THEA

Capitulo 1 • La Odisea

Diez años habían pasado desde que la capturaron, su cabello había crecido, su piel palideció gracias a los experimentos o como los investigadores les decían, "pruebas" , sus ojos ya no fueron los mismos,se habían quedado rojos, aunque en estos momentos debería tener veintiún años, todavía tenía la apariencia de una niña de once años, ya que las dichas "pruebas" evitaban que su cuerpo creciera de manera correcta.

Ésta se encontraba en su celda, observando en silencio las cuatro paredes que la rodeaban, pensando que hizo para merecer lo que le estaba ocurriendo, pensando en su abuela, le habían dado la noticia de su muerte dos años después de su captura , ese día fue cuando todos los que estaban en el edificio conocieron el verdadero poder de Thea, la chica estaba destruída y no dudó en hacérselos saber a todos, los investigadores y científicos le empezaron a temer pero hubo uno entre todos ellos que veía a la joven con fascinación y curiosidad, Walter Kaznyk, conocido por ser uno de los científicos más cínicos y brillantes de la A. D. I. M quién personalmente se encargó de los estudios realizados a la joven y sin piedad le administró todo tipo de sueros hasta el sol de hoy, ella le había guardado un gran rencor a ese hombre durante todos estos años y si alguna vez tenía la oportunidad de tomar venganza, lo haría. Unos golpes la sacaron de su trance , era la hora de cenar.

-Oye, aquí está tu comida- el guardia le tiró la bandeja en el suelo- come - Thea miró la bandeja con indiferencia y luego la empujó- créeme que si fuera por mí, no te traería nada y te dejaría morir de hambre- dijo dándose la vuelta para irse y en un impulso la joven tomó el vaso con líquido extraño que estaba en la bandeja y se la arrojó al guardia en la cabeza.

Éste se dio la vuelta enojado y con su paralizador, le dió una descarga bestial a Thea , ella ya estaba acostumbrada a esas descargas pero eso no quería decir que no le dejaran de doler.

-¡Eres un monstruo, una aberración y ésto es lo que te mereces!- le gritaba el guardia mientras le daba más y más descargas mientras ella se retorcía del dolor, de pronto dos guardias entraron tomándolo de los hombros y alejandolo de la joven quién yacía tirada en el suelo en posición fetal soltando quejidos de dolor -¡Ésto no acaba aquí, engendro! - seguía gritando pero luego una silueta apareció en la puerta haciendo que los tres guardias se tensaran.

-¿Qué sucede aquí, caballeros? - esa voz suave pero aterradora solo podía ser de una persona, Walter Kaznyk - Les he hecho una pregunta- habló de nuevo pero con cierta molestia en su voz.

-Em, s-solo le traía su c-cena, señor- dijo el guradia nervioso y Kaznyk lo miró con una sonrisa de lado y no era una sonrisa amigable, era una sonrisa que significaba peligro.

-Y supongo que hizo muy bien su trabajo ¿no?- dijo viendo a la joven en el suelo para después ver el paralizador en las manos del guardia.

-Señor yo lo sien- no pudo terminar ya que las fuertes manos de Kaznyk apresaban su cuello, impidiéndole respirar.

-¿Cuántas veces debo decirles que ésta chica es la joya de la organización?- preguntó retóricamente apretando más su agarre -No tienen permitido poner un dedo sobre ella, así que si descubro que hubo otro incidente como éste , los siguientes en ser "estudiados" serán ustedes- terminó de decir con una sonrisa malévola y soltando al guardia, quién tosió varias veces.

Los guardias se fueron dejando a Kaznyk con Thea, éste se acercó y la tomó en brazos,ella trataba de alejarlo pero estaba muy débil para hacerlo.

-Hora de tus sueros, querida- dijo sonriendo con malicia ,mientras que la pobre solo trataba de no llorar otra vez.

~•~

Era un nuevo día y Thea había sido levantada desde muy temprano para poder continuar con los estudios, dos guardias la escoltaban hacía la sala de pruebas, al llegar la chica vió  al señor Kaznyk y otros científicos mirando una camilla que tenía a una niña como de unos ocho o siete años atada en ésta ,la niña gritaba y lloraba desesperada.

-¿Usted cree que ésta vez funcione? - preguntó uno de los científicos a Kaznyk.

-Eso es lo que espero conseguir, pero no importará ya que aún tenemos a la joya de éste lugar-le dijo éste para luego percatarse de la presencia de los dos guardias y la chica.

Los científicos retrocedieron al ver a la chica de los ojos rojos.

- Tranquilícense caballeros, ella sabe que no puede intentar nada, ya que lo pagará después ¿Verdad? - éste puso una mano en el hombro de Thea y ella no tuvo más remedio que asentir, ella había intentado  escapar varias pero en todas fallaba.

-Bien, es hora- dijo uno de los científicos y todos menos los guardias se dispusieron a entrar en la sala de pruebas ,la niña no paraba de gritar y Thea solo veía como Kaznyk le sonreía para después acercársele.

-Pronto los dos seremos parte de la historia -le susurró en el oído y la joven se le puso la piel de gallina- Primero la niña y si no funciona ,luego va mi querida joya- dijo y los científicos metieron a la niña en una especie de cápsula ,ella gritaba desesperada como si ya supiera lo que le harían.

-Adelante- uno de los científicos bajo una palanca la cual estaba a un costado de la cápsula,ésta empezó a emitir unas luces las cuales envolvieron el pequeño y frágil cuerpo de la niña, causando que ella empezara convulsionar y a gritar frenéticamente.

-¡¿Qué esta pasando?!- preguntó Kaznyk algo enojado.

-¡No lo sabemos señor!

-¡Saquen a esa niña de ahí ahora! - gritó y ellos le obedecieron, al sacar a la niña y revisar su pulso, se dieron cuenta de que había muerto- Lástima, pero no desesperen caballeros aún hay esperanzas- dijo Kaznyk despreocupado.

Mientras los científicos hablaban entre ellos, Thea trataba de idear un nuevo plan para poder escapar, ya que ella no deseaba volver a aquella cápsula. Ella miró un momento a los científicos y se preguntó así misma ¿Porqué no daban por vencidos?. Hace muchos años atrás las instalaciones de la organización no eran más que un supesto hospital donde hacían experimentos e investigaciones pero después el ambiente se torno oscuro y conspirativo, por lo que fueron restringiendo el personal y seleccionaban a los que trabajarían allí.

Todos los científicos se volvieron más y más ambiciosos, hasta que a uno de ellos se le ocurrió la idea de hacer algo que todos concideraban una locura. Lo que querían era algo difícil de obtener, convertir a una persona en un arma electromagnética era imposible, ellos secuestraban personas y los mantenían cautivos hasta que se murieran, inventaron una especie de cápsula para poder agilizar los estudios pero aquellos rayos de luz que emanaban de la cápsula eran pulsos electromagnéticos y era obvio que una persona moriría ya que estaba expuesta a la radiación, tardaron más de 19 años en darse cuenta que las personas normales no eran aptas para lo que tenían en mente y por esa razón empezaron a capturar personas con habilidades "especiales" y a utilizarlos de conejillos de indias, algo muy normal para ellos, pero muy malo para el gobierno ,por lo que decidieron reforzar la seguridad, cambiar de instalaciones y ser cuidadosos con quiénes se comunicaban. Decidieron nombrarse A. D. I. M lo que significa Asociación de Investigación Mutacional ,para ellos ese nombre era motivo de orgullo, pero para los que conocían los horribles secretos que esa asociación albergaba y los que estaban cautivos allí, ese nombre significaba peligro.