de cuenta de cómo me miraban los demás hasta sentir como me empujaban y mi trasero golpeara contra el semento.

— ¡Ten cuidado, imbécil! -Me di cuenta que el imbécil era yo al encontrarme con los ojos llorosos de Matt. Asumía que todos nos miraban.

— ¿¡Por qué lo hiciste!?

— ¿De qué diablos hablas? -Tengo sueño.

— ¡Sé que fuiste tú! Lo hiciste por lo que dije, ¿Cierto? ¿¡Ya estás contento!?

En realidad no. Mi trasero dolía y creía que si me volvía a levantar él me empujaría de nuevo.

— No sé de qué hablas, pero deberías dejar esta escena Matt.

— ¡Te lo llevas a él y ahora esto! Me las pagarás. -Reaccioné cuando saltó a mí, así que traté de retenerlo tomándolo de las muñecas.

Ya entendí lo que estaba sucediendo. Maldita seas Mark, ¿Por qué nunca me escuchas?

— ¡Te mataré! -Gritaba Matt.

— ¡Yo soy inocente! -Ni tanto, pero no quería un golpe aunque lo tenía bien merecido.

— ¡Basta! -Interviene JiMin.

Gracias, eres el mejor de todos, ah.

Apenas JiMin fue por Matt uno de sus amigos se interpuso y empezaron a pelear, Mark que venía corriendo detrás de JiMin se unió a la pelea y yo golpeé a Matt cuando se distrajo. Lo dejé en el suelo y me acerqué a golpearlo de nuevo pero uno de sus amigos me sujetó de los hombros y él casi me saca los dientes del golpe que me dio.

Estabamos tan concentrados en la pelea que olvidamos que estabamos en la entrada de un colegio y maestros venían.

Cuando me di cuenta de ese pequeño detalle ya estábamos plantados en detención.

— ¡Te dije que no se lo contaras a nadie! -Mark estaba a mi izquierda y JiMin a mi derecha. Todos estábamos lastimados y adoloridos.

— No fui yo, uno de mis chicos contó todo y para cuando me enteré que fue él ya lo sabían hasta los maestros sobre su extraña relación.

Pasé mi vista por donde Matt y su grupo estaban. Este me sacó el dedo medio sin bacilar.

— Joven, más respeto hacía sus compañeros. -Le reprocha el profesor.

— Me la pela -Vaya.

— ¡Tres días más para usted y su grupito! No acepto que me falten el respeto.

Él se encogió de hombros y siguió hablando con sus amigos. Agradezco haber dejado ese grupo antes de ser uno de ellos por completo.

¿Qué será de aquel chico? ¿También me odiará?