Capitulo 1

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 - ¿Cuantas veces te tengo que repetir que eres la única para mí? – Dijo Christian con una cansina, pero blanca y perfecta sonrisa.

 - Lo suficiente para que le quede en claro a todas las ilusas que creen tener oportunidad con mi novio – Dijo Camile recalcando el “Mi” en la oración.

Y con esto Alejandra sintió algo muy parecido a un puñal, a pesar de saber que no iba dirigido “exactamente” para ella. Camile probablemente nunca lo habría dicho de saberlo, era una chica tan dulce… Tan linda: Ojos verdes hermosos y un cabello rubio hasta la cintura, mas su cuerpo de modelo de trajes de baño. Todos le tenían envidia, inclusive Alejandra, aunque nunca se lo aceptaría a si misma. ¿Cómo podía Camile ser su mejor amiga? No se lo explicaba. ¿Cómo podía ver al novio de su amiga de esa forma? Se detestaba por eso.

-        ¿Haremos algo hoy mi amor? – Hasta su voz era preciosa y cantarina.

-        Estar contigo me basta mi niña,  pero pensaba ir al parque que esta al Este, ese que tanto te gusta…

-        ¿Dónde me pediste…? - Preguntó al aire, emocionada.

-        Donde tuve el valor de pedirte que estuvieras conmigo. – Dijo Cristian sonriendo, y se veía sincero.

Y eso fue suficiente para el corazón de Alejandra, se alejó del lugar intentando no llamar la atención de ninguno de los dos tortolos, aunque estaban tan concentrados uno en el otro que no la notarían. Fue hasta su casillero, que gracias a Dios estaba muy alejado del resto, y aprovecho estar completamente sola para dejar escapar ese nudo que tanto atormentaba su garganta. Y varias lágrimas silenciosas empezaron a caer mientras golpeaba su cabeza contra la puerta del casillero repetidas veces.

- FlashBack -

Primer día de clases y Alejandra ya ansiaba las vacaciones,  este nuevo instituto no era como en las películas,  aun esperaba que de algún milagro se sentara al lado de su próxima mejor amiga, que algún profesor sexy hiciera su aparicion o tropezara en algún momento con un chico tierno, que hiciera caer sus libros, se disculpara y cuando levantara la vista se encontrara con los ojos del amor de su vida.

Pero estaba en el casillero, sola, viendo a su peluche de conejo “Colin”. Se podria decir que la ve con lastima.

-        ¡Deja de verme así Colin! Está bien, no fue la entrada triunfal que pensé todo este tiempo, pero cuando estas en el fondo, no puedes hacer más que mejorar. – Dijo optimista – Piénsalo, cientos de personas aquí, cientos de amistades y muchísimas experiencias nuevas, no puedo esperar- y dicho esto abrazo al pedazo de felpa.

-        Ehh… ¿Con quién hablas?

Alejandra se volteo exaltada, escondiendo su amado peluche tras la espalda, y se encontró con un chico alto, guapo, moreno de ojos verdes. “Las cosas pueden mejorar” Pensó.

-        Co-con nadie. – Tartamudeo y esbozo una sonrisa.

-        ¿Y quién es “Colin”? – Pregunto el muchacho reprimiendo una risa.

-        Pues… E-es bueno... - Medito un momento, el chico parecia bueno, ¿Que podia perder? Saco al peluche de detrás suyo – ¡El! ¡Colin! Es mi peluche favorito ¿A que es lindo?

-       Mmmmhh... Precioso. – El chico se volteo a un grupo grande de muchachos vestidos con uniforme de deporte esbozando una sonrisa triunfal y gritó - ¡Gane chicos! La nueva es lunática, vallan sacando sus carteras que hoy me pagan las cervezas.

Bad LuckDonde viven las historias. Descúbrelo ahora