Un pequeño nido ✨ (Kookmin)

✨Calor✨

-Kookie? - Murmuró el Omega, caminando hacia su pareja, mientras lo hipnotizaba con sus movimientos. 

El alfa lo veía sin poder entender cómo su voz podía ser tan dulce, pero su actitud y su aroma desprendían un aura sensual y seductora. 

-Aquí estoy amor - Cerró los brazos en torno a su cintura, para mantenerlo cerca mientras iba dejando un pequeño beso por toda su cara. 

El omega sonrió rodeando con sus brazos el cuello del alfa mientras se perdía brevemente en sus atrayentes ojos. 

-Vamonos alfa… te necesito - Dijo con un leve rastro de incomodidad en el tono de su voz. 

Jungkook tomo a Jimin entre sus brazos para llevarlo hasta la habitación del nido dejándolo parado en la puerta antes de abrirla para que el pelirosa observará lo que había hecho en su interior. 

En la mente del Omega todo se puso en blanco al ver su lugar, entró con pasos vacilantes sintiendo la suave textura bajo sus pies desnudos y el aroma de su Alfa en todos los rincones. Toco levementes algunas luces haciéndolas girar apreciando así los pequeños destellos a su alrededor. 

Se dirigió hasta su nido, acostándose allí mientras giraba lentamente dejando ir leves risitas de felicidad, para luego dirigir su mirada a su esposo que no había dejado la puerta. 

-Ven aquí mi alfa- Mencionó haciendo pequeños gestos con las manos, viendo como su pareja se iba acercando al mismo tiempo que se desvestia abandonando las prendas en el suelo, hasta solo quedar en interiores. 

Se acostó al lado de su Omega mientras le acariciaba lentamente el rostro para borrar los rastros de lágrimas que había dejado escapar hace un momento sin darse cuenta por la emoción. 

-Te amo… - Aseguró con una leve sonrisa, sintiendo como su pareja se apegaba a su cuerpo. 

El omega se acercó lentamente a los labios de su esposo empezando un suave y delicado beso, que en poco tiempo se volvió más demandante. Jungkook acariciaba cada parte del cuerpo de su adorado pelirosa. 

Pronto abandonó sus labios para dejar un camino de besos que descendían por su cuello hasta dejar uno húmedo justo sobre la marca. 

Continuó su camino hacia el pecho del omega saboreando lentamente las dos perlas rosadas que se hallaban allí, al tiempo que se deleitaba con la respiración errática y los jadeos que escapaban de entre esos rellenos y dulces labios. 

Siguió descendiendo hasta jugar con su ombligo y colocar un beso especial en la zona del vientre bajo del Omega. Se irguió levemente para ver a su pareja, con las mejillas sonrosadas, los cabellos despeinados y las respiración irregular. Todo en él le parecía una obra de arte. 

Cuando pudo captar su mirada solo le dedico una sonrisa seductora antes de volver a bajar con la vista fija en su pequeña y sonrosada erección, definitivamente su omega era hermoso desde donde se lo mirase, pero eso nadie más que él lo iba a saber. 

Dejó algunas lamidas y besos en el glande de su pareja para luego tomarlo por completo en su boca empezando un ritmo lento pero constante. El pelirosa se removía en el nido, gimiendo levemente, mientras llevaba las manos hacia los cabellos pelinegros regalándole pequeños tirones, mientras sentía la humedad correr por entre medio de sus piernas. 

Sin poder soportarlo más se dejó ir entre los labios de su pareja, mientras veía como este lamia el excedente. Hizo un pequeño mohín mientras miraba la sonrisa del alfa y sin decirle nada se giró dándole la espalda mientras levantaba levemente trasero. 

Jungkook dejó escapar una pequeña risita al verlo y puso su boca devuelta a trabajar, pero esta vez en el agujero de su pequeño. Se entretuvo un rato allí saboreando y penetrandolo con la lengua para luego subir por entre los glúteos y la espalda de su pareja dejando más besos y algunos marcas allí. 

El alfa recargo levemente su cuerpo sobre el de su omega, entregándole así una sensación de protección y calidez, al mismo tiempo que le dejaba sentir su erección restregandose levemente por su trasero. 

-A-alfa - Murmuró con algo de dificultad sintiendo como lentamente aquel gran trozo de carne ingresaba en su interior. 

El pelinegro se movía a un ritmo lento, tratando de no dejarse llevar por el aroma del pelirosa, pero todo dejó de dar efecto cuando lo escucho gemir con necesidad su nombre. 

Jungkook se separó un poco del más pequeño para así volver a colocarlo en la posición inicial. Alzo sus piernas llevándolas a sus hombros, mientras no apartaba la vista de los ojos del omega, que se encontraba un poco mareado por el repentino cambio de posición. 

Lo penetró rápido manteniendo un ritmo fuerte y desesperado, viendo como Jimin gemía, apretaba fuertemente las prendas debajo suyo y arqueaba la espalda. 

No se detuvo, no podía cuando todos sus instintos le pedían llenarlo y crear al fin su descendencia, no podía cuando su omega le pedía más entre jadeos y gemidos, no podía cuando en su mirada había anhelo y deseo. 

Soltó sus piernas y se abalanzó sobre su cuerpo para abrazarlo mientras terminaban de construir sus orgasmos, mientras el pelirosa lo rodeaba con brazos y piernas casi desesperadamente. Con una fuerte embestida el alfa anudo dentro de su omega y este se corría entre sus vientres tratando de recuperar un poco de aire. 

Se mantuvieron abrazados en lo que esperaban que el nudo se desinchara repartiendo leves caricias y algunos besos esporádicos. 

-Te amo- Susurro el omega, con todo el amor que podía transmitir en su voz. 

-Te amo-. Correspondió el alfa besando sus labios para luego reiniciar con la unión de sus cuerpos. 

Se mantuvieron así en lo que duro su periodo de calor, dentro de ese ambiente de amor, ternura, sensualidad y privacidad. Tomando solo momentos para dormir en donde Jungkook aprovechaba para escapar unos minutos a la cocina a llevarle agua y comida a Jimin, para luego solo volver al inicio.