~al día siguiente desperté con una fuerte jaqueca, mi cabeza me dolía a mil, no aguantaba el dolor era insoportable, cuando me mire al espejo yo misma me asusté, parecía la monja (esa peli de terror que ha salido en México) tenía unas ojeras tremendas, mi cabello parecía versión el rey león, no podía creer que me viera fatal, arregle un poco mi cabello pero era inútil por lo cual solo me puse un gorro y para esconder mis ojeras me coloque unos lentes de sol negros para que así nadie viese mis ojeras
Salí de mi habitación y casi pego un grito de miedo, el idiota estaba recargado contra la pared con las manos adentro de vuestras bolsas de sus pantalones y mirándome como un borreguito mal nacido~
-¿Pasa algo?- pregunte mirándolo pero el sólo negó con la cabeza y entró al cuarto por mis maletas
~camine hacia el garaje para asi encontrarme con un carro negro super mono esperándonos, ese es nuevo, dije para mis adentros mirandolo, el coloco las maletas en el auto y se dispuso a abrirme la puerta y después de entrar cerrarla para finalizar rodeando el carro y comenzar a conducir~
-Tu no usas lentes- dijo mientras conducía sin dejar de mirar al frente -¿por que te haz puesto unos?, ¿Estuviste llorando?- me pregunto algo curioso mientras me miraba de reojo y regresaba la vista al frente
-calla, me duele la cabeza- dije mientras me apretaba la cabeza con las manos por qué no soportaba el dolor
-lizz por lo general tu eres feliz y alegre dime ¿qué ha pasado?- dijo mientras me tomaba el brazo pero al instante lo quité de el
~siendo sincera desde esta mañana comencé a ignorarlo, no podía ni si quiera mirarlo, tenía que olvidarme de el y tenía que empezar alejándome, me sentía triste al hacerlo, por alguna extraña razón estar con el me hacía feliz, rechazar sus caricias y lindas palabras me destrozaban el corazón
Me gire mirando la ventana, pude sentir como una lágrima caía por mi mejilla, ¿Que me está pasando? ¿Por qué esto que estoy haciendo me duele tanto? ¿En verdad lo amo?.
Ante estos pensamientos no pude seguir así, me tape el rostro y comencé a llorar fuertemente, pude sentir como el se tenso, ignore todo a mi alrededor hasta que pude distinguir como el estacionaba el coche en medio de la carretera y se bajaba sin decirme a donde se dirigía, yo seguía cubriéndome el rostro, me sentía destrozada de alguna manera.
Al instante escuché como el abría la puerta de mi lugar, quite las manos de mi rostro y pude observar a un Logan muy preocupado mirándome, sus ojos demostraban tristeza~
-no llores nena, me lastima verte triste- dijo y por alguna extraña razón al ver sus ojos pude ver como estos demostraban dolor, el en verdad de alguna forma se sentía triste
-sigue manejando, no me pasa nada, estoy bien- le mentí para que el se alejara de mi, no podía tenerlo cerca y mucho menos en estos momentos
-no, no lo pienso hacer hasta que me digas que te pasa- dijo mirándome aunque yo me ocultaba colocando mis manos sobre mi rostro
-alejate- le dije entre un susurro mientras comencé a llorar, me dolía decirle aquellas palabras y mucho más sabiendo que era todo lo contrario, mi cabeza me decía que me alejara pero mi corazón decía que me quedara con el
~diselo. Escuché muy para mis adentros pero no quería hacerlo, podía escuchar que algo dentro de mi me decía que se lo dijera pero tengo miedo a que el me diga que sigue queriendo a Karina y eso me duele mas~
-ven, vamos por un helado, quiero que me cuentes lo que te pasa- dijo mientras me jalaba pero yo me negué rotundamente
~sin previo aviso el coloco sus brazos sobre mi cuello y piernas para después cargarme y llevarme a no sé dónde, no tuve más opción que enterrar mi cabeza sobre su pecho mientras rodeaba mis brazos sobre su cuello~
ESTÁS LEYENDO
Enamorada de un narcotraficante
JugendliteraturLizz es una chica divertida y alocada con un gran corazón Ella tiene a su mejor amiga Karina y a su novio Alan todo iba bien en la vida de Lizz hasta que un día se entera de que su amiga tiene un novio que además es narcotraficante, pero al mismo m...