"Entre tú y yo" 2Dle- One-Shorts

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Y aunque me lo haya pedido no podía... Sus ojos me cautivaban, pero era demasiado débil para verlo directamente. Así que aproveche la luz de la luna y lo mire débilmente con mejillas rojas...

Le sonreí

Y me sonrió

Era el momento más lindo que había tenido...

Recuerdo esa noche con claridad... ¿Acaso no podría solo olvidar que paso y seguir con mis planes? ¡No! ¡Definitivamente no podía! Él estaba en mi mente... Solo no podía sacarlo.

Esa noche en aquella fiesta todo había cambiado para mi y mi mejor amigo de hace tres años.

Stuart es un chico super amable y muy lindo conmigo, es respetuoso con las chicas y un poco torpe algunas veces. Tiene unos lindos cabellos azulados y cuencas oscuras, es muy delgado que cuando lo abrazo puedo redearlo completamente con mis brazos.

Aquel viernes mi amigo Kris nos había invitado a una fiesta en su casa para celebrar su cumpleaños. En verdad una gran fiesta. Estaba casi toda la escuela ahí, y pude hasta llegar a ver a mi maestra de Ética. Kris cumpliría 18, así que fue en verdad fiesta con bebidas alcohólicas en su mayoría cerveza, tequila y vodka. Yo decidí beber esa noche solamente vodka, mientras Stu solo tequila.

El ambiente en verdad estaba genial. Música electrónica hacia vibrar las paredes de su gran casa y todos estaban divirtiéndose. Llegaron muchos hasta embriagarse con tanta bebida y movimientos de baile.

Yo y Stuart nos apoderamos de una esquina de la sala y empezamos a decir tonterías para reírnos. Me sentía algo mareada, por lo cual cada cosa tonta que decía me daba una risa enorme. Hasta sierto punto, Stuart y yo nos quedamos viendo por un pequeño lapso de tiempo, pero aparte la mirada porque de la nada me puse nerviosa, y no solo por estar en las redes del alcohol.

-Ey Noods, vayamos a caminar. El ambiente se está volviendo un tanto ensordecedor- le seguí al patio con una risita

-¿En verdad te incomodaba? Yo digo que estaba super genial-le dije una vez afuera. Él le dio un gran sorbo a su tequila

-Aquí no hay nadie, solo estamos los dos y absolutamente nada de ruido- se recargo en mi hombro. Se sentía como recargaba el peso de su cuerpo en mí

-Stu... ¿Quieres que nos vayamos a casa?

-¿A tú casa? ¿O a la mía?

-Estás algo ebrio- reí sabiendo que era verdad aunque yo también lo estuviera aun estaba al borde de la razón

-Solo vayamos a algún lugar sin ruido. La cabeza me está matando

No fuimos directo a su casa, según dijo, solo estaba su hermana menor porque sus padres habían ido a visitar a sus tíos por un fin de semana. Le mandé mensaje a mi madre avisando donde estría, y como Stuar se lleva muy bien con ella, acepto sin ningún problema.

-Oh espera...- paró en seco después de abrir la puerta- mi hermana tuvo una pijamada en casa de una de sus amigas. Así que no hay nadie- me dijo a sus espaldas mientras se tocaba la cabeza con una mano. Reí por su pensamiento olvidadizo. Estaba mal y solo lo negaba

Me senté en el sillón quitándome mis zapatillas. Stuart torpemente se dejó caer haciéndome dar un pequeño brinco.

-¿Quieres quitarte ese vestido? Mi hermana tiene ropa cómoda- dijo apenas con la cara en el sillón

-Tonto. Tengo 20 años, tu hermana 15, su ropa no me va a quedar- reí

-Entonces usa una de mis playeras. Tal como la misma ves que unos idiotas te rompieron tu vestido hace tres años... En la fiesta de graduación...- dijo casi sin voz, se le veía cansado por el dolor de cabeza