Esperé a Yongsun sentada dentro del coche con el móvil en una mano mirando varias redes sociales, y con el papel que tenía escrito el número de la chica de la cafetería en la otra. Dándole vueltas pero sin hacerle caso. Ni se me había pasado por la cabeza llamarla o enviarle un mensaje, pero tampoco había tirado el papel. Mi amiga llegó y se sentó en el asiento del copiloto. Le pregunté por el examen. Venía bastante feliz, pero quería corroborar que le había salido bien. Solté el móvil junto al papel para centrarme en conducir.
- ¿La vas a llamar? - preguntó tras unos minutos de silencio.
- ¿A quién?
- A la chica de la cafetería.
- Ah... Pues no, no voy a llamarla.
Asintió. Miraba por la ventanilla mientras la radio nos brindaba música. Su expresión había cambiado. Ya no estaba feliz como cuando llegó. Intenté entablar una conversación pero le costaba seguirme y me respondía de forma algo fría. Solo había una cosa que podía hacerla hablar cuando estaba enfadada: la comida. Cambié la ruta y le dije que la invitaba a una hamburguesa en su sitio favorito. Se le iluminó la cara, aunque intentó disimularlo. Al llegar, tiré el trozo de papel que la molestaba. No estaba segura de que era así hasta que vi su expresión de sorpresa.
- Pensaba que la acabarías llamando - me dijo mientras estábamos esperando en la cola.
- Dije que no iba a hacerlo.
Mi tono era más serio de lo que había querido expresar y sonó muy tajante, tanto que dimos por terminado aquel intento de conversación. Me sentí algo mal, no quería haberlo dicho así.
- ¿Es esa chica la que te interesa? - pregunté queriendo reavivar el buen ambiente.
- ¿Qué? ¡No! No es ella... - se sonrojó, me resultaba tan adorable que le diese vergüenza.
- ¿Entonces?
Justo en ese momento, nos llamaron, era nuestro turno para pedir. Tenía mucha curiosidad por el tema pero parecía que Yongsun no estaba por la labor de contarme nada. Estuvimos un rato hablando de cosas sin demasiado sentido hasta que nuestro pedido estuvo listo. Quería haberme sentando a comer con tranquilidad pero Yongsun cambió mis planes. Recordó que tenía que haber entregado la documentación necesaria para matricularse en el máster para el siguiente año. Sí, era su último año de carrera, pero seguía siendo tan despistada como si estuviera en secundaria. Teníamos el tiempo justo así que pedimos que nos pusieran las hamburguesas para llevar y nos montamos en el coche.
Ella comía a la vez que buscaba papeles en su carpeta mientras yo me moría de hambre. Ella maldecía en voz alta cada vez que no encontraba algo mientras yo escuchaba música sin prestarle demasiada atención. Llegamos y bajó del coche corriendo mientras yo buscaba aparcamiento. Sin embargo, había tantísimo tráfico y tan poco espacio que antes de que pudiese aparcar me llamó para que fuese a por ella.
- He llegado por los pelos - comentaba mientras se ponía el cinturón -, y porque la señora ha sido maja y me ha aceptado los papeles. Pero realmente acababa de cerrar.
- ¿Cuándo vas a dejar de ser un desastre Yongsun?
Me golpeó la pierna con suavidad mientras nos reíamos.
- No sé qué habría hecho sin ti Byul.
- Perder el plazo y no entrar en el máster.
Me volvió a golpear y nos volvimos a reír. Estuve intentando molestarla por su despiste hasta que mi estómago rugió pidiendo el almuerzo que no le había brindado. Yongsun no podía parar de reír a mi lado.
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My heart wants me dead
FanfictionUna pequeña historia sobre el Moonsun. Constará de unos cuatro o cinco capítulos.