Capítulo XIII

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Sin embargo, por más que cerrara los ojos no podía seguir engañándome, estaba allí y debía afrontarlo como lo que era, unas simples vacaciones en un castillo. 

-Amor, ¿puedes pasarme el refresco? –susurré al oído de Liam para que nadie se molestara por el ruido.

-Claro aquí tienes –dijo dándomelo en la mano y robándome un beso divertido en los labios.

-¿Y eso? –susurré colorada.

-Sólo se me antojó –contestó pillo haciéndome reír un poquito y provocando que los de enfrente nos miraran ceñudos, estúpido Harry, como si de verdad mi risa lo desconcentrara de una película que ni le importaba.

Entonces decidí fastidiarle más el momento, debido a que no apartaba la vista de nosotros me giré hacia Liam y lo besé con lentitud, saboreando cada uno de sus movimientos y con toda la intención de incomodar a Harry para que apartara la vista de nuestra amorosa escena; pero Liam no lo tomó de manera tranquila, siendo que inmediatamente tomó mi cabello entre sus manos y comenzó a devorar mis labios con ganas, estaba oscuro y pensaba que no nos verían ¿Pero acaso no había notado la mirada inquisidora de Harry? Para cuando logré apaciguar sus fervientes deseos y sonreírle tímida lo notó y volteó a ver hacia enfrente, haciéndonos notar la mirada curiosa de Anastasia, Harry y Niall, mierda, este último también nos había visto.

De inmediato sonreí estúpida, como si eso disculpara nuestra desconsideración y ellos se giraron de inmediato a la pantalla. 

-Lo siento –dijo Liam sonrojado.

-No te preocupes, yo también pensé que no nos verían –contesté tratando de fingir que así era y el soltó otra risita apenada.

Así continuamos viendo la película y justo cuando pensé que matarían a Bilbo y tomé la mano de Liam con fuerza para aliviar mi temor detecté una cabecita moviéndose en las primeras filas de los asientos, una cabecita rubia que jugueteaba con una castaña la cual estaba a punto de besar. Avergonzada por la indiscreción giré mi vista de nuevo a la pantalla, tratando de sofocar las risitas de esas dos personas, tratando de no mirarlos y concentrarme de nuevo en la película.

Pero por más que intenté me fue imposible hacerlo, por lo que me encontré echando una mirada fugaz a la escena cada diez segundos. Sintiéndome mal por ver como Niall la tomaba de la mano, jugaba con sus dedos y vulgarmente le besaba el cuello. Sin embargo, esta vez no pude pensar que de nuevo era por mí, no después de haberle roto el corazón en el avión, después de humillarlo y engañarme diciéndole que no me importaba en lo absoluto. Además, pensar que todo ello se debía a mí era un acto inaceptablemente egoísta y narcisista, por lo que contuve un suspiro de resignación y en vista de que me era imposible no verlos decidí que lo más sano era salirme de allí.

-Ahora regreso mi amor, voy al baño –susurré comenzando a levantarme, pero Liam me tomó de la muñeca y me miró extrañado.

-Pero ya falta poco para el final –susurró confundido.

-No tardo –contesté sonriendo, sabiendo que no regresaría hasta que las luces se hubiesen encendido.

Salí prácticamente corriendo de la sala, atravesé el largo pasillo que nos llevó hasta ella y me metí en el primer baño que encontré en tan grande castillo. 

-Eres una cobarde –me dije al espejo. 

<<Simplemente acéptalo>> me contestó mi reflejo, haciéndome parpadear con incredulidad. 

Nunca debí venir a este lugar, si no termino enamorada de él al menos de una cosa si estoy segura, quedaré loca en el intento por no hacerlo. Pensé con ironía y humor negro.

What do you really want? (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora