No llegues pronto a casa

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Llegue a casa dos horas antes. Nadie me esperaba tan pronto.

Abrí la puerta de casa y saludé como siempre, con desgana, flojito. Nadie contestó. 

Como escuché una música muy alta que salía de habitación de mis padres me acerqué. Ya estaba a unos pasos. Iba a saludar de nuevo cuando empecé a oir gritos de mi madre.

- Ohhhh que biennnnn, que gussssto.

Me paré en seco. Eso sería lo que parecía??. Tendría que haberme girado y vuelto a mi habitación pero me ganó la curiosidad. Recordaba haber pillado a mis padres teniendo sexo cuando era más pequeña, pero ya tenía 20 años y nunca había visto a mi madre con su nuevo novio. Ese contable calvo con el que llevaba casi dos años y que parecía tan tímido..... No imaginaba que podía excitar asi a mi madre!!! Me acerque un poco mas. La puerta no estaba cerrada del todo.. 

Mire con precaución y alli estaba mi madre de espaldas montandole como una amazona. Dando saltitos, subiendo y bajando su culo y todo su cuerpo. No se veía como le penetraban porque las sabanas me impedían verlo. Del hombre no se veia nada, apenas las rodillas. Podia parecer que mi madre estvuviera sola, brincando sobre el colchón pero no era muy probable. Aparte la mirada. Para mi sorpresa estaba algo excitada. En ese momento oi que mi madre le pedia.

-Dame por detrás, dame por detras..

Me quedé completamente quieta. Pude oir unos movimientos sobre la cama. Se intuia que estaban cambiando de postura. Hubo un breve silencio. Mi corazón latía a mil por hora. De repente sonó como un golpe, luego otro y otro cada vez más seguidos.

Sigue, sigue, por favor no pares, decía mi madre.

Noté como un picor ahí abajo. Sentía envidia de no estar recibiendo esos golpes. Imaginaba que mi madre estaría a cuatro patas y el contable penetrandola una y otra vez. Quería mirar pero no me atrevía. Seguro que estaban de espaldas y no era peligroso mirar. Por si acaso me agache un poco y me giré para mirar. Mi madre estaba como una perrita en celo pero lo que me dejo de piedra fue la espalda del hombre que la embestía como un animal. La primera vez que la había visto fue dos veranos atras, cuando el contable y su hijo pasaron con nosotras las primeras vacaciones de verano. Mi hermanastro estaba teniendo sexo con mi madre!!!!

Me quedé con la boca abierta. Sin darme cuenta me levanté del todo. Incluso abrí un poco más la puerta para que no tuviera dudas de lo que estaba viendo. Como las cortinas impedía que entrara mucha luz, quizás estaba confundida. Pero no, aquello que parecía imposible estaba sucediendo. Mi hermanastro y mi cama estaban juntos en la cama. Otro fuerte gemido de mi madre me hizo espabilar. 

Pero que haces?? Escóndete, tonta!! me dije. 

Despacio me giré y me fui a mi habitación. Para mi sorpresa me tumbé en la cama, me metí bajo las sábanas y empecé a tocarme imaginando que era yo la que estaba en el cuarto de mi madre recibiendo esas embestidas de mi hermanastro, que hasta ese momento me había parecido un completo idiota.

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