14.

129 23 3
                                    


Puede ser que mi corazón late con fuerza cuando te acercas.

Puede ser que mis ojos se maravillan cuando te ven pasar.

Puede ser que tal vez me empiezas a gustar.

Llegue puntual, más bien, como una hora antes. Estaba demasiado emocionado y con los nervios de punta.

Una sensación que jamás había experimentado. Deseaba tanto ver tus ojos de cerca de nuevo, que nuestras manos se volvieran a dar roces accidentales.

Mi cabeza no dejaba de contar cosas por las que debería alejarme.

La primera es que tienes novio.

Hay un sabor amargo en mi boca cuando pienso en eso. Mis estómago se revuelve.
Le pregunté a mamá que significa, ella dijo que son celos.

Siento celos.

¿Por qué él puede compartir los días contigo?

¿Por qué no me acerqué antes?

Me aterra esto que siento.

Y más me aterro el verte llegar.
Tu hermoso cabello suelto volando por la brisa, caminando segura sin mirar atrás. Con tus hermosos ojos viéndome fijamente entre aliviada y feliz.

"Pensé que había sido un sueño." Fue lo que dijiste al llegar "creí que el ángel que había conocido ayer era demasiado bueno para ser real".

Trate de esconder mi emoción, me habías llamado ángel —aunque estaba muy lejos de serlo—.

Solo sonreí y pregunte cómo estabas.

Así paso la tarde, entre coqueteos  de mi parte y sonrrojos de la suya.

Y fue la mejor tarde de todas.

Azul [Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora