Una situación de amor-odio

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Luego de nuestro pequeño festejo nos fuimos para nuestros respectivos hogares, al llegar a mi casa busqué a mis padres emocionada para contarles como me fué el día de hoy. Pero toda esa felicidad se esfuma cuando escucho estruendos en el cuarto de mis padres.

Ellos siempre salen peleando literalmente por cualquier cosa. La última vez que se pelearon por una una cucaracha muerta en el suelo, por una pinche cucaracha!?!

Ya con mi tristeza montada, me dirijo hacia mi cuarto por que ya sé que es lo que viene. Al abrir la puerta me encuentro con mi hermanita debajo de mi escritorio, cuando ella está triste va a mi cuarto y se esconde debajo de mi escritorio por que se siente "segura" allí abajo.

-¿Nayely...?- ella asoma su pequeña cabesita

-¿Si...?-

-Sal de ahí, hermanita- trato de sacarla de allí pero es imposible ya que hace fuerza, -...Vamos...-¿Como ella puede tener más fuersa que yo que soy la mayor?

Se escucha otro estruendo, ambas damos un brinco mientras que Nayely se hace bolita mientras tiembla y empieza a sosollar.

-No quiero...-

-No es que tú quieras, es que yo quiero que no estes aquí debajo- y es ahí que terminé sacandola de su pequeño escondite.

-¿Por que pelean todo el tiempo...?-murmura con lágrimas en los ojos,-quisiera que ya dejen de pelear..- la abrazé, gracias a los dioses del rock que mi cuarto está lo bastante lejos como para poder escuchar solamente los estruendos. Pero ahora tengo que preocuparme a sacarle algún tema a mi hermana, soy mala en empezar una conversación pero siempre me sacrifico, por ella.

-Entoncess... Por qué pelean ahora?-

-Por que *sob-sob* se perdieron las llaves del carro...-Así de pasa'os son mis padres (·_\)

-Weno... Por lo menos están peleando en el cuarto-mi hermana asienta con su pequeña cabeza sintiéndose un poco mejor.

Y así seguimos hablando hasta que se queda dormida, así que la cargué hasta su cuarto y la puse cómoda. Te juro que ya se me desapareció la grasa de los brazos de tan pesada que era.

-Well, por lo menos dejaron de discutir...-me digo ya que ver que ambos de mis padres estan acurrucados, ya dormidos. ¿Que si así son siempre? Sip

Doy una gran bostesada, digo las buenas noches para mi misma mientras me dirijo a mi cuarto

\m/\m/\m/\m/Next day\m/\m/\m/\m/

Me levanto como siempre, sin ganas de vivir por ir a la marrrdita escuela.

Es que esto es absurdo, ¿¡¿A quien netas se le ocurrió que hay que ir a la escuela por la mañana cuando a la mayoría de la gente solo les importa respirar que pensar?!?

Como sea, voy a darme una ducha. Busco mi ropa, mi toalla y mi esponja, pero hay un problema: no encuentro la esponja... Otra vez...

-Oh she's gonna be so dead...-susurro para mi misma mientras abro la puerta de mi cuarto de cantaso -¡¡NAYELYYY!!-Grito en dirección a su cuarto sabiendo que se está bañando con mi esponja¡Mi esponja!

Al no obtener respuesta alguna me dirijo a su habitación.

- ¡¡Nayelys Marí Méndez Mendosa¡- la llamé por lo primero que se me vino a la mente mientras tocaba la puerta con desesperación -¡¡Deme mi esponja maldita--!! - Me interrumpe abriendo la puerta lentamente estirando el brazo con la esponja úmeda aún con espuma de tanto jabón que utiliza mi hermana. Pongo cara de asco

-¡Ay por favor! Ni que me frotara el trasero con él-habla mi hermana al otro lado de la puerta al no cojer la esponja

-Todo puede pasar--ey!- me avienta la esponja por el comentario y cierra la puerta de golpe -¡¡Pues gracias!!- y me largo

-¡¡Denada!!- ante todo, modales

Band BatlesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora