Parte 8

89 8 2
                                    

Cuando el timbre sonó note que la chica ya se iba, me acerque a ella y le tendí la mano con una sonrisa -Gracias por los libros, mi nombre es Annie Marks.

-Clarissa Johnson- esta chica tenia nombre de escirora, después de preguntarle si podía llevarme los libros a casa, cuando ella acepto llene el espacio en mi mochila con ellos.

Pase el resto del día con Lex, al final me perdí tratando de conocer la escuela en el tonto curso de orientación. Antes me dedique a despedirme de mi nueva amiga y salir para ir a casa, ya estaba oscureciendo.

Había gastado todo mi dinero en el almuerzo y no me quedaba ni un centavo para un taxi y volver a casa, MALDICIÓN,...debía dejar de comer tanto! Ñaaa, eso nunca pasaría

Camine finalmente encontrando la salida y camine al estacionamiento, posiblemente tendría un poco de suerte y Lexy o Clarissa seguirían ahí.

Salí al estacionamiento aunque no sabia si Lex tenia auto asi que decidi verificar pero solo había una camioneta ahí, era negra y enorme, fácilmente podría tener a 10 personas dentro, dudo que Lex pudiera siquiera alcanzar los pedales.Ella ya se habia ido y no quería rodear el estacionamiento asi que solo avance.

Ya estaba oscuro y solo se ve veía lo que estaba bajo las lámparas.El estacionamiento estaba desierto y muy oscuro, para se honesta me asustaba un poco, esta bien, mucho.

Conforme avanzaba por la grava del piso note que detrás de la enorme camioneta había unos chicos , con cada paso lograba distinguir sus rostros. ¡Eran los jugadores de futbol que vi en literatura!

Tenian botellas en sus manos y por lo visto en su voz y su carente equilibrio supongo que era alcohol, eso no se permitia en la escuela. Asi es señores, fui la única loca que había leído los reglamentos de la escuela.

Por no dejar de mirar la escena entre sus empujones mi pie se atoró en la grava del suelo cerca del lugar de aparcamiento de los jugadores y de una forma muy imbécil tropecé y cai en la grava trate de detener el golpe con mis manos que inutilemnte trataron de detener mi caída raspándose y llenando un costado de mi cuerpo con razpones.Auch

No pude evitar gritar, dolia mucho y la tierra que entraba en las heridas no ayudab.

Las miradas de los cinco chicos musculosos se dirigieron a mi , sus miradas eran de confusión , mi vista viajo hasta el chico más grande, el marscal y capitan supongo, su mirada tambien era confusa peor lo que pasó despues hizo que mi corazón sintiera un vuelco desagradable, habia dentro de mi una fuerte voz que gritaba aterrorizadamente "¡Corre!"

La mirada en el rostro del chico más corpulento era confusa,después se volvió de un aspecto furioso , al parecer a "Don rebelde" no le gustó que la niña tropezona los hubiera visto romper las reglas pero algo muy extraño y aterrador pasó después.

El chico cambió una vez más su expresión , parecía que estaba en medio de una partida de "caras y gestos" porque la bola de músculos con patas entornaba los ojos para lograr mirarme a través de la oscuridad pero cuando vio quien era sus ojos no se veían furiosos ni confusos, había algo diferente en ellos, algo más oscuro y más peligroso. Una torcida sonrisa macabra apareció cuando este se giró hacia sus otros cuatro compañeros murmurando algo como si tramaran algo, todos sonreían y voltearon a verme comenzando a caminar en mi dirección tirando las botellas al piso y yo seguía ahí tirada.

Esto no podía terminar bien....

One Step.....Donde viven las historias. Descúbrelo ahora