1: Como un sueño

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Recuerdo él día en que mi madre me entrego esta libreta, quien diría que meses después me diagnosticarían leucemia terminal, mi madre dijo que recordara que a pesar de todo sonriera a la vida, todo esto parece un sueño, pero jamas lo fue, mi madre corrió a mi habitación de hospital llorando, por saber que a tan corta edad tendría esta enfermedad, no tenia nada de que preocuparse le dije, sabía que si le decía que al fin y al cabo todos morimos, ella lloraría mas de lo que ya lo hacia, recuerdo haberle dicho que no se preocupara, que yo sería su ángel guardián y que la protegería del estúpido de papa, ese hombre era alcohólico, detestaba que llegara a tan altas horas de la madrugada y empezara a discutir con mi madre, me molestaba demasiado, mi madre terminaba llorando como una tonta mendigando amor, eso no debía hacerlo, pero jamas le puse un alto.

Recuerdo despertar cada mañana en aquellas paredes blancas y sollozar en silencio, sabia que un día cualquiera no despertaria, que un día cualquiera mi madre lloraría desconsolada, no me gusta eso, no me gusta preocupar a mi mama, pero por culpa de esta leucemia de mierda, ella llorara mucho y eso es lo que menos quiero.

Recuerdo haber escuchado a mi madre pelear una ultima vez antes de que se quedara conmigo en aquellas paradas blancas, me sentía sola, muy sola.

Mi madre era esa clase de persona que llora por todo, él doctor llamo a mi madre aquel día y le dijo que no había cura, que solo había que esperar lo peor, mi madre se quedo a mi lado y lloro como nunca, ella no quería pensar eso, pero le agarre la mano y negué con la cabeza. "No hay nada que hacer." recuerdo haberle dicho con pesadez.

Ella sonrió y me acaricio mis mejillas rosadas y me abrazo, fue de esos abrazos que te hacen entender que les dolerá mucho cuando te vayas, de esos abrazos que te hacen entender tantas cosas.

Mi madre ya no sonreía, ahora lloraba.

Colores Vibrantes (En Emisión)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora