Y así,
aún abrazado a ella
hice la mortal pregunta
"¿seguro que estás bien?"
y con esa sonrisa
me miró y contestó;"No te preocupes, soy una piedra"
soltando el abrazo
comenté
"las piedras también se hunden"
y, sonriendo
subió las escaleras
mientras pronunciaba las palabras"No puedes tocar fondo cuando ya estás abajo"
Dios se apiade de mí por no comprender sus palabras a tiempo
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The memories of the soul
PoesíaSupongo que el ruido se vuelve más silencioso cuando escribo, y quiero mostraros mi silencio. No sé si es poseía, es algo así como mi vida, un pequeño vacío de nada envuelto en todo. Dedicado a mi tía, por apoyarme en todo, ser paz, ancla y apoyo...