Un placer que se volvio en costumbre

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Después de aquella noche todo volvió a ser lo que era antes... (por un rato)
Me hablabas como si nunca hubiera pasado nada.
Eramos los mismos de hace algunos meces.
De cierta manera me gustaba esto entre tu y yo, sabía que no iba a haber ningún futuro, pero me gustaba el hecho de pensar que si.
Nos veíamos muy poco, por motivos de la distancia, eso es obvio.
Y cuando me veías solo lo único que te gustaba era tocarme y besarme, esa siempre fue tu manera de “conocerme”, pues nunca tuvimos una buena conversación...nada.
Me invitaban siempre a varios lugares en los que tu siempre estabas.
Nunca me gusto ir a los tokines de rock solo iba por la estúpida idea de poder verte.
Lo que no sabia es que ese fue el ultimo tokin al que fuimos juntos.
Al llegar tu ya estabas ahí esperándome (específicamente no a mi si no a tus amigos que se habían ido conmigo).
Te veías tan guapo....
Tan tu...
Con esa chamarra, que te hace ver tan sexy....
Me viste y me abrazaste, estuvimos toda la noche juntos, debes en cuando nos besábamos...
Ya empezaba hacer frío, decidí ir por mi chamarra que estaba en aquel coche que sabia toda nuestra historia, (algo muy irónico de decir, pero muy cierto).
Me acompañaste, y cuando estábamos afuera del coche me tomaste de la cintura y me jalaste con tanta dulzura hacia ti, me besaste de una manera que no podría describir, sentía como tu mano bajaba lentamente de mi cintura hasta mis nalgas. Algo que siempre hacias, pero esta vez lo hacías con un poco mas de fuerza, tu otra mano estaba en mi cuello y rápidamente bajo a mi brasier... Hasta que pensé.
-Espera que mierda esta haciendo con sus manos?!?-
-Quitaselas de tu cuerpo!!-
Lo hice, te fui quitando tus manos lentamente, me puse mi chamarra, lista para regresar.
-¿Ya te quieres ir?, hay que estar aquí un rato mas, allá esta muy aburrido, que de monos así te puedo disfrutar más- dijiste.
No dije nada, pues no me urgía regresar lo único que quería era estar contigo.
Charlamos un poco, estaba hablandote de cosas que me habían pasado en la semana, pero creo que entre mas hablaba menos era el caso que me hacías.
Solo buscabas la manera de besarme,a lo que nunca me negué pues en cierto modo también me gustaban tus besos.
-Chicos hora de irnos, ya es muy noche y mañana hay clases-
Dijo mi amiga que se acercaba a nosotros.
Fue interrumpido ese placer que se había vuelto costumbre muy rápido.

-Bueno pues ve con cuidado, hablamos cuando llegues a tu casa-

-Si yo te mando mensaje-

-Vale, te quiero-

Subí al auto, y vi como tu silueta se iba haciendo cada vez mas borrosa.

Heche un suspiro hacia la ventana, que tenia tu nombre grabado.

Solo esperando los días para volverte a ver...

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