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Taeyong había conocido a Choi Seunghyun en una de las sesiones fotográficas para su marca de ropa Booming System by TY. En ese momento, Seunghyun al igual que él, empezaban con su carrera en la industria de la moda, él como diseñador y el otro como modelo.

No fue amor a primera vista ni tampoco una atracción instantánea, de hecho pasaron varias sesiones para que cruzaran un par de palabras. Y fue hasta un par de meses después cuando ambos se encontraron en un evento de moda que Seunghyun invito a salir al diseñador, de ahí las cosas simplemente se dieron.

El inicio de su relación marcó de igual forma la llegada del éxito profesional para los dos. Taeyong empezó a ser reconocido, primero en los círculos de moda alternativa y poco a poco en la alta costura, Seunghyun por su parte empezó a colarse en las pasarelas de moda y después de un tiempo logro salir en editoriales importantes por Corea y Japón. Ambos eran felices y se sentían plenos con su relación, y justo cuando parecía que no podía ser mejor, esta se dio a conocer públicamente. Hacia un tiempo habían acordado mantener un bajo perfil en cuanto a ello, por temor de que la noticia de una relación afectara sus carreras, más que nada la de Seunghyun. Pero al final resulto que el hecho de hacerla pública les dio más publicidad positiva de la que hubieran creído, un diseñador de modas y un modelo juntos, supusieron que sonaba como algo de un drama para los demás.

Pasó un año en ese estado de euforia y felicidad durante el cual se relación de mantuvo más o menos estable, poco después de su aniversario se comprometieron. De ahí las cosas fueron en picada, aunque si Taeyong era honesto consigo mismo empezaron a ir mal mucho antes de su compromiso.

El éxito laboral de ambos implicaba poco tiempo para ellos como pareja, mientras Seunghyun se la pasaba de viaje para las pasarelas y sesiones fotográficas había días en los que Taeyong no dejaba su estudio por estar cosiendo y diseñando. Poco a poco se distanciaron, quizás en ese momento hubiera sido mejor terminar o darse un tiempo, pero dado el tiempo que llevaban juntos su relación se había convertido en una especie de manta de seguridad de la cual era difícil deshacerse. Por eso en lugar de separarse se comprometieron esperando que las cosas se arreglaran.

No lo hicieron.

La presión de planear una boda no hizo más que desgastar más su de por si extenuada relación. Hubo más discusiones sobre cosas nimias como los centros de mesas y a un mes de casarse terminaron viviendo separados. Fue en ese punto que Taeyong supo que la boda no podía continuar, pensó en hablar con Seunghyun seriamente al respecto y quizás aplazar la boda. Sin embargo aquella conversación nunca tuvo lugar, no del modo que la planeo en su mente, al menos.

Fue una noche en la que había acudido a un coctel de un amigo diseñador que todo se vino abajo. Había ido acompañado de Jaehyun y Doyoung, a los que invito para que le hicieran compañía, en algún punto de la noche los perdió de vista entre tanta gente y mientras los buscaba, en una de las esquinas del lugar le pareció ver a Seunghyun. Aquello le pareció extraño pues este le había asegurado que estaría en Busan hasta el día siguiente, cauteloso se acercó, temiendo que lo hubiera confundido con alguien más, resultó que no lo había hecho.

Ahí en esa esquina estaba Seunghyun besando a alguien más, de pronto el modelo se percató de la presencia de su prometido y se separó bruscamente del otro. Taeyong simplemente se dio media vuelta dirigiéndose a la salida del lugar mientras el otro gritaba su nombre intentando alcanzarlo.

- Taeyong – fue a unos pasos del club donde se celebraba el coctel que el otro al fin pudo alcanzarlo sujetando su muñeca – yo... -

- ¿Cuánto tiempo? – preguntó de inmediato el diseñador –

- Un mes... - admitió Seunghyun después de un largo silencio -

- Pudiste decirme, – lo interrumpió Taeyong dirigiéndole una mirada de profunda tristeza – aunque no te estoy culpando enteramente de esta situación, debimos hablar antes –

No HoneyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora