*3* / UN DÍA EXTRAÑO

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Llegue lo mas rapido que pude a casa, justo y como pensaba estoy de nuevo sola. Esa mujer me las va a pagar, ahora por su culpa estoy expulsada, ¡No lo puedo creer!. De seguro que toda la plata para la escuela la malgasto, es obvio, que tonta fui, con razón siempre despues del trabajo llegaba con cosas nuevas, no había ni un solo dia que no llegara con cosas.

Ahora en mas, no me importara nada, que voy hacer de mi vida si no hago una carrera y menos si no termino mis estudios. Mejor para sacarme todo este estres, me daré una ducha.
Dejo mi mochila en la mesada, y subo las escaleras hasta llegar a mi habitación. Me saco todo rastro de ropa y me encamino hacia el baño, una vez dentro, abro la canilla de la ducha y espero a que se caliente el agua.

Una vez que me seco todo el cuerpo, salgo del baño y voy hacia mi habitación, ya cambiada agarro mi celular y le pongo los auriculares. Pongo lana del rey,
Me encanta escucharla, me hace alejar de todos los pensamientos negativos, me relajan sus canciones.

Caigo en un profundo sueño hasta que despierto, agarro mi celular, son las seis de la tarde, no puede ser, dormi toda la tarde.
Me levanto, al hacer eso, escucho un ruido de llaves ser metidas a la cerradura de una puerta, que raro, Karla no llega después de las nueve, que asco no quiero ni verla.
Salgo de mi habitación, la voy a encarar, le voy a maldecir tantas cosas. ¡La voy a matar!.
Bajo las escaleras lo mas rápido posible, al hacer eso, no veo a nadie, de seguro debe estar en la cocina.
Camino lento y seguro, al llegar veo su eslpada, al parecer esta acomodando cosas.

-¡Mama!, tú y yo debemos hablar muy seriamente, ¡Como pudiste dejar de pagar mi escuela! ¡No ves que por tu culpa ahora no tengo futuro!-

Grité, ella se da la vuelta y me mira con una sonrisa, empiezo a enojarme y demaciado, cómo se atreve a sonreírme asi.
Ella camina a paso lento, no lo veo venir, cuando siento una apicazon en la cara. Me golpeó.

Me siento rara, extraña, es muy raro lo que siento, mis lagrimas acumuladas en mis ojos no caen, es cómo si el tiempo se hubiera detenido.
Mi cuerpo no reacciona, mi vista se nubla, pero me recompongo y veo, veo a mi madre con un cuchillo, no entiendo que es lo que pretende hacer.

-Hay hija, hijita- decia esa mujer que se hacia llamar madre. Habia sacado unos tomates y los habia enpezado a cortar.- Date cuenta que no me importa si no tienes futuro, ya me da lo mismo. Desde que tu padre nos abandono, todo fue tu culpa, el se fue y nos dejo tiradas como si fueramos cualquier cosa, y eso porque ya no te aguantaba mas -

Ja y ahora yo tengo la culpa, esta demente esta mujer.

-¿Disculpá? ja ja ¿Yo tengo la culpa? ¡No lo creo!, ¡Es tú culpa¡, el me abandono porque ya no te aguantaba a ti, me parece que tu no le dabas la atención suficiente en la cama- le dije mirandola con una sonrisa cínica.

Al decirle eso su cara paso de una normal a una demoníaca.
Antes que pueda decir algo, salgo corriendo hacia la puerta, ya no podia estar encerrada ahi, respirando el mismo aire que ella, a todas esas cosas que me dijo, no se lo voy a pardonar jamas.
Abro la puerta y salgo corriendo, no se para donde ir, ya controlandome, camino por las calles, se me ocurre ir a la plaza que esta a la vuelta de casa.
Al llegar me siento en una de la bancas, ahora me siento un poco mejor, creo que fue lo mejor venir hasta aqui.
Miro a cada persona que camina, se ven felizes, los odio.

Al recorrer la mirada hacia cada personas veo un tipo muy extraño, parado alrededor de unas cajas, en un callejón. Me da mucho miedo, pero lo mas extraño esta vestido con un traje de calavera. Si que hay gente loca en este mundo, mi mundo. Mejor sera irme de aquí, ya esta anocheciendo y además pareciera que ese tipo esta viendome fijamente.
Me levanto de la banca y casi corriendo me voy de alli.

Al llegar a casa, como no tengo llaves, toco la puerta dos veces, al hacerlo la puerta es abierta por esa mujer; "Mi madre". Al verme su cara pasa de una tranquila a una intranquila, en eso me agarra de mi brazo y me hace entrar a la casa de un tiron.

-¡¿Oye que te pasa?!, ¡¡Sueltame, ¡¡Sueltame!!- me tiró all piso y se subio encima mio.

- Mira niñia estúpida ya me canse de tus estupideces, ojala no hubieras nacido, por tu culpa, ¡POR TÚ CULPA TU PADRE ME ABANDONO!-

Me empezo a gritar, a darme manotazos a pegarme en la cara. Con todas mis fuerzas la empuje hacia adelante y esta callo al piso. Sonreí.

-Jajaja que estupida eres madre, tu eres la culpable, tu, tu, tu no fuiste capas de darle lo que el quería, asique no quieras echarme la culpa, hacerme sentir mal, porque no lo lograste antes....No lo lograras ahora...

1/4/19.

LA CACERÍADonde viven las historias. Descúbrelo ahora