Academia Alderick

《4》

|| al otro lado del Puente||

<<Narra desmond>>

Una densa neblina empezaba a tapar mi visión. Con cada pasó que daba... Solo proseguía, extraños sonidos se escuchaba a lo lejos... Aún así seguía. Estaba con mi sentidos en alerta en cada momento.

Un frío intenso y un silencio que dejaba mucho que desear... Pero simplemente seguí y seguí.

Pero un momento a otro, cristales... Cristales de hielo en mi dirección salieron de la nada.

Por suerte los esquíve con facilidad, pero aún así, no tenía que bajar la guardia... -Esos cristales son bastante filosos.- susurré.

Apresuré mis pasos y atento a cualquier otro movimiento inesperado.

Luego... Otro ataque a mi dirección, lo volví a esquivar, pero fue una distracción. Lianas se enredaron en mis piernas y Brazos.

Con rapidez alcance estirar mi brazo y así, alcanzar un cuchillo. las corté con rapidez y me liberé.

Los ataques seguían, pero con agilidad logré evitarlas.

Seguí adelante sin retroceder, llegue hasta punto de encontrarme en un sendero. La neblina seguía, pero empezaba a disiparse.

Significaba... ¿Que ya estoy del otro lado?- No... Eso no sería todo.- como lo imaginé, ésto aún no terminaba.

Grunidos a lo lejos se escuchaba... Sonaba como una bestia sedienta de sangre.- mí máster me enseñó bien.- me reí.

Proseguí y con agilidad logré safarme de aquellas bestias.

Pero eso no sería todo... Sentí una presencia no muy lejos de donde estaba.

ZAS... Una flecha venía en mi dirección, no me moví... Fácilmente lo agarré y lo parti en dos.

Más flechas a gran velocidad, seguían viniendo en mi dirección. Empezé a moverme de lugar en lugar, hasta llegar de dónde provenían.

Cuándo justo encaró al autor escuchó una risa y desaparece. - ¿Ah, una ilusión?- murmuré.

Entre que decía eso la neblina se disipó por completo y así dejando a la vista... Un inmenso y gran muralla.

- ¿Que es este lugar...?- me fui acercando y apenas llegué a las puertas, se abrieron y trompentas sonaron.

Decidido entré, apenas di unos cuantos pasos y una persona a lo lejos me gritaba.

-¡Hey! ¡Nuevo! -

Me puse a la defensiva.

- WoW, WoW, WoW, cálmate quieres... Vengo por órdenes del vice.- a escasos centímetros de Desmond.

Bajé mi arma, lo ignoré y seguí por mi cuenta.

-¡Hey, adónde crees que vas!- lo detiene.

Lo fulminó con la mirada y suspiró.

- Federick... Un tal Federick, ¿En dónde lo encuentro?.- aparto su mano de mi hombro y pregunto.