C2: Metro

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Madrid, 2018

Ira

No me puedo creer que haya vuelto a olvidar las llaves dentro de casa, papa y mama me van a matar como vuelva a llegar otro día llamándoles para que me habrán, soy en definitiva, un desastre andante.

Son las 8:05 de la mañana, no se como lo hago pero siempre me levanto sobre las 6 para irme con tiempo a la universidad y siempre acabo corriendo para no perder el metro y perderme la primera clase, aunque siendo sincera muy interesante no está siendo la carrera de periodismo. Cuando hice la solicitud de la universidad para estudiar periodismo pensaba que iba a ser mucho más dinámica de lo que está siendo hasta ahora, pero también es que solo es el segundo año, a lo mejor para tercero cambia o cambio yo de carrera.

Antes de montarme en el metro me aseguro de mandarle un mensaje a Mara, para que sepa que ya estoy dentro del metro y que no se quede empanada cuando llegue a su parada. Mara es una de las mejores personas que he podido conocer desde que me vine del internado, es una rubia peligrosa, pero no la típica tonta, es una persona muy alegre, muy divertida y que pase lo que pase sabes que vas a poder contar con ella, y me alegro mucho de haberla conocido.

Cuando llegamos a la parada de Mara, nos saludamos solo con un beso, mucha gente se puede extrañar por que solo nos saludemos con un beso y no con dos, pero entre nosotras ha crecido tanto la confianza, que no veo necesario darnos dos besos que son más de extraños.

Mientras hacemos nuestro trayecto matutino hacia la universidad, hablamos de todo lo que ha pasado a lo largo de todo el finde, hasta que nos llega una foto a un grupo que tenemos con nuestro mejor, Edu, mejor dicho Eduardo, en la que el personaje de Edu dentro de un cubo de basura y debajo de la foto ha puesto -solo digo que esto fue al principio de la noche, no queráis saber como acabé, los italianos son peores que nosotros-. Edu se había ido a estudiar segundo y tercero de periodismo a Italia, le gustan demasiado las las italianas y los italianos, pero también hizo que su nona viviese allí y hacia mucho tiempo que no pasaba tiempo con ella.

Mientras Mara está hablándome de una practica que había que entregar hoy, la cual no he hecho, me he puesto a pensar en como una persona puede coger tanta confianza con dos personas que no conoce de nada en menos de un año, y poder llegar a considerarlas como amigos de toda la vida, si es que es verdad que yo no puedo hacer la comparación de si puede demostrar una persona nueva en menos tiempo, que una que lleva contigo toda la vida, no puedo hacer esa comparación simplemente por que nunca he tenido un grupo de amigos fijo, todos los años mis padres me cambiaban de internado, los primeros dos años los pasé en Londres, los dos siguientes en Australia y los últimos dos, los pasé en California. Lo que no entiendo es que mis padres, con lo que les costó poder tenerme, me mandaran cada dos años a un internado nuevo, se supone que si tienes una hija es para pasar tiempo con ella, no querer deshacerte de ella.

Yo entiendo que al ser los dos jueces no estén mucho en casa, y prefieran que su única hija tenga una educación excelente, que tenga idiomas y todas estas tonterías, pero cuando tienes 15 años y te rompen el corazón lo único que necesitas es un abrazo de tu madre para que te consuele y no un frío abrazo de una profesora de inglés.

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