Dos días pasaron en un abrir y cerrar de ojos y todavía no había hablado con él desde que nos peleamos. Estaba demasiado nervioso para hablar con él y pedir perdón. Ahora esperaba que hubiera superado esta culpa, pero el sentimiento solo se hizo más fuerte.
"Fue su último recuerdo de su padre".
Recuerdo que sentí un escalofrío en mi espalda, no por el frío del agua del río, sino por esas palabras. Por mi parte, sabía perfectamente lo que era perder a alguien que amas y eso empeoró mi culpa.
Pero en parte se debía culpar a Taehyung por esta tensión, porque cada vez que me veía, simplemente pasaba sin pasar ni un ojo. Llegó al punto en que incluso Yosub comenzó a notar la incomodidad entre nosotros dos.
No pude soportarlo más, así que aquí estaba. De pie frente a su puerta, que había estado mirando durante los últimos cinco minutos, contemplando si debería llamar o no.
Levanté mi nudillo para golpear, pero la puerta se abrió de par en par. Taehyung se adelantó casi golpeando en mí. Retrocedí rápidamente antes de que pudiéramos hacer contacto y él me miró con ojos muy sorprendidos, reflejando los míos.
Esta vez llevaba un chándal azul. Me pregunté si tendría uno de cada color y tono.
Deja de salirte del camino, Ara.
"Iba a- estaba solo-"
Me estremecí por lo alto que sonaba mi voz, debido a mi nerviosismo. Me aclaré la garganta y limpié mis palmas sudorosas contra mis jeans.
"¿Puedo hablar contigo un rato?" Pregunté, mi corazón acelerado latía contra mi pecho. Hice lo mejor que pude para no parecer nervioso, pero mi voz temblorosa lo delató.
Taehyung continuó en su lugar por unos segundos más, antes de respirar profundamente. Dio un paso adelante y cerró la puerta detrás de él. Bajó los pequeños escalones y se volvió para mirarme.
"Claro que sí, puedes unirte a mi pequeña caminata", dijo. Se metió las manos en el bolsillo antes de marcharse.
Fruncí mis labios para detener la sonrisa que ya estaba empezando a formarse en mi cara. Entonces rápidamente corrí hacia él, un poco demasiado ansioso.
Mantén tu humor.
Nos quedamos en un incómodo silencio durante los siguientes minutos. Siempre caminé un paso detrás de él, ya que estaba demasiado incómoda para estar a su lado. Estaba demasiado ocupado tratando de pensar en cómo disculparme porque era raro que lo hiciera. Ni siquiera podía recordar la última vez que me disculpé sinceramente con alguien.
Finalmente, reuní las agallas para acelerar mi ritmo hasta que estuve a su lado y miré a mi izquierda, donde estaba mirando fijamente al suelo.
"Soy el tipo de persona que tiende a pensar solo después de hacer algo. Como que solo soy súper impulsivo y siempre me arrepiento al final. Y lo que había hecho era realmente estúpido y-" Estuve divagando "básicamente solo quería Decir perdón por montar tu tractor".
Dejé escapar un gran suspiro, finalmente aliviada de haberlo sacado de mi pecho. Sin embargo, todavía me estremecí por lo idiota que sonaba.
Hice clic en mis nudillos, que es lo que siempre hacía cuando estaba nerviosa. Taehyung comenzó a reírse, lo que me desconcertó.
"Ya es hora de que te disculpes. ¡No puedo creer que te tomó dos días solo para decir lo siento!"
Agitó dos dedos frente a mi cara, enfatizando lo que acababa de decir. Lo miré boquiabierta con la boca abierta, confundida en cuanto a por qué estaba actuando tan indiferente ante mi disculpa. Me molestó lo mucho que me subestimó: la maldita aldea arruinó mi imagen.
"Fue una buena práctica para ti. Deberías intentar disculparte más a menudo, convertirte en una mejor persona", dijo mientras levantaba mi barbilla para cerrar mi boca.
No podía entender por qué seguía actuando con tanta calma mientras seguía escuchando cómo me asaba. La persona normal me hubiera abofeteado antes de que pudiera haber terminado esa frase.
"¿Entonces no estabas molesto por los últimos dos días?" Yo pregunté.
"Bueno, era algo así. Pero lo superé y el resto fueron solo mis increíbles habilidades de actuación", dijo, sacudiéndose el pelo largo imaginario.
"Eso es tan infantil".
"Solo estaba tratando de ayudarte porque no sobrevivirías viviendo con la gente aquí con la actitud con la que viniste".
Mi cara se puso roja de ira cuando aparté la mirada de él. Todo este tiempo me había sentido tan culpable pensando que él estaba extremadamente molesto, mientras que él simplemente estaba jugando juegos. Él no debía tener ni idea de lo terco que podía ser.
¿Realmente espera que cambie a través de sus estúpidas acciones disciplinarias?
"Te perdono, Ara", dijo en tono burlón, antes de salir corriendo y riendo como un niño.
Lo insulté y corrí después, pero pronto me detuvo una sensación suave debajo de mi pie izquierdo. Mi estómago se desplomó mientras todas las posibilidades de lo que podía pasar por mi mente; Lentamente miré hacia abajo, moviendo mi pie.
No, no puede ser. ¡De ninguna manera! Por favor, Señor, no me hagas esto.
Taehyung se detuvo y se giró tan pronto como me escuchó gritar. Mi zapato había sido impreso en la caca más grande que había visto en mi vida. Demasiado grande para que pertenezca a un perro. El olor subió y atacó mi nariz, causando que me arrugara la nariz.
"¿¡CÓMO PODRÍAS NO VER ESTE POPO DE VACA MASIVO!?"
Taehyung comenzó a cacarear; cerró los ojos y comenzó a aplaudir como un sello mientras caminaba hacia mí. Estaba demasiado ocupada enfadándome con él como para notarlo en primer lugar.
"¡Noooo! ¡Estos fueron mis entrenadores deportivos de edición limitada hechos a medida!"
Lección aprendida. Nunca lleves nada de diseñador en el campo. Desafortunadamente para mi eso era básicamente toda mi ropa.
"Aww, deja de ser un bebé y regresemos a casa".
Puso su brazo alrededor de mi hombro, ignorando la mirada fulminante que le estaba disparando.
"Nos espera una semana interesante y si vamos a la casa de los líderes de la aldea, pueden aprender todo sobre esto".
"¿Por qué, qué está pasando?"
En lugar de responder a mi pregunta, me guiñó un ojo y me dirigió una sonrisa maliciosa.
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Farm Boy - Kim Taehyung
Fiksi PenggemarCuando Ara tiene que huir de la ciudad para evitar el ojo público, termina huyendo hacia el campo con la esperanza de encontrar algo de paz. Pero donde sea que vaya Ara, sigue el problema. Esta es su historia de encuentros incómodos con ancianas gra...