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Fue un dia sin duda muy duro para kirishima, había entrenado muy duro con Fatgum y Tamaki-senpai, también salieron un poco a patrullar por ahí ya que tenian la supervision de Fatgum y su licencia provisional

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Fue un dia sin duda muy duro para kirishima, había entrenado muy duro con Fatgum y Tamaki-senpai, también salieron un poco a patrullar por ahí ya que tenian la supervision de Fatgum y su licencia provisional.

Sin embargo al día siguiente no podía faltar a clases, por eso trato de regresar lo más pronto posible a la academia, ya tenía informado de todo esto a Aizawa-sensei, no habría problema alguno con tal de que no descuidara sus estudios.

Eran casi las 9:00 pm, todas las luces del edificio de los dormitorios estaban apagadas a excepción de algunas habitaciones. Las luces de afuera seguían encendidas y al entrar kirishima se dio cuenta de que las de la cocina también, eso significaba que había alguien ahí o que se habian olvidado apagarlas, de todas formas él iba a ir allí por algo para comer, ya que desde el almuerzo no había comido absolutamente nada.

Cuando estaba a punto de entrar escuchó a dos personas pelear, hablaban bajo tal vez debido a que era tarde, pero aún así, se entendia perfectamente que estaban discutiendo.

A kirishima le picó la curiosidad y se asomó un poco para ver de quienes se trataba, percatandose al mismo tiempo de no ser visto. Se llevo una sorpresa cuando vio que eran kaminari y jiro.

Pocas veces había visto a su amigo así de serio, no duró ni un minuto espiando a aquel par porque se fue rápidamente al darse cuenta que estaba muy mal husmear en las conversaciones de las personas, además era su amigo, podían hablar después al respecto.

El pelirrojo siguió el camino hacia su habitación, su estómago soltó un rugido, pero no había nada que pudiera hacer, no quería interrumpir la discusión que habia allí. Estaba muy cansado, así que probablemente se dormiría rápidamente sin pensar en el hambre que lo acechaba.

Ya subiendo las escaleras, pensó en que ese día habia sido estupendo... No había recordado lo sucedido con bakugo - hasta ese momento claro- habia entrenado y aprendido mucho.

Seguía pensando en más cosas buenas que le habian sucedido en el día, hasta que al ir ya en el pasillo de su habitación, alcanzó a ver a bakugo sentado en el piso al lado de la puerta de su habitación.

A pesar de estar un poco oscuro supo que era el por su cabello, el hambre que sentía su estómago fue reemplazada por nervios o angustia la verdad no sabía que sentir, ¿por qué estaba sentado ahí? ¿Lo estaba esperando? No, eso no es posible, no viniendo de bakugo.

Se tranquilizo y se dio cuenta que bakugo al parecer estaba dormido, ya que si no fuera así, por lo menos lo hubiera volteado a mirar, o eso creía.

Analizó la situación y pensó en las posibles soluciones o más bien escapatorias:

~ La primera era caminar muy despacio y silencioso para no despertarlo y entrar a su habitación - aunque debía admitir que por más molesto que estuviese le estrujaba el corazón dejarlo ahí en el piso- Además era obvio que se despertaria al escuchar la puerta, ya que estaba cerca, y si era verdad que lo estaba esperando, golpearia su puerta o lo detendria de alguna manera

Detrás Mío ♡ {Kirishima x Bakugo} [En edición] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora